016.

3.5K 512 475
                                    


El doctor Jhonson se encontraba ojeando el informe médico ya completo y listo para ser entregado a los tutores de Jimin. El anciano quería estar seguro de que cada cosa estuviera a la perfección, quería entregar todo en perfectas condiciones.

Miró la hora en su viejo reloj de pared y casi pudo escuchar los pasos de la Doctora Roch por el pasillo. Debía llegar a las 09:15 a su consultorio y conociendo la obsesión de la mujer por la puntualidad, sabía que en punto se plantaría tras la puerta.

09:13. Tenía algunos minutos para pensar en cómo comunicar la decisión tomada por los padres de Jimin a Samanta. Sus pensamientos se dividían en dos; una mitad le hacía pensar en que no tenía la obligación de darle explicaciones a una estudiante de medicina que ya ni siquiera era encargada del chico, pero su parte humana le tiraba a pensar en algo para consolar a la pelirroja.
Golpeaba las hojas con la yema de sus dedos esperando a ver qué parte en su cabeza ganaba la insoportable batalla.

Soltó un enorme suspiro cuando el reloj marcó las 09:15 y tres golpes sobre la puerta retumbaron en el silencio de su consultorio. No tuvo más remedio que dar permiso a la mujer para que entrase y escucharla hablar sobre cómo sería todo el procedimiento.

Sabía todo lo que salía de la boca de la doctora, estaba consciente de todo lo que se haría, de los riegos, de las precauciones, de todo. Pero esa charla era protocolar y debía hacerse si o si. Vio como la rubia sacaba una hoja de su maletín y la extendía sobre la mesa de vidrio.

Ambos debían firmar y sellar dicha hoja.

El Doctor tomó su lapicera mientras leía atentamente todo lo escrito sobre el papel. Era una locura y el anciano lo confirmaba cada vez más mediante iba leyendo todo.
Pero no podía hacer más nada que firmar, la decisión no era suya, era de los padres del pelinegro y las cosas se harían como ellos quisieran.

El anciano suspiró mientras firmaba y sellaba su parte, extendió la hoja sobre la mesa y la doctora hizo exactamente lo mismo. 

-¿En cuántos días lo harán?

-Hay que esperar a que sus padres lleguen. Yo diría que dos o tres días máximo.

Roch tomó todo el informe y colocó esa hoja en la parte final para luego abrocharla y guardarla en un sobre marrón

A partir de allí, no había nada más que hacer.

                                   💤

El segundo timbre resonó en la academia avisando a todos los aspirantes a futuros artistas que entrasen a sus aulas. Se podía sentir en el aire la tensión de todos los alumnos por haber cumplido bien con su trabajo, y aunque se tratase de algo personal, algún error en la redacción podría costarles caro.

Grey, por su parte, estaba más que tranquila, sabía con certeza que su trabajo estaría a la perfección. Sacó con confianza la hoja y preparó cada cosa para comenzar. Veía como la profesora se paseaba de un lado a otro leyendo los trabajos y observando como plasmaban las descripciones en el lienzo. Cuando el turno de la pelinegra de ser examinada llegó, la profesora se quedó más de lo esperado. Grey no se sorprendió, conociendo el potencial de Jeon, sabía que seguramente había escrito algo tan perfecto que llamaría la atención de cualquiera que lo leyese.

-Si logras plasmar a la perfección todo lo escrito aquí, tu trabajo estará en la exposición.

Palabras ya esperadas por la chica fueron pronunciadas por la mujer de porte elegante. La pelinegra tomó su lápiz y confiando a pleno en su gran talento para el dibujo, comenzó a trazar delicadas líneas sobre el enorme papel. Sus manos se movían acorde a las palabras escritas por Jungkook, el chico había hecho magia con esa descripción y ella haría honor a eso con una obra de arte. Sus trazos iban de un lado a otro, largos y finos, otros cortos y gruesos. De a poco su dibujo fue tomando forma, una muy hermosa.

Coma |P. JM|Where stories live. Discover now