Cadenas (Nejiten)

Cap 10

-¡joder!- se quejo la muchacha con una cara de pocos amigos

-¡se...señorita, sera mejor que se quite de mi camino!

Tenten dejo de aferrarse al cuello de Neji y volteo hacia el atacante mientras rompía con brusquedad la fecha de su hombro derecho y lanzaba al suelo con enojo en pedazo de flecha

-vas a pagar por esto- y en un rápido movimiento la Ama alzo su vestido hasta su muslo izquierdo y desenfundó una pequeña daga de plata que era sostenida por un liguero de cuero negro

-se...señorita, por favor no lo haga, tiene que entender que lo estamos haciendo por su bi...e...- el hombre no termino de hablar, pues Tenten lanzo su daga en el pecho del hombre, un tiro fuerte, rápido y preciso

El atacante tosió sangre al instante tambaleándose bruscamente y con sus ultimas fuerzas apuntó hacia Neji mientras que con su ultimo aliento logro sacar de su shock al príncipe

-u...un impostor....como....tú, ja...jamás sera...el em...empe...rador- dijo el hombre antes de caer de espaldas muerto, Tenten se acerco a él y saco la  daga del pecho del hombre de un fuerte tirón, manchando parte de su vestido con gotas salpicadas de sangra, limpio su daga rápido con el vestido mientras veía al hombre con desprecio, cuando su daga estuvo perfectamente limpia se dirigió nuevamente al principe

-escuche principe, tenemos que irnos, no estamos a salvo aquí, conozco un lu...- antes de terminar de hablar con el príncipe ambos se sobresaltaron, pues muy serca de ellos se escuchaban voces y pasos de varias personas, sin decir nada más, Tenten tomo la mano del príncipe, entrelazo sus dedos con los de él y comenzaron a correr

-¡¡¡Allá van!!!- se escucho la voz de alguien mayor, ni Tenten ni Neji voltearon, ambos sólo corrieron más rápido por donde la muchacha de piel morena los guiaba

(...)

Llevaban varios minutos corriendo y ambos estaban cansados, en especial la muchacha de piel morena

La mirena cada vez sentía mas y mas dolor, pues sospechaba que la herida de flecha que tenia en el hombro iba a ser peor de lo que imaginaba, pues empezaba a tener síntomas

-¿a donde vamos?- preguntó Neji deteniéndose un momento y al fin soltando la mano de la muchacha

-a un escondite del castillo

-¿falta mucho?- preguntó el principe algo agitado por tanto correr

-no, ya casi llegamos, ¿por qué? Quiere descansar príncipe

-por supuesto que no, lo digo por la herida en ti hombro, creo qué necesitamos sacarte el pedazo de flecha que aun queda en ti

-si hacemos eso sufriré un desangre, la deje ahí para evitar desangrarme mas rápido, aunque no espere que estuviera envenenada- dijo la morena con pesadez

-¡¿qué,  cómo que esta envenenada?!- preguntó muy alarmado el príncipe siguiendo a la muchacha que comenzó a correr de nuevo- como lo sabes

-empiezo a tener síntomas- dijo la muchacha sin mucha importancia

Justo cuando dieron vuelta en una pequeña esquina algo lejos del castillo se encontraron a dos de los tres guardias que Neji había visto alarmar a la muchacha del ataque sin reconocer sus rostros hasta ahora

Era ese tal Kiba, y lo acompañaba otro de complexión bastante grande para un guardia

-¡sus altezas!- grito él que Neji no supo reconocer

-no hay tiempo para explicaciones- dijo Tenten cansada mientras los pasaba de largo y estos se unían a ellos

-¡princesa, esta herida!- grito Kiba viendo con horror la gran mancha de sangre en la espalda de la muchacha