Mi Estúpido y Sensual Hermano (h.s)©

Capitulo 24

Harry abrió los ojos como platos una vez mas pasado muchos justo en un solo día, ahora es que su padre, lo miro nervioso él no sabía que decir, Jenny estaba parado con los brazos cruzados al lado estaba el padre de Edward.

Edward: ah tío, cosas de nosotros no queremos que escuchen ¿ustedes entiende no? -dijo Edward ya que Harry no se le ocurría nada

Johnny: ah -rio -ya entiendo...Bueno está bien vayan porque seguro que sus madres escuchan lo que dicen le darían un mini infarto -rieron Harry apena forzó una risita fingida, luego de que paso ese susto con su padre, se acercaron asía el establo para estar mas solo.

Harry: gracias por eso -suspiro aliviado

Edward: de nada ¿y entonces? ¿Explícame como es que te enamoraste de __ así? -empezaron hablar, Harry le contaba todo, el no quería decirle pero el ya lo averiguo y prometió no decir nada.

Estabas en la sala con Andrea tu prima, ambas se encontraban sentada viendo una película, no tenias mas nada que hacer y le pediste a ella ver una película, bueno una serie llamada the diares vampire ella te contaba de que se trataba la serie, tenía la temporada 1 descargada en un pendrive, estaba emocionante la serie, unos minutos después alguien llamo a la puerta, te levantaste abrir ya que nadie se molestaba en abrirte acercaste a ella y te llevaste una gran sorpresa era Gabriel quien tocaba el timbre.

Gabriel: hola -te sonrió de oreja a oreja mientras te veía de pies a cabeza, le sonreíste incómodamente ya que te veía mucho

Tu: hoola

Gabriel: soy gabriel ¿y tú? -extendió su mano, tú la tomaste

Tu: soy ___ -el sonrió nuevamente

Gabriel: lindo nombre

Tu: umm gracias

Gabriel: ¿se encuentra Edward?

Tu: claro pasa debe de estar afuera -te hiciste a un lado para que pasara entro ala grande casa

Edward: ¿Gabriel? ¿Qué haces aquí? -pregunto él, cuando entro junto con Harry que no tenía muy buena cara que digamos, algo te decía que algo malo iba a pasar

Gabriel: bueno ¿a veces vengo aquí no? ¿O quieres que me vaya?

Edward: no claro que no -dijo rápido -vamos a mi cuarto ¿vas a venir Harry? -le pregunto a Harry quien miraba fulminantemente a Gabriel

Harry; um si, ahorita voy, voy por un poco de agua -el asintió, Edward y Gabriel subieron a las escaleras Gabriel no te quito la mirada de encima todavía tenia esa linda y sexy sonrisa coqueta, eso te incomodo un poco, Harry, bueno Harry estaba hirviendo de la rabiate agarro del brazo subio contigo arriba, te detuviste cuando estabas cerca de la puerta de tu cuarto.

Tu: ¿qué mierda pasa contigo? -preguntaste soltándote de su agarre bruscamente mientras lo mirabas seriamente y molesta, el apretó los dientes con fuerza, había olvidado la promesa que le había hecho hace algunos días allá en Alaska

Harry: mierda __...-gruño él, lo miraste confundida

Tu: ¿qué pasa? ¿Hice algo malo? -el negó y paso su mano por su cabello, aguantando la rabia odiaba la forma en que el te miraba, quedaba que lo recordaba la rabia el odia se hacía más grande suspiro

Harry: olvídalo -susurro el se humedeció los labios mientras te miraba fijamente

Tu: Harry estas raro ¿qué te pasa? -el negó

Harry: no quiero problema es todo -se dio la media vuelta y entra al cuarto de su primo donde se encontraban Gabriel y Edward hablando sobre ___, los dos se quedaron callados cuando Harry entro al cuarto, los mira a los dos sabia que hablaban de ella, era como si leyeran sus mentes, Edward encendió el playtencion 2 para en pesar el juego y olvidar la mirada de Harry quien quería saber de lo que hablaban.

Estabas confundida, Harry se había comportado extraño, te había agarrado del brazo bruscamente y subió las escaleras contigo luego te dice que no quiere problema y se va te deja con la duda, había terminado el primer capítulo de la serie, mañana tu prima y tu verían el segundo, subiste a tu cuarto te pusiste a leer el libro de 50 sombras de grey, alguien toco la puerta, te levantaste fastidiada y la abriste de sopetón abriste los ojos como platos, eso no te lo esperabas, el entro sin que tu le digieras que pasara y serró la puerta.

Tu: ¿qué haces aquí? -preguntaste confundida