Doctor Who (V) : Coincidences don't exist [En edición]

Capítulo 10: Vincent y el Doctor

Bajamos de la TARDIS para encontrarnos en París, supongo que el Doctor complació a Amy después de todo. Salimos cerca del museo del Orsay. Amy es la más emocionada de los tres, su pintor favorito es Vincent Van Gogh, me pregunto qué tanto lo ve.

Las últimas aventuras habían sido tranquilas, sin extraterrestres en nuestros camino. Lo cual se lo agradezco mucho, de antemano.
Entramos al museo que antes era una estación del tren. Ese museo es impresionante por la cantidad de pinturas que se encuentran ahí, con muchos maestros de las corrientes.

Llegamos a la sala de Van Gogh, hay mucha gente en este lugar viendo las pinturas. El Doctor va directo a una, me parece que es la de la iglesia de Auvers, las últimas que pintó en vida.

– ¿No ven algo extraño?- nos pregunta el Doctor.

– No se- comentó Amy indiferente.

– Siento que lo sobra algo, pero no sé qué es- digo confundida-. Je ne sais quious.

– Es esto- el Doctor señala a una parte de la pintura en el que hay una mancha negra en lo que parece ser una de las ventanas-. Tenemos que investigar que fue lo que vio.

El Doctor se separó de nosotras, se acercó a un guía de turistas, diciéndole que era un estudioso del arte. Le pregunta sobre la fecha en la que se realizó, no sin antes decirle sobre su buen gusto por su corbatín, espero que un día deje de hacerlo es realmente molesto.

– Es hora de irnos- nos dice el Doctor caminando rápidamente.

– Espera, ¿no vamos a ver el resto del museo?- preguntó sorprendida.

– Después, esto apremia más que otras cosas, Abi.

– No me digas Abi- le digo ofendida.

Nos salimos rápidamente del Orsay para entrar a la TARDIS, espero que no hayamos venido a eso exclusivamente, o si no tendremos una pequeña plática sobre esto.

Veo que Amy se está yendo para preparase, está demasiado emocionada, como si hubiera deseado todo lo que estaba por ocurrir, toda su vida. Me le quedo viendo al Doctor que ve muy concentrado la consola.

– Dilo ya Abi- dice viendo a la pantalla-, sabes que de todas formas te voy a responder a lo que vayas a preguntar- doy un suspiro para relajarme.

– Dime que no fuimos al museo para ver exclusivamente eso.

– Puede ser- se escucha el sonido de la TARDIS aterrizando.

– Lo tomaré como un sí.

Amy es la primera en salir, me le quedo viendo al Doctor para después salir. Estamos en el pueblo de Auvers, todo parece pequeño y con ambiente que te invita a caminar por sus alrededores. El Doctor sale caminando, buscamos un lugar en donde cenar, encontramos un pequeño café.

– Pienso que este sería un buen lugar para cenar- digo animadamente.

Pero mi animo se derrumbe cuando escuchamos unos gritos que provenían dentro del café, vemos como un hombre es arrojado afuera de aquel café, y después lo que parece ser un cuadro. Amy y yo nos acercamos rápidamente para levantarlo.

– ¿Esta bien?- pregunta Amy preocupada.

– No, no lo estoy- responde el hombre, alza su mirada y me quedo muda por ver quién es-. Gracias por ayudarme.

– Déjanos presentarnos- dice Amy emocionada, me recordó aquella vez que el Doctor conoció a Charles Dickens, con aquel pequeño incidente con los fantasmas-. Ella es Abigail, él es el Doctor y yo soy Amy.

– Es bueno conocerla.

Nos sentamos en una mesa que se encuentra afuera del local, llega el hombre que había aventado la pintura de Van Gogh diciendo que no lo quería ahí, pero el Doctor se negó diciéndole que era nuestro invitada.