Encrucijada

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El miedo se adecua a cada contexto, se fusiona. Ciento veinte pulsaciones por minuto y mi actividad motora va en aumento, dominado por mi sistema nervioso, redes químicas transportan a mi torrente sanguíneo adrenalina osando a mi cuerpo para afrontar la situación amenazadora. Mis ojos procesan con afán la información visual buscando una ruta de escape, mientras en mi espacio intelectual trazo un mapa a través de mi pensamiento contemplando las condiciones y redactando un plan de subvención.

"Tengo miedo", es en lo único en lo que puedo pensar.

Tras correr con ardor por el túnel copioso llegamos hasta el ingreso, en donde nuestros pies frenaron alíferos ante una inminente situación.

Una desordenada multitud de poltergeist se extendían mortíferos en el bosque frondoso y colmado de sombras. En cuanto se percataron de nuestra estadía sus formas mutaron. De pronto los rasgos de aquellos se convirtieron en metamórficamente alargados, sus bocas se volvían picos estirados y dotados de una dentadura colmilluda que provocaba estremecimientos; su estructura corpórea era forrada de una capa espesa de plumas negras. Lucían como pájaros negros de un tamaño desproporcionado a las aves comunes. Otros asumieron formas irregulares que creaban cuerpos de criaturas inefables y otras que no podría asemejarse con rasgos vistos por mis ojos, eran monstruos.

Con sus ojos penetrantes y pérfidos contemplaron nuestras formas humanas. Ellos debieron de crear las leyendas en los bosques, sus cuerpos eran capaces de cambiar a formas aterradoras que ni en las pesadillas tenían cuna, creando así la leyenda de las criaturas en las profundidades de los bosques.

— Esto está mal... — masculló Jimmy con su cuerpo petrificado.

—... No hagan nada que ellos no hagan primero... — aconsejó Lewis con sus ojos vigías y sus músculos petrificados, valiéndose de un tono dúctil.

—... Sé cómo llegar... Vayan tras de mí... — pronunció Tom fulminando a las bestias con su mirada oceánica bajo la sombra de sus cejas fruncidas.

De pronto, los seres flotantes rompieron su quietud y se lanzaron coléricos contra nosotros e inmediatamente los demás imitaron su reacción. No detuvimos a cavilar, sabíamos lo que debíamos hacer, por ello nuestras posturas de estatuas se quebraron y comenzamos a huir lejos del peligro inminente; iluminados por la escasa luz de nuestras linternas. Necesitábamos suerte, pues el camino era emboscado por los matorrales convirtiendo nuestro escape en una faena escabrosa, agregando a eso la energía ya extenuada y el agotamiento de nuestros cuerpos.

El tosco camino me hacía tropezar entre las rocas musgosas y las ramas afiladas que cortaban mi piel, luchaba por no tropezar con nada, pero se hacía más difícil. Corríamos todos en la misma dirección, pero en ubicación desordenada y dispersos, aunque separados por cortas distancias. Tom iba a la cabeza y Jimmy de último, sus pies ya antes maltratados por los poltergeist le hacía soltar quejidos desentonados de dolor con cada zancada. Escuchaba la voz de Lewis alentarlo tras de mí, impulsándole a resistir. Aquello me hostigaba por los temores de perderlo.

Y los temores se hicieron vigentes.

— ¡Auxilio! — gritó Jimmy con un grito desgarrador.

Lewis se detuvo rapando en el suelo y giró su rostro con dirección a Jimmy, igual que yo, con diferencia de que los ojos de Lewis casi se escapan de sus cuencas y su cuerpo se volvió de piedra, mientras que yo me atreví a correr de retorno sin darle tiempo a mi cerebro a advertirme de las consecuencias y riesgos, sólo corrí a auxiliarlo.

Tres de esos pájaros volaban por encima de él, Jimmy estaba tendido sobre el suelo tratando de resguardarse con sus manos. Los pájaros tremebundos y carniceros le arrancaron pedazos de carne de los brazos con los que trataba de defenderse manoteando desordenando y aullando de dolor. El corazón se me contrajo con la escena, era mi amigo y lo estaban devorando a mordiscos con sus horrendas fauces. Mi cabeza era un caos, todo en cuanto podía pensar era en salvarlo aun exponiendo mi propia vida, y cada clamor suyo era el combustible que me empujaba.

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⏰ Last updated: Jun 13, 2019 ⏰

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Enigma 2 (Los Ante Portam)Where stories live. Discover now