That Night. (AOIHA) [CANCELADO]

Be careful with the blonde guys.

Había algo raro. Estaba calentito y algo a su lado estaba suavecito y blandito... Si tuviera que compararlo con algo sería con una nalga, pero no podía ser, ¿Verdad? ... ¿Verdad? Rápidamente sus ojos se abrieron, encontrándose con la imagen del rostro del primer guitarrista en frente suyo, dormido, desnudo, acurrucado entre sus brazos. Mierda.

Aoi reprimió un grito no tan masculino ante el pánico que le invadió, deslizándose lenta y suavemente fuera de la cama, con la mirada fija en Uruha para vigilar que este no despertara. Por un error de cálculos cayó de la cama, pero le dio igual, arrastrándose por el suelo salió de la habitación. Aún en completa desnudes se dirigió con rapidez a la sala, pasando en frente de unos perturbados Reita y Ruki, haciendo que este último escupiera el café que tomaba.

Aoi atacó de inmediato el refrigerador del par de rubios, sacando un gran pote de helado de chocolate. Luego sacó unas galletas de la alacena y lanzó todo sobre la mesa donde el vocalista estaba desayunando unos hotcakes que su novio le había preparado; Aoi simplemente tomó el plato y lo puso en frente suyo cubriéndolo con una espesa capa de miel de maple, mezclándolo con el helado y galletas ante la sorprendida mirada del bajista y la asqueada de Ruki quien no tardó en quejarse por el hurto de su desayuno.

—¿Aoi? ¿Estás bien? —consultó Reita con un tono preocupado, siendo rápidamente interrumpido por el menor del grupo.

—Oye, pedazo de idiota, ¿no que ibas a cuidarte este año?

—¡No! ¡Déjame sólo! ¡Me quiero morir! —lloriqueo el guitarrista, echándose a la boca un trozo de su mezcla mortal, casi atragantándose en el intento por comerlo todo de un solo bocado, siendo rápidamente asistido por el bajista.

—¡El imbécil que se quiere morir, que lo haga en silencio! —La voz de Kai se hizo oír desde una de las habitaciones de huéspedes, haciendo que el moreno comenzará a sollozar en voz baja.

—¿Qué pasa? ¿Ya entró en la crisis de los cuarenta?

Aoi dejó de hacer drama de inmediato, tensando su cuerpo y negándose a subir la vista.

Uruha había ingresado a la sala, solamente con unos bóxer cubriendo su cuerpo, captando de inmediato la mirada de Ruki quien había sido el único que había visto llegar al castaño, quién salió sospechosamente de la misma habitación que Aoi.

Rápidamente sus ojos y boca se abrieron en comprensión. Aprovecho que el castaño se había distraído abrazando al bajista y exigiendo comida para lanzarle una servilleta a Aoi y captar su atención. Apuntó ambos guitarristas y unió sus dedos índice y pulgar, formando un círculo, comenzando a meter y sacar rápidamente su otro índice en el agujero.

Tuvo que reprimir una carcajada ante lo roja que se había puesto la cara del moreno, quien volvía a esconderse en la comida. Volvió su vista a su novio que lo miraba con curiosidad y le hizo una seña de que luego hablarían. El bajista asintió antes de volver su vista a su berrinchudo amigo, prometiendo que le haría de inmediato de desayunar.

Reita preparó más hotcakes para su amigo, novio y para él mismo pues el líder seguía en estado de coma en la habitación de huéspedes. Todo el desayuno Ruki se mantuvo mandándole miradas a Aoi con la clara frase: "sé que hiciste la noche pasada", lo que causaba la molestia y vergüenza del moreno, mientras que Uruha y Reita tenían una divertida charla sobre los pocos recuerdos que tenían de la noche pasada, lo que tenía atento a Aoi.

—No recuerdo mucho, Akira, pero si recuerdo un sueño que tuve. — inmediatamente el castaño obtuvo toda la atención de los presentes. Aoi se encontraba tenso a su lado, Akira mantenía una expresión de curiosidad, mientras que Ruki lucía muy divertido con la situación. —Soñé que tenía una morena espectacular conmigo en la cama, tenía labios bonitos, bien formaditos, unas facciones redondas, ah, era hermosa y ese culo, para que te digo. Me dio una felación digna de los dioses. Ojalá existiera en la vida real.