36

3.2K 238 90
                                    

Habían pasado varios días desde la última reunión que tuvimos entre amigos. En el transcurso de esos días no supe de casi ninguno, excepto por Michael, Alex y Dakota, los demás es como si se los hubiera tragado la tierra. Pero, algo pasó que todos recibimos un mensaje de Luke invitándonos a todos a salir de nuevo, pero aclarando, que ésta vez, sin alcohol. Teníamos pensado ir a cenar juntos y tal vez después ir a dar una vuelta, y después probablemente cada quien irá a sus hogares ya que mañana era Miércoles y había clases, como un Miércoles normal.

Eran las 7:00 pm cuando Michael me avisó que estaba afuera de mi casa esperándome para irnos juntos. Cuando salí me lo encontré parado con las manos dentro de sus jeans. Le sonreí y él me correspondió con una sonrisa también. Caminé hacia él y me pronto me sentí rara; no sabía qué hacer, si darle un beso o no. Era obvio lo que debía hacer pero extrañamente por una loca razón me sentía así. Si bien las cosas no han estado 100% bien con Mike y han estado incómodas en cierto sentido, no creo que sea motivo para que estemos así. Es una situación extraña, y sé que él se siente igual que yo. Al final, decido darle un corto beso como saludo y una sonrisa después. Ambos comenzamos a ir hacia nuestro destino, con la diferencia de que íbamos caminando; así lo preferimos, y el aura rara que nos envolvía.

Más sin embargo, el silencio que nos envolvía no era por completo incómodo, era cómodo en cierto modo e incómodo en otro cierto modo, pero no incómodo. Quiero decir, no era necesario hablar pero si lo hacía no cambiaría nada, el aura que nos envolvía seguiría igual. Pero de todos modos decidí hacerlo. Creo que es el momento de hablar con Michael, de decirle como y lo que siento.

—Me siento mal.—digo y suelto una risa sarcástica que apenas y se escuchó. La mirada de Michael se posa sobre mí apenas hablé.

—¿Qué tienes?

—Tú y yo. Me enferma.—digo mirándolo a los ojos, y cuando éstas últimas palabras abandonan mi boca su mirada se aparta de la mía y observa otro lugar que no sea yo.—No quiero esto, Michael. Quiero que seamos como antes, no como ahora. Esto es raro ¡y ni siquiera sé por qué!

—¿Cómo antes? ¿Quieres decir...—carraspea y me mira.—como amigos?

—No—niego—.Como nuestra relación era antes. No como estamos justo ahora. Sé que tú también lo sientes y te has dado cuenta de que estamos en una situación rara. Ni siquiera parece que somos novios.

No responde, pero en cambio deja escapar un suspiro. No detenemos nuestra caminata. Siento que quiere decirme algo, pero simplemente no se atreve, o no puede. O no quiere.

—Lo sé.—dice por fin. Espero que diga algo más, pero no lo hace.

—¿Sólo eso dirás?

—¿Qué más quieres que diga?—me mira.

—No sé.—no puedo obligarlo a decir más cuando ni yo sé qué decir o qué hacer para cambiar esto.

Levanto la vista hacia enfrente y puedo ver el restaurante en el que quedamos en vernos. Cada vez nos acercamos más y puedo ver a Ashton en la entrada.

—¡Ashton!—le grito y saludo con mi mano. Él me mira con el ceño fruncido y cuando se da cuenta que soy yo una sonrisa se posa en sus labios.

Y así, doy por terminado éste fracaso de conversación respecto al tema.

Ashton se acerca a nosotros y me saluda con un beso en la mejilla y a Michael con un saludo de manos.

—¿Cómo están?—nos sonríe.

—Bien.—decimos ambos.—¿Y tú, stripper?—golpeo despacio su hombro con diversión.

Ashton sonríe y ríe mientras pasa una mano por su cabello.—Pensé que ya lo habrían olvidado.

Crush II » Calum HoodWhere stories live. Discover now