Príncipe Mehmed. (Gay)

"Una Mano Amigable" (1x13)

Iskender

El príncipe Mehmed había humillado a Iskender con sus palabras. Nunca en su vida lo habían menospreciado de esa manera. Se sintió juzgado por la mirada del príncipe. Las miradas de la sultana Ayse y de Gokhan Aga estaban sobre él.

Durante días, anheló ver a Mehmed otra vez. Pasó por su cabeza el escapar, más de una vez lo quiso, mientras regresaba a la capital en el caballo con Osmán, pero no lo hizo, solo por Mehmed.
No lograba comprender cómo todo su mundo se había puesto de cabeza en un abrir y cerrar de ojos. Mehmed lo odiaba, eso era evidente. No le permitía explicarse tampoco, lo único que Iskender quería era hablarle sobre la conversación que tuvo con Osmán en la playa, y sobre cómo se relacionaba con él, pero eso no sucedería, Gokhan siempre parecía ir un paso más adelante que él.

Miraba a Iskender con una pequeña sonrisa en sus labios. Parecía disfrutar el momento. Sintió un nudo en la garganta, el pecho apretado y ganas de llorar. Cerró sus ojos con fuerza y regresó por el pasillo. Tenía que asumir lo que Mehmed le había dicho: ya no era su aga, y él ha no era su príncipe.
Gokhan salió tras él y lo siguió por el pasillo.

–Iskender. —Lo llamo desde atrás, pero él no se detuvo. –Iskender, detente.

–¿Qué quieres?

–Solo quería decirte que no tienes oportunidad con el príncipe. Para acercarte tendrás que pasar sobre mí, y no te lo permitiré.

–Eres muy altanero para ser solo un esclavo. Ten cuidado Gokhan, mientras más alto sueñes, más larga será tu caída.

–No te imaginas cuánto disfruté tu humillación allí dentro. —Señaló hacia atrás con su mano. Tenía la misma sonrisa pegada en el rostro, eso irritaba a Iskender. –Recibiste lo que mereces.

–En algún momento se enterará de tu alianza con la sultana Safiye. Conozco sus planes, ella misma me lo dijo. No crean que se saldrán con la suya. Ella debe haberte prometido algo, como para que accedieras a todo esto.

Gokhan se acercó con violencia a Iskender y lo tomó del cuello de la camisa, lo empujó contra la pared y le habló muy cerca del rostro.

–No te atrevas a interferir. No te conviene. Si yo lo pierdo todo, tu también lo harás, deja que las sultanas manejen la situaciones y mantente al margen. El príncipe Mehmed estará bien.

–La sultana Safiye dijo lo contrario, que todos mis errores los cobraría con él.

–No sucederá, yo estoy junto a él, no un fracasado como tú. Te lo advierto Iskender, vuelve a interferir así y te asesinaré.

La puerta del aposento del príncipe se abrió, la sultana Ayse salió al pasillo y los quedó mirando. Gokhan soltó a Iskender, reverenció a la sultana y entró otra vez donde el príncipe.

La sultana Ayse era muy perceptiva. No había escuchado la conversación, pero supuso enseguida que Gokhan lo había amenazado. Iskender intentó evitarla y se marchó rápido después de reverenciarla, pero ella lo siguió.

Bajó por las escaleras y se detuvo en el pasillo que daba al harén. Ella se acercó por detrás y esperó que él la mirara. Iskender suspiró frustrado y se preparó para rendir explicaciones. Quería confiar en la sultana.

–No creas que no noté la tensión. Él te estaba amenazando, lo escuché todo Iskender, debes decirme de qué se trata. —Le mintió.

–Sultana, usted escuchó todo lo que me dijo. No sé si puedo confiar en él. Yo solo quiero que el príncipe Mehmed esté sano y salvo. No podemos confiar en ese tipo, y tampoco en las sultanas.