Un Nuevo Rayo de Inteligencia.

El trabajo inesperado

La noche había comenzado a pasar, al inicio en el Caldero Chorreante de comenzó a sentir unas fuertes ráfagas de viento pero el problema se solucionó al encender las fogatas del lugar.
Pero había visto algo en mi mente, sentía como si mi antebrazo derecho comenzara a doler, a arder con fuerza... En ese sueño comencé a escuchar esa risa malévola de una única bruja que me había escrito "Sangre Sucia" en la Mansión Malfoy hace tanto tiempo ya.

Gritaba de dolor en mi sueño, deseabe despertar de una vez pero en mi garganta se aferraba una serpiente que me estaba extrángulando, no podía respirar, tenía miedo, todo oscuro... ¿Donde estaba, era la realidad o el sueño?
Alguien llamaba por mi afuera de mi mente.

-Hermione... ¡Hermione!--- Decía la voz masculina al sentir como aquel antebrazo era sacudido con fuerza--- ¡Hermione!

Mis ojos castaños se abrieron de forma inmediata, mi corazón estaba latiendo con más fuerza que antes, todo mi cuerpo temblaba pero vi unos ojos verdes esmeraldas que me habían hecho volver a la realidad.

-Harry...--- Dije casi sin voz--- ¿Qué sucedió? Creí que había cerrado la puerta con llave antes de irme a dormir...-
-Lo hiciste, pero desde el otro lado de mi habitación te escuchaba gritar así que usé Alohomora ¿Qué sucedió?--- Me preguntó Harry con un rostro bastante asustado donde parecía casi no poder parpadear.
-Solo... fue...--- Mencioné al llevar mi mano derecha hacia mi cuello--- Un sueño Harry, solo eso...-
-¿Y un sueño te deja así de empapada? ¡Estás bañada en sudor Hermione!

Harry tenía mucha razón, toda mi blusa color rosa claro con mangas estaba mojada de mi sudor, mi mirada captó mi estado y lo siguiente que mi mente imaginó fue darme un baño, por suerte de mi bolso llevaba siempre conmigo una blusa café con mangas cortas, unos jeans azules y demás objectos personales.

-Voy a ducharme, no me gusta esta sensación--- Mencioné al colocar con suavidad mis manos sobre mi sábana blanca para así correrla, pero en el instante Harry me había detenido la muñeca para que lo volviera a ver--- ¿Qué sucede?
-¿Fue ella...?--- Preguntó al verme fijamente.
-¿Quién?
-Tú sabes quién, Hermione ella murió gracias a la Señora Weasley
-Lo sé Harry...--- Tercié al hablar--- Solo fue un sueño nada más, quiero bañarme así que por favor ¿Puedes salir de mi habitación?

Harry al inicio trató de negarse pero sabía que yo necesitaba mi espacio, así que salió muy seriamente de mi habitación. Caminé para cerrar mi puerta, tomar mi bolso he irme hacia la ducha, quise tomar mi tiempo para reflexionar mi sueño con agua caliente donde el agua es deslizarse por mi cuerpo de llevaba consigo todo rastro de sudor, pero el dolor aún continuaba.
Me tomé alrededor de diez o quince minutos para estar lista y así abrí mi puerta donde, al caminar hacia el pasillo, vi a Harry centado en una de las mesas de manera del local.

Comencé a bajar las escaleras donde así al verlo mejor, caminé hasta sentarme delante de él.

-Te pedí jugo de calabaza, huevos revueltos, avena y un poco de tostadas...--- Mencionó Harry al verme.
-No como tanto Harry, pero aún así muchas gracias...--- Mencioné al colocar mi mano por sobre la de él que en ese momento tenía en la mesa--- ¿Pasaste buena noche?
-Algo así, ya sabes...--- Mencionó al ladear la cabeza--- Las pesadillas quedan...---
-Lo sé Harry...-

Así el cocinero del Caldero Chorrante vino con unos platos de comida más grandes que los del mismo Hogwarts, nos agradeció por nuestro papel contra los mortífagos he incluso nos había invitado toda la comida del día, algo que Harry y no realmente no deseabamos aceptar ya que nos parecía de mucha falta de educación, pero este insistió y solo lo que pudimos hacer fue aceptar.
Hablamos sobre los cursos que llevaríamos ese año, sobre la nueva bebé de Bill y Fleur ya que Harry comentó que Fleur, si era niño, deseaba honrarlo colocándole en nombre de Harry por honor a su tío, algo que Bill había aceptado, mencionábamos en donde vivíamos actualmente ya que los Señores Weasley habían adoptado a Harry como el séptimo Weasley (Aunque ya se sabía lo mucho que ellos querían a Harry)
Mientras yo estaba comentándole del departamento que estaba alquilando cerca del Caldero Chorreante y sobre el fondo de Gringotts que tenía a mi nombre.