Too young for this

La mataré

Yo la sentaba en mi regazo, 
enloquecía sólo a su contacto. 
La he conservado en la memoria. 
Tal como estaba; siempre a mi lado. 

Aún recuerdo nuestra primera fiesta de Halloween. Todas esas decoraciones, los disfraces, los dulces... todo me parecía tonto e insignificante; pero no me importó tomar parte en una celebración tan mundana con tal de verte sonreír.

Me emborrachaba entre sus brazos 
ella nunca bebía, ni la vi llorando. 
Yo hubiera muerto por su risa. 
Hubiera sido su feliz esclavo. 

Puede que no haya vivido por mucho tiempo y que sepa muy poco sobre el amor, pero si de algo estoy seguro es que habría hecho cualquier cosa con tal de mantenerte a salvo y feliz; si eso no es amor, es lo mejor que te podía ofrecer.

Uh, que dolor sucio y traidor 
me envenena el corazón. 
Uh, sé que ella nunca enloqueció 
Y jamás perdió el control. 

No pensé que manipularías mi mente para que olvidara que estaba disgustado contigo ¡No! Creí que te importaba ¡¿Por qué lo hiciste?! ¿Es que sólo soy una pieza más en tu tablero? Me trataste como un juguete, una marioneta esperando por las órdenes del titiritero; para eso me creó Cadmus después de todo, ¿no?

Quiero verla bailar entre los muertos, 
la cintura morena que me volvió loco, 
llevo un velo de sangre de la mirada, 
y un deseo en el alma, que jamás la encuentre. 

Es así como terminé fuera de la cueva, destrozando rocas y golpeado el suelo hasta el cansancio; la sangre hirviendo en mis venas.

Uh, sólo quiero que una vez 
algo la haga conmover. 
Que no la encuentre jamás 
o sé que la mataré. 
Uh, por favor. 
Sólo quiero matarla 
a punta de navaja, 
besándola una vez más.

No puedo quitarte de mi cabeza; pese a todo el daño que me hiciste, te sigo amando, M'gann.