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 Sábado por la noche: 

Me encuentro fuera de la casa de Louis esperando a que el chico salga, tengo aproximadamente 20 minutos aquí y aun no esta listo lo que me hace pensar que puede ser igual o peor que las mujeres al momento de arreglarse. Por dios, a veces es un poco marica pero no se que haría sin el. Mientras lo espero saco del pequeño bolso de mano que cargo la cajetilla de cigarros, enseguida tomo uno y lo enciendo dándole las primeras caladas, que bien me hacia sentir esto, comencé a fumar desde los 18 y desde ese momento había querido dejar este maldito vicio que poco a poco acabaría con mi vida pero simplemente no podía la ansiedad me ganaba y siempre terminaba fumando  la cajetilla entera. 

A los pocos minutos el chico salio y lucia realmente bien. Llevaba unos jeans color negro, con una camisa azul y zapatos negros que hacia lucir lo atractivo que el chico era. -Nunca dejaras ese maldito vicio cierto? -Me reprocho mientras se acercaba y quitaba el cigarro de mis labios tirándolo al suelo y pisándolo con la punta del zapato. 

-Ey ¿porque haces eso? -dije de forma seria. Aun le quedaba

-Apestas a cigarro Camila, no me toques. -retrocedió haciéndome rodar los ojos. -Debo estar hermoso para mi bebe 

-Ash eres una marica. -Bufe mientras caminaba hasta su auto. Cuando el chico entro y encendió el motor y hable de nuevo. -No me dijiste que la fiesta a la que estabas invitados es de Amy  

Amy es la novia de Louis, una castaña muy hermosa que conoció hace tiempo y con  quien  lleva casi dos años de relacion, la chica me odia,  en su momento se le paso por su diminuto cerebro la idea de que Louis y yo teníamos algo, y no dejaba de molestarme, así que llego hasta el punto de acabar con mi paciencia y darle unas cuantas bofetadas para aclararle que el chico y yo no teníamos nada y se calmó, ahora me trata mejor, se dejó de esa absurda idea, pero bueno, da igual 

-Uuuh sorpresa baby. Dijo con nerviosismo. Y lo mire fulminante 

**** 

-¿Verdad que mi baby hace unas fiestas fantásticas? -grito el chico debido al alto volumen de la música, y yo asentí, era verdad la chica hacia buenas fiestas. Eran pasada las tres de la madrugada y aquí estábamos, tomando licor como locos y divirtiéndonos. 

-Ven Mila vamos a bailar. -volvió a gritar mientras tomaba mi brazo, llevándome al centro de la pista

-¿Y si a tu novia no le gusta verte bailar conmigo? -pregunte algo indecisa

-Ella ya comprendió que entre tú y yo no va a pasar nada más que solo una amistad, tus bofetadas le colocaron el par de neuronas que tiene en su sitio. -dijo mientras reía y yo lo seguí

-Que maldito eres Tomilson, escucha como hablas de tu propia novia. -dije entre risas. Te pasas de verdad

-Mi vida es la verdad, a veces me colma la paciencia, y ruego a Dios para que me de mucha más y no mandar todo a la mierda pero es buena chica y la amo

-Aww ya te pusiste sentimental, el trago te removió la cursilería. -me burle

-Cállate boba y vamos a bailar

-Okey vamos

Después de bailar unas tres canciones con el chico caminamos hasta el jardín de la casa donde se encontraba Amy y unos cuantos amigos con quienes habíamos estudiado semestres anteriores, que alegría de que pudieran estar aquí. Estuvimos hablando con ellos alrededor de una hora y entre trago y trago ya comenzaba a marearme un poco, por lo que me sostuve de Louis. Ya era muy tarde,  y la combinación alcohol estaba haciendo su efecto en mí, trataba de mantenerme lo más tranquila posible o en cualquier momento me podría caer.

Una Historia Diferente (camren)Where stories live. Discover now