En verdad eres tú...

16.- No había día

Lo que decía Peridot no era ninguna broma. Desde que se separo de Lapis empezó su temor, cada día en la escuela era un infierno para ella ya que no tenía a su mejor amiga, además que nunca faltaba la persona que carecía de inteligencia y la molestaba. A pesar de que no era buena idea hacerlo ya que cuando daban la hora de recesos siempre se juntaba con un amigo el cual cada vez que podía la defendía.(y en la mayoría de veces terminaba en golpes)
Un día su amigo le propuso que se hiciera un cambio, que cambiara a la chica tímida a una chica completamente diferente, a una "rebelde". Y por extraño que fuese...el cambió funcionó, dejaron de molestarla y consiguió mas "amigos".

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-no había día en el que no pensara en ti... -decía Peridot mientras abrazaba a Lapis-

-heh, fue lo mismo para mi... -hablo Lapis correspondiendo el abrazo- no podía olvidarte, cada día mi mente me hacía recordar cuando jugábamos, o cualquier situación en la que estábamos... Juntas...

-ahora te prometo que nunca más me iré de tu lado -dijo la rubia mientras se separaba del abrazo-

En ese momento se escucho un aullido, lo que sorprendió a las chicas

-¿que le pasa? -pregunta la ojiazul-

-creo que esta asustado. Ven amigo

El perro no sabía quienes eran ellas o si iban a hacerle daño por lo que solo retrocedía con la cola entre sus patas traseras

-hmm, lo maltrataban... Es por eso que está tan asustado -dedujo Peridot-

-pobre...solo tiene a su amiga

Mientras Lapis pensaba en que hacer con sus nuevos invitados mientras que Peridot estaba tratando de acercarse a el cachorro. Lo hacía lentamente para que no se asustara.

Al poco tiempo logró acercarse lo suficiente como para poder tomarlo, este al sentir contacto con alguien empezó a arañar el brazo y morder las manos de Peridot

-tsk, ¿Lapis puedes traer un poco de leche?

-bien ¡ya vuelvo!