®La Princesa Que No Era Princesa [r.d.g.]

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Luego de mil regaños al final nos despedimos y nos fuimos a lo que yo llamo cárcel de por vida.

Entré a mi habitación y quité todo lo que me volvía una princesa y me acosté en mi cama boca abajo. Me quede un buen rato en esa posición hasta que llevé mis brazos cruzandolos y dejando mi cabeza sobre ellos mientras miraba hacia la izquierda donde estaba mi gran ventana. La noche era hermosa, las pocas estrellas que se veian hacían el cielo aún más hermoso quitando lo horrible que se veía con la contaminación.

Al mirar las estrellas me hizo recordar el rato que estuve con él, era buen amigo y no lo miro con otros ojos. No se me hacía lindo ni nada, además de que era el prometido de mi hermana. Solo era un buen amigo con el cual pasar el rato.

Mis ojos se cerraron un poco por el cansancio que tenia. Pero los abrí de golpe y me levanté sintiendo un leve mareo. Me acerqué a la ventana y pude divisar un par de edificios y muy muy a lo lejos unas luces que al parecer eran fuegos artificiales. Mire extrañada esa parte, nunca me había percatado de que cerca habia una ciudad... Nunca he ido una ciudad ni compartido una sola palabra con gente fuera de la realeza. Mis ojos se iluminaron al ver ese espectáculo. Corrí a apagar las luces y volví a mi ventana donde podía apreciar mucho mejor el sorprendente descubrimiento.

Retrocedí un poco para tomar mi celular y busque en Google la ciudad más cercana a mi reino, y para mi sorpresa encontré que a muchos kilómetros de aquí se encontraba Las Vegas. Sonreí cual niño con juguete nuevo y comencé a buscar por Internet alguna festividad que había en Las Vegas y para mi sorpresa no era nada mas y nada menos que un festival de música electrónica. Ahogué un grito de emoción y sin esperar un minuto más salí de mi habitación a escondidas. Eran altas horas de la noche así que debía ser sigilosa, me dirigí a una oficina extraña que estaba en mi castillo y entre con cuidado.

Ahí es donde toda las cosas que tenia eran encargadas desde esta computadora que a decir verdad era una pasada. Entre solo a buscar la tarjeta de papi y la tarjeta de mami junto con ello la contraseña. Mis padres habían heredado una muy buena suma de dinero de mis abuelos y si les robo dinero ni cuenta se darán ya que el dinero sube 1000 dólares por media hora así que quitar un par de cifras no haría la diferencia, o si?.

Al tener lo que quería corrí a mi cuarto con cuidado y desde mi celular comencé a encargar ropa que necesitaba. No iba a quedarme de brazos cruzados sin conocer una ciudad, sin conocer gente nueva y cosas nuevas.

Se venia una muy grande aventura, y quien mejor que ser mi compañero que el buen amigo Rubén Gay Ruff no se que. Si, para mi es gay, es medio afeminado y no hace nada de hombre.

Bien. Desde hoy un gran cambio viene a mi vida, y que mejor comenzando por una linda y deliciosa identificación falsa... Que? Tengo 15 años, ni de broma me dejan entrar a un festival de música electrónica, es obvio.

Desde hoy mi vida cambiará y podré cantar orgullosa Y SOY REBELDE CUANDO NO SIGO A LOS DEMÁS Y SOY REBELDE...Y NO RECUERDO QUE MÁS!

Reí para mi mientras compraba todo lo que me gustaba.

Esta noche no duermo baby.