Summer Love (Lee JinKi) [TERMINADA]

Capítulo 1: Viaje a Corea

Estaba arreglándome para el último día a clases, honestamente no tenía ganas de ir porque sería lo típico de los últimos días, poner películas, los profesores entrando y despidiéndose.

Salí a la sala a buscar algo sencillo que desayunar y me encontré a mi abuela quejándose de cómo no encontraba de nuevo sus lentes.

En casa no hay reglas a excepción de una: Siempre hablar en coreano dentro de casa.

— ¿Abuela buscas tus lentes? - le pregunté con una leve risa.

— Si hija, los tenía antes de hacer el desayuno pero ahora los perdí y no los encuentro.

— Abuela - alce mis brazos a la altura de su cabello y quite los lentos que estaban tranquilamente sobre ella.

— ¡Ay no lo puedo creer! Muchas gracias cariño - me abrazo.— ¿Ya haz terminado de hacer tu maleta?

— Ya casi termino - le contesté mientras desayunaba.

— Tienes que tenerla ya lista porque saldremos en la mañana y tenemos que irnos temprano.

— Ya casi - y entonces los golpes de mi abuela comenzaron.

Después de salir a casa me fui directo a la universidad, al entrar me encontré con mis amigos en el pasillo.

— ¡Hey Hana! - me saludo Bratt.

— ¿Que tal? - le salude.

— ¿Ya estás lista para tu viaje? - me preguntó Amy.

— Creo que si.

— ¿Estas emocionada? Yo lo estaría es decir ¡Como es posible que nunca hayas ido a corea y seas de allá.

— Son cosas del destino - conteste en forma de burla.

— Conocerás a chicos coreanos atractivos.

Me reí de todos sus comentarios y es que incluso para mi era increíble que siendo de ahí jamás haya puesto un pie, hablo el idioma por mi abuela, puedo leerlo pero mi problema siempre ha sido a la hora de escribirlo. Las técnicas de enseñanza de mi abuela era algo "convencional".

También crecer en California fue bastante complicado, perdí las veces en las que en la primaria se burlaban de mi, gracias a mi familia y amigos que hice pude superar todos esos pequeños obstáculos.

Seguí con mis clases hasta que finalmente la última ya había llegado a su fin. Me fui junto con Amy a comprar ropa, según me había dicho mi abuela y mi gran amigo Google, Corea en temporada de verano es demasiado caliente y sofocado así que quería llevar ropa nueva.

Supuestamente los planes de mi abuela eran regresarse y estar durante todo un mes. La realidad es que mi abuela pensaba que ya no le queda mucho tiempo así que se aferró a regresar, por él trabajo de mis padres ellos le decían que no y era un pelea de no terminar, por lo que para terminar esas peleas me ofrecí para acompañarla, ademas a nadie le caería mal una salida de vez en cuando.

Mi papá trabaja como ingeniero en una compañía y mi mamá es dueña de un restaurante de comida coreana, normalmente al terminar con las clases vengo a ayudar al restaurante. Aunque siendo honesta no sirvo de mucho.

— HanaByul ayúdame aquí - gritó mi mamá desde la cocina.

— ¿Que pasa mamá?

— Ayúdame a revolver esto, no sabes que, mejor ve al fondo y tráeme las cajas de verduras.

— Mamá esas cajas son muy pesadas - me quejé.

— Y tampoco se moverán solas, te sirve de ejercicio no te quejes.

Después de ayudarle a mi mamá en el restaurante me fui a casa y me encontré a mi abuela tomando una siesta en el sofá, un olor a quemado comenzó a llegar, inmediatamente fui corriendo a la cocina y me encontré con el arroz quemándose.

Tal parece que mis pies corriendo fueron lo suficientemente fuertes para despertar a mi abuela.

— HanaByul ¿Por qué corres dentro de la casa? ¿Y porque huele a quemado? ¡Mi arroz!

— Abuela porque tomas una siesta cuando cocinas - me comencé a quejar.

— Estaba un poco cansada, ademas...tú no me regañas ¿Ya terminaste tu maleta? No quiero que nos vayamos tarde.

— Apenas Voy llegando no creo que se haya hecho mágicamente - susurre.

— ¡Háblame en coreano! - me regañó mi abuela.

Después de otro de sus regaños por hablar en inglés me fui a mi habitación a terminar mi maleta.

[•••]

Eran las 4 de la madrugada cuando mi alarma me despertó de golpe.

Me di una ducha rápida y me puse mi ropa más cómoda, porque vamos quién se pone ropa súper ajustada para un viaje con una duración de unas doce horas.

Al bajar a la sala ahí estaban mis papás y abuela dando vueltas de aquí para allá. Finalmente ya nos encontrábamos en camino al aeropuerto.

Mis piernas temblaban, estaba tan emocionada por ir y conocer todas esas calles, comer en sus puestos de comida nocturna, ir al Río Han del que tanto hablan en casa, ver las luces en la noche y tantas cosas nuevas por conocer.

Después de pasar por todos los filtros del aeropuerto finalmente ya nos encontrábamos en el avión.

Mi abuela estaba hablándome tan animadamente de todo lo que haríamos, lo que comeríamos y más cosas hasta que finalmente se quedó dormida.

Yo me puse mis audífonos y empecé a escuchar mi música favorita de jazz.

¿Pensaron que me gustaba el kpop?

Vamos, escucho alguna canción por aquí y por allá pero no es como que tengo un grupo favorito ni nada por el estilo, lo único que consumo de corea es los dramas ya que tanto mi mamá como mi abuela aman verlos, así que naturalmente yo también desarrollé un gusto por ellos.

Después de varias siestas, varias películas, y varias horas de no sentir mi trasero finalmente ya habíamos llegado.

Nunca antes había visto a mi abuela sonreír de tal manera, estaba tan feliz viéndola a ella con esa emoción.

Tomamos un taxi y nos fuimos al lugar donde nos quedaríamos en las próximas semanas, el lugar era bastante agradable, mis padres lo habían alquilado por un mes. Dejé mis cosas en la habitación y me di un baño.

Mi abuela y yo fuimos al restaurante que teníamos más cerca y comimos ahí, después fuimos al mercado para comprar cosas que necesitaríamos en los próximos días.

Realmente Corea era un aire completamente distinto al de California, podía acostumbrarme a estar aquí...

**********************************************

Fernanda💅🏻