Capitulo 16

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—¿Jungkook? —Chul susurro incrédulo al viento y sus pies por inercia se movieron dando la vuelta.

Ese era Jungkook... ¿o no? de nuevo volvía a no estar seguro. El olor ahí únicamente era de alfa y de la beta en la recepción. Pero esa voz parecía demasiado a la del oji-azul. Avanzo directo a la puerta dispuesto a abrirla y a sacar de ahí a su hijo. No lo iba a dejar con un embustero como tenía fama el Kim menor. A nada de llegar y abrir la puerta mas que molesto, una bajita y regordeta beta se interpuso en su camino.

—¿Qué se cree que está haciendo? —pregunto incrédula y lo fulminó con su mirada café como si fuese el mayor error que fuese a cometer.

—Voy a sacar a mi hijo de ahí —le devolvió la mirada retandola a quedarse ahí.

—Si usted entra por esa puerta —lo señalo de forma amenazadora —Sera echado sin contemplaciones y de algo peor no se salvará —ella hizo un ademán exagerado y no se movió ni un centímetro.

—Me está amenazando —siseó Chul ahora enojado.

—Antes de todo, Kim Taehyung es un alfa joven. Sabe perfectamente que la intimidad interrumpida de un alfa con su omega no es tomada con mucha gracia, y dudo mucho que el Señor Kim se tome muy bien la intromisión —ella lo miro fijamente con sus ojos oscuros y algo dentro del alfa hizo "clic".

Ella tenía absolutamente toda la razón. Si resultaba ser Jungkook o no, el alfa estaría muy enfurecido como para dejar pasar una amenaza como esa. De perder su trabajo y una paliza no se salvaría. Y si no era Jungkook... ¿De dónde iba a sacar otro empleo para poder sostenerse? Tenía dos omegas en casa, si se quedaban en la calle ellos lo odiarian aún más. Ya era viejo para que alguien lo contratará a esa altura de su vida, y lo más seguro era que Taehyung lo hundiría y sus referencias serían las peores.

—Es verdad —suspiro derrotado sintiéndose patético al medir las cosas impulsivas que haría —Tal vez ni siquiera sea mi hijo el que esté ahí.

—Pues entonces váyase y no haga cosas estúpidas —ella lo siguió con la mirada mientras Chul daba la vuelta y caminaba angustiado hasta entrar en el elevador. Una negación exasperada de ella lo hizo sentir como un niño siendo regañado por tomar algo sin permiso.

Al cerrar la puerta y ver su reflejo cansado sobre el metal pulido lo hizo sentir mucho más abatido de lo que ya estaba. Y si ese omega era Jungkook... ¿a caso tenía el derecho de interponerse en su felicidad? porque era obvio que lo que iba hacer era sacarlo de ahí a la fuerza y después de prohibir verlo se aseguraría de que no se acercara al alfa otra vez.

¿Y después que?

La persona ahí dentro se escuchaba tan vivaz y alegre, un tono despreocupado que hacía doler su pecho, porque nunca había escuchado una sola risa sencilla del omega. Si ese era Jungkook, el ya estaba creando su vida con alguien, una vida donde dejaría a todos fuera. Y Chul sabía que se merecía lo mejor.

Pero... ¿y si Taehyung lo estaba engañando? agarrandose de su ingenuidad e inocencia, porque Jungkook estando tan a la deriva por tantos años era tan maleable con solo un par de palabras calidad y un abrazo largo.

¿Le podría explicar cómo lidiar con un corazón roto? ¿Jungkook podría entender su miedo irracional que lo mantuvo alejado de el? ¿Cómo le diría que cuando era niño el perdió a su gemelo omega y aún no podía superarlo después de tantos años? ¿Tomaría bien si le dijera que le aterra en sobremanera lo frágiles que podían ser?

Él era un cobarde de lo peor por no poder ir y saber si aquella persona era su hijo, si el estaba bien o acaso esa relación era algo beneficio. Pero le daba miedo lo que podía encontrar ahí porque no sabría cómo afrontar otra dura verdad, otra donde le recordara el pésimo padre que fue y el horrible hermano que dejó morir a su frágil igual.

Trágicamente Omega - kth + jjk 『Omegaverse』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora