Decidida, me vestí decidí salir de allí. Con mis tacones en la mano, salí del cuarto, tenía ganas de llorar, de gritar. Y ya que todo estaba demasiado perfecto, tuvo que aparecer Summer ahí.

-Hey Ash!... Espera... estabas en esa habitación? Por si acaso no viste unos pendientes dorados... Aguanta. Estabas con alguien ahí dentro? -Me pregunta en tono pícaro.

-Emm... - No sabia que responder. Se me notaba el nerviosismo en la voz -No, estaba sola, solo... estaba descansando... - Y justo en ese momento la puerta se abrió y salió Kendall a medio vestir gritándome.

-Espera Ashly... - se callo cuando se dio cuenta de la situación. Se quedó en blanco, al igual que los ojos de Summer.

-Jajaja... por un momento pensé que... ustedes dos... jajajaj... no, no por favor decidme que no...- Summer súplicaba, pronunciando con dificultad sus palabras. Sus ojos se empezaron a aguar. Kendall trato de contenerla. -NO ME TOQUES!

Summer salió corriendo, llorando histérica. Kendall la siguió. Yo estaba en shock, cuatro años ocultando esto y por una simple borrachera se había ido todo al carajo. Tenía algo raro en mi cuerpo, algo no andaba bien. Tenía ganas de llorar, pero también ganas de gritar fuerte.

Durante dos meses no vi a ninguno de los dos, me sentía vacía sin el. Sentia que faltaba algo. Me mantuve cerca de Jacob, mi mejor amigo. El se entero de lo sucedido, no se enojo, pero se enfado por los cuatro años llenos de mentiras. Summer le había contado a su amigas, cuyas distinciones eran ser realmente chismosas, por esto, el rumor de que me había acostado con Kendall se esparció por todo el instituto.

Varias personas me odiaban, pero no sabia porque, no les había quitado el novio a ellas. Durante ese tiempo me empecé a sentir terriblemente mal. Mareos y vómitos eran constantes. No quería comer, con el miedo de seguir vomitando. Hasta que un dia en la casa de Jacob me desmaye.

Desperté en la clínica, con el médico al lado, y él con una gran sonrisa. Sería estúpido este, no veía que estaba en una clínica y que no había nada feliz en eso.

-Que bueno que haya despertado, que susto que le dio a su amigo.-Dijo mientras señalaba a Jacob en una silla al costado de la habitación, dormido.- Me imagino que no está usted enterada de su situación...?

-Perdona? Qué situación?- Este médico ya me estaba confundiendo.

-Qué está usted embarazada de dos meses! Enhorabuena! -Mi cara se volvió pálida, sentí un mareo nuevamente y todo se volvió negro otra vez.

Desperté por una caricia en mi mano, abrí mis ojos, era Jacob. Al verme responder, sonrió.

-No me paras de dar sustos! -dijo riendo. Y luego recordé todo.

-Estoy embarazada. -solté de repente. Estaba seria. Y la sonrisa de Jacob se desdibujo.

-Como?! De quien!? Cuando?! Emm... estas segura? - Jacob estaba mas confundido que yo. De pronto, un silencio inundo la habitación.

-De él. -Mi rostro estaba serio, y el de el tambien. Nos miramos fijamente sin decir una palabra. No volaba una mosca en el cuarto, solo se escuchaba el viento golpeando contra la ventana. Jacob rompió el silencio con una pregunta:

-Y... se lo vas a contar?

-Y si, es el padre al fin y al cabo.

-Lo vas a tener? Tienes solo 16 años, y un bebé podría arruinarte todo el plan para tu futuro.

-No lo se, Jac. Son muchas preguntas, a las cuales no tengo respuestas. Lo único que sé es que quiero salir de esta clínica. Quiero estar en casa, quiero estar en mi cama, quiero dormir bien, quiero descansar. Por favor, jac, por favor, enserio! - Llosozaba. Me estaba poniendo histérica, quería irme.

SOLO BESAME!Where stories live. Discover now