Elizabeth es la media hermana de Isabella Swan pero ella se tuvo que ir al campamento media sangre (o mestizo), cuando lleva casi toda la viva pensó que ha Renee ya no le importaba pero un día, su padre Hades le dice que tiene que ir a vivir un tiem...
Y no pude contenerme más, puse mis manos en sus mejillas y acerque mis labios a los suyos, haciendo que rocen entre ellos, y lo beso, olvidando que él es mi cuñado, que tiene una hija, que no es correcto sentir lo que sentimos, olvidando las peleas que pasaron, olvidándome de todo.
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Después de un tiempo, nos separamos lentamente, uniendo nuestras frentes.
-Elizab...- Habla Edward, pero lo interrumpo.
-Te amo.- digo en un susurro.
Se queda unos segundos callado sin decir nada, intentando asimilar lo que dije. -¿Qué?.- dice sorprendido mirándome a los ojos, sin poder creer lo que acababa de decir.
Lo miré a los ojos y le repetí lo que le había dicho anteriormente. -Te amo, te amo, te amo, te amo.-dije cada vez mas fuerte.
El no dijo nada simplemente sentí como me tomaba de la cintura, me levantaba y empezaba a dar vueltas, yo empecé a reír y el también.
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Me bajo, y me miro a los ojos, tenia una sonrisa enorme en su rostro, con sus manos tomo mi rostro y acerco su cara la mía, para después unir nuestros labios, al principio fue un beso tranquilo y dulce, pero en cuanto mas durábamos, mas iba aumentando la fuerza del beso hasta tal punto en que me arrincono contra un árbol, tomo mis piernas he hizo que las enrollará en su cintura, por nada del mundo quería separarme de él, pero la maldita falta de aire hizo que tuviéramos que separarnos.
-Yo también te amo.- dijo dándome un beso en la punta de mi nariz.
Lo único que pude hacer fue sonreír como tonta.
-¿Qué tal si ya regresamos?, esta anocheciendo.-
¿Anocheciendo?, voltee al cielo y me di cuenta que estaba empezando el sol a ocultarse, el momento del crepúsculo, no me había dado cuenta en el momento en que empezó a anochecer, había perdido la noción del tiempo.
-Esta bien.- Conteste empezando a caminar hacía la casa, Edward se puso a mi lado.
Los dos íbamos caminando en silencio, no dejaba de pensar en que le había dicho a Edward que lo amaba, no sabía que iba a pasar entre el y yo.
Mis pensamientos se vieron interrumpidos al darme cuenta de que habíamos llegado a la casa, mi intención es ir y solucionar las cosas con Nico antes que hacer cualquier otra cosa más.
Pero en el momento en que cruzamos la puerta y nos dirigimos a la sala veo a una Isabella que parece que va explotar de lo enojada que se ve.
- ¡¿Donde estaban?!.- Pregunto molesta.
- Del bosque.- dije como si fuera obvio.- Acabamos de salir de ahí, ¿acaso eres tan ciega y despistada que no nos viste?.- dije un poco divertida
Ella ignoro olímpicamente mi pregunta.
- ¡¿Qué estaban haciendo ustedes dos solos en un bosque?!.- Dijo casi gritando
- Nada que te importe.- vi como iba a decir algo pero hable primero que ella.- Si me disculpan, tengo cosas que hacer, con permiso.- dije retirándome de ahí mientras escuchaba que Isabella Gritaba diciendo que regresara, que era una zorra y no se cuantas cosas más.
Simplemente la ignore y seguí mi camino hacia la habitación de Nico necesitaba arreglar las cosas con él.
Cuando estuve enfrente de su habitación toque la puerta y Will la abrió, parece que se sorprendió al verme ya que sus ojos se abrieron un poco cuando me vio.
- ¿Puedo hablar con él?.- pregunte algo dudosa sobre su respuesta, parece que no quería dejarme entrar.- Por favor.- dije presionándolo un poco a que accediera.
- Pasa.- dijo haciéndose a un lado, dejándome entrar.
Lo primero que vi, fue a Nico de espaldas hacia mi viendo la ventana.
- Los dejare solos para que hablen.- Dijo Will retirándose de la habitación.
- Nico...-
-¿Qué?.- pregunto secamente
- Perdón, no quería ocultarte eso, pero no podía decírtelo, sabía como actuarías al enterarte, sabía que tratarías de hacer lo que fuera para que ella no muriera, yo cuando tuve la visión no supe que hacer, sentía que algo se había roto dentro de mí al saber que mi dulce hermana, una de las muy pocas personas en las que confiaba se iba, créeme me puse a investigar como loca si había una forma de salvarla, pero descubrí que no había ninguna.- Hice una corta pausa.- Como la conocía tan bien sabía que ella no hubiera querido que lo supieras, por que ella te conocía igual que yo, y ella quería morir de una manera honrada, para ella una forma honrada era muriendo en una batalla, en alguna misión importante, como toda una cazadora de Artemisa, yo creí que era mejor que no lo supieras, a lo mejor no fue la mejor decisión que pude haber tomado, lo siento.-
Nico seguía de espaldas a mi, y no decía absolutamente nada, haciendo que se empezara a crear un silencio incomodo.
- Te...perdono.- Hablo finalmente suspirando.- Perdóname tu a mi Lizzie al haberte dicho monstruo egoísta, tenías razón en que papá y Bianca pudieron habérmelo dicho en algún momento.- se voltio hacia mi
- No tengo nada que perdonarte Nico.- Hice una pausa.- ¿Puedo darte un abrazo?.- Pregunte
- Claro que si, eso no se pregunta se hace.- Dijo abriendo sus brazos en dirección a mi, yo corrí hasta poder abrazarlo.
Continuará...
Siento no haber subido capitulo en tanto tiempo, pero es que he tenido unos problemas personales algo fuertes, que no me dejaban pensar claramente y no podía concentrarme al escribir este capitulo y escribía cosas muy cortas que no me dejaban satisfecha y las borraba y volvía a escribir y pasaba lo mismo, así que por fin pude escribir este capitulo, espero que les guste.
Por otra parte no puedo creer que esta historia tenga 43,600 vistas y 2000 votos, ¡muchas gracias a todos aquellos que han tenido el tiempo de leer esta historia, enserio muchas gracias no saben cuanto los quiero❤😍❤!
