Ni la muerte podra tocarte (Editando)

Happy family?

Rachel

No entendía la reacción de Scott, aunque a mi me sorprende conocer a sus padres de esta manera, no veo por que a él deba sorprenderle.

-Yo no tengo padres- dijo Scott sin ocultar su molestia por pronunciar esa palabra. Yo me sorprendí aun mas ¿que esta pasando?

-¡No seas insolente!- grito la mujer acercándose a Scott, al parecer ella tampoco esperaba esa reacción.

Ahora que la veo bien tiene los mismos ojos y la misma nariz que Scott, y no aparenta la edad que debe tener, al menos no te imaginas que tiene un hijo de la edad de Scott.

-¿Insolente?- dijo Scott -¿y que harás? ¿Llamaras a Susan para que me encierre en mi habitación? O, espera, convertiste mi habitación en una sala de estar para ti y para tus amigas- nunca había visto a Scott actuar de esa manera y aunque parecía fuerte me dio la impresión que el decir cada una de esas palabras le dolía, así que tome su mano, él me agradeció con un gesto y le devolvió una mirada fría y desafiante a su madre, quien se había quedado en silencio, no tenia respuesta para las palabras de Scott.

Entonces me miro, al inicio me miro con curiosidad, luego miro mi mano entrelazada con la de su hijo y su mirada cambio, había una especie de desaprobación y asco en ella.

-Espero que no olvides que tu ya tienes una prometida- dijo devolviendo su mirada a Scott, de pronto me sentí diminuta, ¿Scott tenia una prometida? Intente separar nuestras manos pero él me sujeto con fuerza, pero no era como si solo temiera que me fuera, más bien era como si al irme lo dejara vulnerable sin fuerzas para enfrentar esta situación.

-¿Te refieres a la ridícula chica que no puede ni ponerse los zapatos sin sus sirvientes? No gracias, ya encontré algo mejor- escuchar eso me hizo sentir tranquila. Es verdad no conocemos mucho de nuestro pasado, pero ya tendremos tiempo para eso. Volví a sujetar su mano con la misma fuerza con la que el sujetaba la mía.

-¿Algo mejor?- parecía que la frase le causara gracia -¿Ella?- me señaló pero sin mirarme -Debes estar bromeando, es decir, solo mirala, se nota que solo te quiere por tu dinero- eso si me molesto, estaba por defenderme pero Scott me interrumpió.

-¿Y no es eso lo que tu querías de Isaac?- inmediatamente el rostro de la mujer se volvió rojo de furia y levanto su mano con la clara intención de golpear a Scott pero él la detuvo.

-No soy el mismo niño sobre el cual creías tener poder- la mujer hizo una mueca de desagrado.

-Grisell, es suficiente- dijo el que supongo es el padre de Scott, seguía viendo a través de la ventana como si no le importara la discusión entre su esposa e hijo. Ella obedeció.

Él padre de Scott se acercó a nosotros, miro a Scott luego a mi, pero su mirada solo demostraba cansancio. La mayoría de sus facciones eran como las de Scott, tenían un gran parecido.

-Tenemos que hablar- le dijo a Scott -a solas-

Scott me miro y yo asentí, aunque la verdad es que si así fue el encuentro con su madre no quiero ni imaginarme como sera la platica con su padre.

Scott y su padre salieron de la habitación, por un momento temí quedarme a solas con su madre, pero ella solo me miro con odio y salió de la habitación.

-Casi podía tocar la tensión en el ambiente- dijo Demián acercándose, había olvidado que estaba aquí -¿y que te parecen tus queridos suegros?-

-Ni lo menciones- conteste -¿siempre han sido así?-

-Bueno, creo que hoy se portaron bien-

-¿Enserio?- lo mire con incredulidad.

-Si y bueno Scott ya es lo bastante mayor para defenderse, deberías haber visto cuando me conocieron, Grisell me dijo que fuera a pedir limosna en otro lado e Isaac noto mi presencia dos años despues-

-Creía que los que nacían en cuna de oro lo tenían todo-

-Económicamente si- Demián suspiró -pero Scott se canso de tanta falsedad e hipocresía, y como no irse de casa si tenia a este bombón para hacerle compañia- Demián se señalo y ambos reímos.

-¿Crees que Scott este bien?- dije retomando el tema.

-Pues no es la primera vez que lo buscan, así que supongo estará bien- sonrió -y ahora tu debes descansar, mientras yo iré a ver si Scott necesita que lo saque de ahí- asentí y Demián salio de la habitación.

Creo que nos hace falta conocer mas, el uno del otro.

Scott

Isaac me llevo hasta una oficina que supongo le presto el padre de Jim, entramos y nos sentamos.

-Ve directo al grano- dije, no quería tener mas trato innecesario con ellos.

-Perfecto- lo mire fijamente, tenia la misma mirada cansada que siempre a tenido -quiero que tomes tu puesto en la compañia-

-Me niego, así que esta platica termino- estaba por ponerme de pie cuando me interrumpió.

-No he terminado aun, no me interesa si no quieres mover un solo dedo para trabajar, solo quiero que hagas acto de presencia en los eventos que lo requieran, y yo te depositare semanalmente la cantidad que decidas-

-¡No necesito su maldito dinero!-

-Claro que lo necesitas, ¿como planeas pagar la cuenta del hospital? Además dudó que tu novia tenga dinero para pagar-

-¿Enserio me crees tan idiota como para no tener mis ahorros?-

-Dudo que jugar al mesero te deje suficientes ganancias-

-¿Y no te has preguntado como he sobrevivido todo este tiempo?-

-Con ayuda de tu tío por supuesto-

-¡Mi tío murió hace dos años!- estaba furioso, como es posible que sea tan desinteresado.

-No lo sabia- sonaba sorprendido.

-¡¿Como lo vas a saber si no te importa nada más que tu estúpido dinero?!- me levante y me marche de ahí.

Saliendo me encontré con Grisell, quien tenia una sonrisa triunfante.

-Espero tu disculpa- me dijo.

-¿Tu alguna vez te disculpaste?-

-¡Le diré a tu padre que no te de dinero!- grito molesta, obviamente creía que mi padre me había convencido.

-Por mi quedatelo, después de todo es para lo que me hiciste nacer ¿no?- la deje y me fui.

No quería saber nada de ellos.

-¿Estas bien?- me dijo Demián acercándose, negué con la cabeza -tengo algo que decirte- lo mire -Liz esta aqui-