Desperate Souls

Capitulo 4 - Parte 1.

El auto que había robado se había quedado sin gasolina, Valerie estaba agotada, luego de ir rápidamente a su casa se dio cuenta de que había dejado las llaves adentro, tuvo que dormir adentro de aquel auto con olor a cigarrillo y asientos incómodos, se había quedado sin combustible justo en frente de un hotel, Bueno esto es mucha coincidencia. Se bajó del auto y sintió el piso de la atareada cuidad, camino a la acera y vio a los lados para ver a donde iba, logro divisar a un policía que la observaba a lo lejos Oh no, ¿cómo le explicaría que había olvidado llenar el tanque de gasolina de su auto robado?, el policía caminó hacia ella.

— ¿Ocurre algo señorita? —Pregunto aquel gordo oficial con mostacho—veo que se encuentra preocupada, ¿es suyo ese auto?

—Oh si... no sé qué le pasa, pero se me apago de repente—Piensa Valerie, tienes que pensar— estaba conduciendo tranquilamente y se apagó, ¡mi novio me matara! —Se puso una mano debajo del parpado en forma de que iba a llorar—que puedo hacer ahora.

—Relájese, seguro es una pequeña falla, ¿podría decirme su nombre?

—Me llamo Lucy, Lucy Red, mucho gusto—soltó su mirada picara—

El policía se sonrojo ante aquello y levanto el cofre del auto para poder ver, al parecer todos los hombres sabían cosas de autos o al menos eso pretendían, sin mucho tiempo que perder Valerie se fue alejando lentamente hasta mezclarse con la multitud y perderse, cruzo a la izquierda y empezó a caminar más rápido, viendo hacia atrás para confirmar que no la seguía el policía, cruzo la calle y entro en un callejón con pequeñas tiendas a ambos lados, su teléfono el cual tenía muy poca batería sonó, reviso quien era y se trataba de Mike, decidió ignorarlo y seguir caminando, vio hacia atrás de nuevo y cuando iba a voltear hacia adelante choco contra alguien.

—Discúlpeme, es que ando un poco distraída y...—la persona con la que había chocado era ese tal Pedro al que le había robado el auto—

— ¿Distraída por haber robado mi auto zorra?

Todos los que caminaban por la calle voltearon a verlos, Pedro iba acompañado de un hombre esbelto vestido con un suéter negro, y al lado de este estaba el policía que la había ayudado con el auto.

— ¿Está completamente seguro de que es ella? —dijo el hombre esbelto—

—Por supuesto que sí, su nombre es Lucy Red—afirmo el policía del mostacho—

—A mí me dijo que se llamaba Anastasia...—dudo Pedro—

—Señorita, lamento informarle que tendrá que acompañarme a la comisaria, está bajo arresto.

Sin más que decir Valerie camino a la camioneta del hombre esbelto con la cabeza gacha, no tuvo más remedio que sacar rápidamente su teléfono y escribirle a Mike un mensaje antes de que entrara el hombre de suéter negro. Lo hice de nuevo, ven a la comisaria que está en el centro, apresúrate.

Mientras cepillaba su cabello un sentimiento de angustia recorrió el cuerpo de Mónica, veía su reflejo en aquel espejo, que se encontraba sobre un tocador color negro el cual tenía tres pequeñas gavetas llenas de maquillaje, Arthur había pasado la noche en casa de Mónica ocupando uno de los tantos cuartos que tenía, aquel sentimiento se debía en parte por la repentina huida de Valerie, luego de que ella se fuera no paso mucho tiempo para que Jackson y Mike hicieran lo mismo, la secta estaba de regreso, solo que no se podía hacer nada si no estaban todos completos, según Mike llamó durante toda la noche a Valerie pero esta solo la ignoro, escucho un sonido extraño proveniente de afuera de su habitación, dejo el cepillo en el tocador y camino lentamente hacia afuera por el pasillo que conectaba el resto de las habitaciones, el sonido extraño se fue intensificando, siguió caminando y se dio cuenta de que provenía de la habitación donde estaba Arthur.