Capítulo 18

6.4K 363 37
                                    

Estando en el baño me encuentro más que incómoda, debe ser por todo lo que he comido. De una bocanada echo la pasta que Izan había preparado. Me levanto y enjuago mi cara con agua caliente. Mientras pasan los minutos me voy encontrando mejor y decido volver a donde está Izan.

Al entrar al cuarto rezo porque no esté despierto. Voy con cuidado y parece estar dormido, al volver a meterme en la cama no es lo mismo porque ya no estoy rodeada por sus brazos, maldigo y me tapo con cuidado.

-¿Donde estabas?-Habla un dormido Izan.

-Estaba haciendo pis-Susurro.

Sin ninguna contestación más vuelve a acurrucarme junto a él y vuelvo a estar en el paraíso. Minutos después quedo profundamente dormida en sus brazos.

(...)

Un ruido me hace sobresaltar de la cama. Abro los ojos y fijo bien mi vista, miro a mi derecha e Izan no se encuentra en mi cama. Me hubiese gustado despertar junto a él...

Toda mi tristeza se esfuma cuando lo veo aparecer con una pequeña bandeja que contiene un par de tostadas y un zumo de naranja. Demasiada comida para mí, otra vez.

-Toma, para mi pequeña princesa-Dice poniendo la bandeja sobre mí y dando un beso en mi frente.

-Eres el mejor.

Me dedica una gran sonrisa de satisfacción y se sienta a mi lado. Mientras desayuno a grandes esfuerzos parece darse cuenta que que estoy comiendo a la fuerza, pero no dice nada al respecto. Hablamos de que esta semana me incorporaré de nuevo al instituto para hacer los exámenes finales. Más tarde, Izan decide irse a su casa, no si antes asegurarse de que me he comido el desayuno entero.

-Iré a darme una ducha a casa, tengo también varias cosas que hacer del instituto, si quieres por la tarde noche me paso a verte-Sonríe y quiero comérmelo.

-Después vendrá Eli, en cuanto se vaya te avisaré.

-Está bien-Dice mientras llegamos a la puerta-Luego nos vemos.

Da un corto beso en mis labios y no quiero que se vaya. Acaba de salir y ya echo de menos su olor varonil, su manera de estar conmigo...

No puedo seguir pensando en el guapo de Izan ya que una angustia interrumpe mis pensamientos y me hace ir corriendo al baño, de nuevo.
Esta vez vomito el desayuno y al momento siento un bienestar recorrer mi cuerpo. Estaba comiendo demasiado entre anoche y esta mañana. Mi cuerpo no necesita tantas calorías.

La mañana se me pasa repasando alguna que otra asignatura y limpiando un poco la casa. Eli me dijo que vendría después de comer, en realidad, quería venir a comer, pero le dije que no porque se pone muy pesada con la comida. Ella es la que más sabe de mi problema y no me gustaría que viniese y me preparase la comida del siglo.

A las dos y media de la tarde me como una manzana y me tumbo en el sofá. Esto de estar sola es un aburrimiento. Mientras cambio los canales de la televisión, suena el timbre.

-Sara, soy Eli-Dice desde fuera.

Desde que pasó aquel accidente ahora cuando alguien toca específica quién es, básicamente porque si no no abro.

-¡Hey amiga! ¿Como estás? Tienes muchas cosas que contarme-Dice riendo y se por donde va.

-Eres una cotilla, pero sí, tengo que contarte...

-AHHH LO SABÍA-Chilla emocionada y le chisto para que los vecinos no nos llamen la atención-¿Que pasó con Izan?

-Durmió anoche aquí, se ha ido antes de comer.

El profe de historia.Where stories live. Discover now