20.

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Día 23.

Lina.

- Entonces, ¿está diciendo que él la empujó fuera del auto? - le preguntó uno de los periodistas a Ely y mi mirada voló hacia ella al instante. Se veía tranquila, pero sabía que, en el fondo, todavía tenía miedo a lo que esa rueda de prensa podría causar.

- Así es. - respondió mi pequeña dongsaeng. - Yo hubiese preferido que este tema no se volviese público, pero fue así, él quiso que se diera de esa forma. No voy a permitir que se crea que él fue la víctima, cuando en una relación, hay dos personas involucradas. Lamentablemente, la nuestra no funcionó y si bien no voy a explicar razones o entrar en detalles, si quiero aclarar que las cosas no se dieron como se ha dicho.

- ¿Hay alguien más? - se escuchó a alguien preguntar y rogué al cielo porque Ely no voltease a ver a Yugyeom. Pero no era necesario, ella no lo hizo. El problema era que Yugyeom si volteó a verla y se veía nervioso. - Una de las cosas que se dijeron en el artículo fue que había cancelado su compromiso porque hay otra persona en su vida.

- Les vuelvo a repetir que no voy a darles todos los detalles sobre nuestro rompimiento. - respondió Ely, pero la prensa no estaba satisfecha y todos lo sabíamos. - Pero les diré que las personas que estamos envueltas en este mundo, no vamos publicando toda nuestra vida en internet. Tratamos de que ustedes vean las cosas buenas para poder incentivarlos a que sigan adelante, a que luchen por lo que quieren, pero no quiere decir que no tengamos problemas o que, en este caso, nuestras relaciones sean perfectas.

- Bien dicho. - susurré y tanto Jinyoung, como Yugyeom, asintieron con la cabeza.

- Mi relación con Andrew ya estaba mal desde hace un tiempo. - añadió Ely. - Pero, a diferencia de él, prefiero dejar todo en el pasado.

- ¿Qué planea hacer ahora? - me volví hacia la voz al instante y le sonreí al periodista que hizo esa pregunta. Era un amigo mío.

- Enfocarme en mi trabajo, como siempre lo he hecho. - replicó firme mi joven amiga. - Tengo muchos proyectos y metas que todavía quiero alcanzar.

- Hay personas que luego de este tipo de escándalos, no vuelven a trabajar, ¿qué cree que le ayudará a usted a seguir adelante?

- Tengo el apoyo de las marcas para las cuales trabajo. - respondió ella y al instante, se volvió hacia el lado derecho de la sala, donde nos encontrábamos sus mejores amigos y yo, y nos dedicó una sonrisa confiada, tranquila. - Y tengo a personas maravillosas a mi costado que me dan fuerza para seguir adelante y me ayudan a mantenerme enfocada.

- Esa es mi chica. - logré escuchar a Yugyeom musitar y me alegró saber que hubiese un hombre que verdaderamente la amara y estuviera así de orgulloso de ella.


Día 29.

Elizabeth.

Luego de rueda de prensa, las cosas comenzaron a arreglarse... O algo así. Andrew me mandaba mensajes, diciendo que me arrepentiría de todo, y eran tan constantes que tuve que cambiar de número. Jinyoung quería ir a matarlo, al igual que Lina, pero yo había preferido que ya ninguno de nosotros tuviese contacto con él. Yugyeom había agradecido enormemente esa decisión.

Yugyeom. Cielos. ¿Era posible siquiera amar tanto a alguien? Me había abierto los ojos completamente y me había mostrado que lo que sea que llegué a sentir por Andrew, era nada comparado con lo que sentía por él. Lo extraño era que nuestras pequeñas tradiciones seguían iguales, él seguía yendo a visitarme, yo seguía asistiendo a sus ensayos y a sus presentaciones, y seguíamos saliendo por café o por algo de cenar. Todo parecía normal para las fans, ya acostumbradas a vernos juntos, pero ambos sabíamos que no era así. Algo había cambiado en la forma en la que me miraba, en la que me abrazaba o acariciaba mi cabeza, y yo tampoco lo veía de la misma forma, ni interpretaba sus caricias como antes.

Sentía que estábamos hechos el uno para el otro y me culpaba por no haberme dado cuenta de algo tan obvio. Sin embargo, tenía miedo. No quería dañarlo, no quería arruinar su carrera, ni perjudicarla, y tampoco quería que las cosas terminaran mal como con Andrew.

Lina y yo habíamos sido invitadas a un desfile de modas en Milán, y luego haríamos una sesión de fotos para una de las marcas para las que trabajábamos. Todo ello nos tomaría más de una semana, diez días para ser exactos. Era la primera vez que viajaría lejos de Corea por tanto tiempo y aunque estaría con Lina, se sentía raro no estar con Yugyeom o Jinyoung.


- Prométeme que vas a cuidarte. - dijo Yugyeom mientras nos despedíamos en el estacionamiento del aeropuerto. Llevó sus manos a mis mejillas e hizo que lo viera directo a los ojos. Cuando lo hice, acarició mis mejillas suavemente.

- Claro que sí. - le aseguré con una sonrisa. - Y tú, no dejes de responder mis llamadas. - Yugyeom negó con la cabeza.

- Así esté en el escenario, correré solo para responderte.

- Yah, no me mientas. - Yugyeom rió.

- ¿Qué tengo que hacer para que termines de convencerte que eres la mujer de mi vida?

- Nada. - respondí. - Con que seas tú es suficiente. - él me dedicó una sonrisa que imité al instante.

- ¿Y cuando aceptaras, por fin, ser mi novia? - mi cuerpo se congeló ante la pregunta.

- Tu sabes por qué.

- Entiendo. - dijo mientras asentía y acariciaba mi mejilla. - Te voy a extrañar.

- Volveré en diez días.

- Estaré esperando. - susurró antes de besarme.

¡No te cases! | Kim YugyeomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora