Día 2|

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ENERO 8 - confianza ✻ reunión ✻ redes sociales.

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Casi como siempre, consiguió una completa victoria en la persecución de un rebelde y caprichoso delincuente que hábilmente había robado alrededor de tres bolsos en una sola expedición. Aquello fue tan trivial que al héroe profesional "Shoto" no le costó más de diez minutos detener al malhechor e inmovilizarlo. Ya era la tercera vez asegurándose del bienestar de los individuos al hacer un patrullaje típico por la zona y apenas eran las diez de la mañana.

Entregó de regreso las pertenencias y se encargó del asunto hasta el arribar de los agentes policíacos que intervinieron formalizando el arresto. Algo bastante común en una vida de héroe.

Como tal, el propio Todoroki era bastante reconocido ya por su eficacia y rapidez al ejecutar alguna persecución o al realizar algún rescate, aunque esto no era específicamente su punto más fuerte. Aun con toda su destreza y virtudes, algo le decía discretamente que la mayor parte de la fama que estaba creciendo como si hubiese agitado una botella de sidra, se debía más a su propia apariencia y a sus típicos modales arraigados desde su infancia.

Si, aquello era un hecho que se estaba negando a aceptar del todo. ¿Por qué apreciarían más sus apariencias que sus propias hazañas? ¡Es un héroe, no un modelo!

Su teléfono celular vibró ligeramente, aun dentro de uno de sus bolsillos, avisándole respecto una nueva notificación. Ciertamente él mismo había estado sintiendo aquel vibrar a un costado constantemente, así que sin dar más preámbulos, sacó el teléfono notando la tremenda cantidad de notificaciones respecto algunas noticias y algunos cuantos mensajes. Confundido pasó primero a los mensajes de Midoriya.

"Todoroki-kun. ¿Las noticias son ciertas?"

"Realmente me gustaría entender un poco mejor las cosas"

"¿Hay algo que no necesito saber?"

"Kacchan no responde mis llamadas."

"Todoroki-kun, ¿Podemos vernos un momento?"

Y ahí entendió que algo definitivamente estaba mal. Pasó de largo y volvió a las noticias abriendo una tras otra enterándose de la farsa más grande con la que se había topado. En las redes sociales como pan caliente se compartía y comentaba una fotografía en específico. Se virilizó muy rápido a través de Hashtags por Twitter hasta llegar a Facebook, y de ahí parecía que se creaban más noticias y artículos para revistas virtuales. El caos comenzó a consumir las redes en tan tempranas horas, y tanto fue así que incluso una entrevista de uno de los implicados ya había sido realizada. Shoto no entendía nada.

Las primeras noticias llevaban como titular "¿Una posible historia de amor tal como en las historietas?", "Todoroki Shoto, el héroe PRO ¿ya no está disponible?", "Escandalo ante el posible romance de un Héroe Pro y una civil". Y la lista seguía, hasta los más recientes que, después de aquella entrevista afirmando aquella difamación, los titulares y las noticias rondaban asegurando un romance real. ¿Quién demonios estaba haciendo esto?

Parecía ser que todo comenzó por una simple fotografía que una civil que parecía ser su admiradora le pidió con mucho fervor. Le convenció rápidamente y ni siquiera supo por qué, pero se decidió y acepto posar para ella. Era una muy simple y nada comprometedora, la diferencia era que Shoto no solía dar fotografías, mucho menos firmarlas porque no creía que su trabajo se viese favorecido por ese tipo de fama que no fuese la propia confianza posada sobre sus espaldas al salvar el día a día. Si, tenía razón y aquel descuido que no lograba entender fue que comenzó un rumor.

¡BakuTodo Week 2018! [7 al 13 de enero]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora