Ella siempre se mantuvo al margen de todo.
Nadie la noto cuando llego junto a su melliza a la mansión.
Nadie noto que huyo de la mansión, nadie la noto jamas y eso ella lo agradecía, sin embargo su felicidad no duro mucho.
El rey noto que algo pasa...
A pesar de su situación y estado, se sentía tan llena de paz en ese lugar, tan sola, un ambiente tan tranquilo y para ella sola. Estaba en la biblioteca del colegio, aún faltaban unas horas para irse y su curso no tenia profesores, estaba tan tranquila.
Aunque su paz hubiese sido completa si no fuera por esa mirada.
-puedes irte? -pregunto/ordenó la oji zafiro cambiando de hoja.
-urusee eres ruidosa -bostezo el rubio aún con sus ojos puestos en la komori menor, desde que ella bebió de su sangre y los dos se declararon aliados, el rubio no se despego ni un segundo de su lado de la hora y media que paso.
-perturbas mi paz, aunque sea cierra los ojos y duerme no me mires fijamente -susurro aburrida y sin mirarlo, ella estaba sentada en una silla y el rubio estaba recostado en un sillón de allí sin dejar de mirar a la oji zafiro.
-urusee volvió a decir el perezoso recostando su cabeza en el sillón y mirando el techo.
*toc* *toc* *toc*
El rubio golpeaba repetidamente sus uñas contra el suelo, no hacían tanto ruido ya que tenia las uñas cortas pero era muy irritante para un lugar lleno de silencio.
El rubio siguio haciendo el mismo ruido.
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*bum!*
-puedes dejar de hacer ruido?!, se supone que eres un perezoso que duerme las 24 hs del día, qué haces tan despierto?, duerme chikushoo! -le grito hotaru mirándolo enojada e irritada, él la miro aburrido.
-hn -sonrio divertido ante su reacción y ella gruño enojada.
-"maldito rubio teñido!" -pensó enojada con el puño levantado a punto de golpearlo.
-qué hacen aquí? -pregunto una voz fría y seria haciendo que los dos vuelvan a su rostro in expresivo y aburrido, era reiji el cual los miraba entre serio y curioso.
Era extraño que ellos dos, los cuales no mostraban interés alguno por lo que los rodeaba e incluso por ellos mismos, a vista del oji fucsia, estuvieran juntos y actuaran como conocidos. Se notaba a su alrededor que por algún motivo eran cercanos.
-ah, que ruidoso eres -se quejo el rubio levantándose con los ojos cerrados y las manos en los bolsillos, hotaru los miro y dejo el libro en su lugar.
-no vuelvas a molestarme -dijo hotaru mirando con enojo al rubio que sonrio divertido, ella chasqueo la lengua y se fue de allí.
-la sangre de esa humana es interesante -comentó el rubio caminando hacia la salida.
-ese hombre dijo que no debemos de beber su sangre -le recordó reiji con el ceño fruncido.
-estuve a punto de beber de ella, pero al parecer ese hombre le dio algo para que cada vez que intentemos beber de su sangre un campo aparezca a su alrededor -aviso con seriedad, el oji fucsia quedo pensativo.
-algo planea ese hombre -susurro curioso.
-parece que si -dijo serio y mirando de reojo a su hermano, cayo en su juego.
"Se levanta el telón, que comience el teatro de las mentiras."
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