2

2.4K 101 9
                                    

Cuando llego a la última clase del día estoy agotada metalmente, tengo demasiadas cosas que organizar y poco tiempo.

Me siento y saco mi portátil mientras el aula se va llenando interminablemente de gente, he intentado por todos los medios estar lo más apartads posible, pero al parecer un chico no ha captado la idea y se sienta a mi lado cuando no quedan más pupitres disponibles.

Suspiro y simplemente alejo un poco más mi silla para que no estemos lo suficientemente cerca como para entablar una conversación, lo cual sería incómodo para mí.

-Salam aleikom- Dice y me sobresalto.

-Aleikom salam- Respondo y centro la mirada en mi pantalla.

¿Es musulmán? Entonces, ¿qué hace sentado a mi lado?¿Cómo se llama?¿Cuántos años tendrá?

Demasiadas preguntas se formulan en mi cabeza y me muerdo el labio nerviosa mientras el profesor entra en la clase y comienza una breve presentación de su asignatura.

-Ya que estáis sentados de dos en dos, deberéis trabajar en parejas el resto del curso y empezaréis por entregarme un trabajo el lunes...- Dice pero yo desconecto por completo sumergida en mis pensamientos.

No puede ser, debo cambiar de compañero, no pienso hacer mis trabajos con él. Ni siquiera le conozco. Podría ofrecerme voluntaria para hacerlo sola, sí, eso prefiero. Creo que debería enviarle un e-mail al profesor explicando mi situación.

-Eh, parece que vamos a tener que trabajar en equipo- Susurra él .

-¿Qué?- Pregunto desorientada.

-Pues que eres mi pareja para los trabajos del resto del curso.

-Uhm, sí- Respondo, aún despistada, y por pimera vez le miro a la cara.

Él es alto, moreno, tiene el pelo ondulado y sus iris son marrón claro.

-Soy Ridwan- Me dice y me tiende su mano.

-Nur- Respondo apretando su mano.

En seguida vuelvo a mirar mi ordenador y tecleo cosas ilegibles esforzándome por parecer mínimamente concentrada y Ridwan no dice ni una palabra más en todo el periodo.

Cuando finaliza la sesión, estoy decidida a irme cuando tengo todas las cosas dentro de mi bolso marrón de mano y mi compañero de pupitre avanza a mi lado.

-Oye, ya que tenemos que entregar el primero de muchos trabajos, podrías darme un contacto y así podríamos...

-No, lo siento- Contesto cortante y muevo rápidamente mis piernas dejándole atrás con una posible cara de pasmarote.

Voy directamente a mi habitación y cuando llego me meto directamente a la ducha para hacer después mi rezo.

Yousra va a tardar en venir hoy así que enciendo mi portátil y comienzo a leer mis apuntes anotando las ideas más importantes en una libreta.

Para cuando acabo han pasado dos horas y estoy mortalmente hambrienta, así que decido bajar a la cafetería de la esquina a pedir algo de comer y de paso me encuentro a mi amiga volviendo junto a una chica rubia de ojos verdes.

-¡Salam!- Me saluda entusiasmada.

-Salam- Me río y miro a la chica- Hola, ¿qué tal?

-¡Bien! Me llamo Chloe, ¿y tú?- Pregunta con ojos curiosos.

-Soy Nur.

-Ella es nuestra vecina, coincidimos en algunos periodos- Aclara Yousra y sonrío amablemente- ¿Adónde ibas?

-A comprar algo para comer, ¿os animáis?

-¡Sí!- Gritan las dos al unísono.

Reimos y acudimos a la cafetería para pedir un sándwich caliente de queso cada una, nunca dejará de sorprenderme la calidad de la comida en relación al precio.

-Nur, Chloe dice que hay un gimnasio cerca y que podemos ir todas juntas, ya sabes, vida sana y todo eso. Además, con el carnet de estudiante nos sale gratis.- Bromea.

-Sí, está a tan solo diez minutos de aquí y podríamos apuntarnos las tres para ir después de las clases.

-Eso es una buena idea, estoy de acuerdo- Respondo.

-¡Bien! Entonces, vamos a dejar nuestros libros y a descansar un poco. Más tarde iremos a inscribirnos y a ver las instalaciones- Propone mi amiga.

-¡Claro!- Responde Chloe.

Hacemos lo acordado y me quito la ropa para cambiarla por un chándal negro holgado, cuando Chloe entra a través del baño termino de colocar mi turbante y me pongo la capucha.

-¿Listas?- Pregunta Yousra atando sus cordones.

-Más que eso- Contesto.

En el camino hacia el gimnasio, Chloe nos cuenta un poco más de ella. Está estudiando Traducción e interpretación inglesa, también nos cuenta que comparte habitación con una compañera a la que no ha visto demasiado tiempo, viene a dormir tarde y cuando ella vuelve de las clases la chica ya no está, ni siquiera han hablado.

-Bueno, aquí es- Nos informa la rubia y entramos las tres en dirección a la recepción.

-¡Buenas tardes!- Saluda Yousra sonriente a la dependiente- Queremos inscribirnos en el gimnasio.

-Está bien. Mirad, tenéis que rellenar estas hojas y os daré un carnet con vuestro nombre que escanearéis cuando queráis acceder a las instalaciones deportivas.

Tras dar algunos datos conseguimos nuestros carnets y pasamos por una puerta grande para acceder a los vestuarios femeninos en los cuales, guardamos nuestras bolsas en las taquillas y después, accedemos al gimnasio.

En la primera sala hay algunas máquinas de fuerza, y resistencia. En la segunda sala se encuentra un área para hacer yoga, y en la tercera hay un par de sacos de boxeo junto a lo que parece un ring de peleas.

Hay varios chicos boxeando y cuando estoy apunto de bajar la mirada reconozco el rostro de uno de ellos. Ridwan. Espero que no me vea, después de haberle dejado atrás en el pasillo no me gustaría encontrarle aquí, así que tiro del bazo de las chicas volviendo a la sala del principio.

-Estaría bien empezar por algo suave hoy, ¿no creéis?- Pregunto sonrojada.

-Uhm, sí- Responde Yousra intentando analizar mi expresión con su mirada.

Habiba -halal love.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora