Dudas

403 45 5
                                    

-¿que fue todo aquello?- pregunte dos horas después de haber llegado a casa de yun.

-te seré fiel si es lo que quieres saber.

-no estaba pensando en nada de eso...

Yun suspiro y se llevo una mano al cuello, se acerco a mi y me rodeo de tal manera que termino abrazandome por la espalda y dejando caer su respiración en mi hombro.

Por un segundo tuve miedo de que intentara algo mas, pero eso no sucedió. Sus padres llegaron y yo me fui a casa.

*

*

-¿como es que puede hacer ese tipo de cosas?- me pregunto mientras mis mejillas arden.

*

Todo lo que veo a mi alrededor pasa en cámara lenta. Se que tengo que hacer pero no me atrevo a hacerlo.

-no tienes que forzarte erick - es algo que escuche decir de sus labios esa noche en un sueño.

Desperté reventado de emociones sin poder volver a consiliario el sueño.

-podemos hacer otra cosa si no quieres hacer esto ahora -recuerdo que dijo en el mismo sueño.

Mis mejillas arden cada vez que lo recuerdo. Mas porque recuerdo el tacto de sus manos sobre mi piel.

*

*

-hola erick- pronuncio de sorpresa cuando entre al salón de clase esa mañana.

Mis mejillas se encendieron al instante. (Y por mas que obvias razones la clases me parecieron eternas. )

*

A la hora de receso vanessa apareció en el salón.

Tenia unas ojeras mas que evidentes y el maquillaje corrido.
Se acerco a nosotros (mas bien a mi y dijo) -eres un traidor... Tu sabes por todo lo que hemos pasado...- antes de apostarme una cachetada, que hubieran sido muchas mas de no ser porque yunue prácticamente la llevo cargando hasta la salida.

Ella se aferro a él y lloro en su pecho.

-ya no vengas... -soltó yun haciéndola llorar mas.

Todo el salón esta presenciando aquella escena, y las noticias vuelan rápido, en cuestión de minutos la mejor amiga de vanessa estaba aquí, le susurro algo al oído y ella por fin deshizo su agarre.

La camisa de yun termino con manchas de maquillaje, y el con los ojos cristalinos. Me miro y después salio. ( no me lo plante y solo le seguí. )

Terminamos en el baño.Yun entro antes que yo, y cuando yo entre él se aferro a mi como lo había hecho vanessa a el.

Lo único que pude hacer fue pasar suavemente mi mano por su cabello y esperar que se calmara.

-porque no... -empece a decir pero el me paro.

-las cosas con ella nunca fueron como lo aparentaban erick...

-¿a que te refieres?- miro al techo a un con los ojos vidriosos y comenzó a hablar. - vanessa no es lo que todos piensan- se alzo levemente su camisa y una pequeña cicatriz se dejo ver. -fue un vidrio... Ese día ella fue a un bar con un amigo, yo la encontré por casualidad y los vi- sonrió de manera sarcástica - desde ese día descubrí a donde se iba cada vez que desaparecía, por eso tome la pastilla, porque ella dijo que iba con el por que conmigo nunca había pasado. Termine peleando con el chico, los vasos volaron y en algún momento el hizo algo que no recuerdo, pero me encajo un pedazo de su vaso.

-¿porque nunca dijiste nada?

-no sé, supongo que porque la amaba. Y solo quería pensar que eso no había ocurrido.

*

*

Cuando yun se calmo vagamente pensé en volver a clase pero despues de la escena de ese rato... Solo hice que unos compañeros nos arrojaron las mochilas por la ventana en el cambio de profesor. Salimos de la escuela y terminamos donde siempre. Aunque esta vez el parque por alguna razón estaba con alguna que otra persona cuando de normal no hay nadie.

-¿quieres irte?- pregunto yun.

-esta bien...

se dejo caer y me arrastro con el dejandome entre sus piernas.

-solo un momento...- susurro en mi oído.

suspire y solo me recoste en su pecho.

-ya estas aprendiendo... -dijo con una sonrisa divertida. Yo le seguí la corriente y deje que me abrazara.

-vamos a mi casa...- dijo mientras pasaba su nariz ligeramente por mi cuello.

-¿estan tus papás?- pregunte con la esperanza que dijera que si.

-no -termino por decir.

-o-oye apenas ayer te dije que... -

-lo se, pero anda, por favor... Si ya paso una ves porque no puede pasar dos... -solto interrumpiendome.

*

*

Cuando llegamos a su casa no se hicieron esperar sus intenciones.

Fuimos a su cuarto y sus manos se vieron desesperadas. No sabia muy bien como manejarme, pero mi cuerpo reacciono solo a el primer contacto.

Las cosas fueron rápidas, en menos de lo que esperaba mis manos se manejaban solas y con cada beso intentaban quitar mas y mas su camisa.

-si estas nervioso aun tengo pastillas...

-no las necesito...

¿Y si hacemos yaoi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora