siete

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Punto de vista Anahi
Agosto del 2011
Mar del Plata

Al día siguiente todos en la casa nos despertamos temprano para poder volver a Córdoba antes de que anocheciera, si teníamos la suerte de que el viaje durará unas catorce o quince horas y no más.

Así que el despertador sonó a las 5 am y con Paulo estábamos matadisimos. Lo peor era que no habíamos acomodado los bolsos con ropa y lo teníamos que hacer recién despiertos.

Cuando mi hermano salió de la casa para comprar algo que pudiéramos comer en el camino, Paulo se acercó hasta dónde estaba yo y me ayudó a acomodar algunas cosas. Tardamos un par de minutos en tener todo listo y mi hermano no llegaba así que nos recostamos un rato en el sillón.

No sé cuanto tiempo estuvimos esperando a mi hermano pero si sé que me quedé dormida en los brazos de Paulo y desperté cuando sentí un portazo.

- ¡No puedo creerlo! -gritó mi hermano.

Asustada abrí los ojos y me sentí aliviada cuando me di cuenta de que Paulo no estaba en el sillón sino que andaba en la cocina tomando agua.

- ¿Qué pasa? -pregunté adormilada mientras intentaba mirar a mi hermano todavía con la vista borrosa.

- Me camine como diez cuadras y no vi ni un puto almacén.

- ¿Y no pensaste en que podemos comprar lo que necesitamos en la terminal?

Mi hermano me miró enojado y con Paulo nos empezamos a reír. Todos agarramos nuestros bolsos y salimos de la casa, mi hermano era el mayor así que él era el encargado de la casa y por lo tanto tuvo que devolver la llave.

Después de haber devuelto las llaves de la casa nos dirigimos hasta la terminal de colectivos, dónde compramos algunas golosinas y galletas para comer en el viaje. Esperamos un rato largo hasta que por fin llegó el colectivo que nos llevaría a Córdoba y nos subimos. El problema era que éramos tres personas y los asientos eran de a dos, así que alguno de nosotros tenía que sentarse con un desconocido.

Paulo decidió sentarse solo para que yo pudiera estar con mi hermano y estaba contenta con eso hasta que vi que una rubia con buenos atributos se le sentó al lado. Intenté no pensar en eso durante el viaje pero se me hacía imposible, más si escuchaba como reían ambos en los asientos de atrás.

Cuando vi que mi hermano se había quedado dormido, me asomé por en medio de nuestros asientos y vi a Paulo mirando por la ventanilla mientras la rubia me miraba con una sonrisa en la cara. A lo que yo para hacerla enojar, estire mi brazo para que Paulo me viera y en cuanto lo hizo me sonrió. Tomó mi mano para besarla y volvió a sonreirme.

La rubia se levantó de su asiento indignada y se sentó en la otra fila, al lado de un señor mayor que estaba babeando mientras dormía. Paulo reía mientras negaba con la cabeza y yo me levanté de mi asiento para sentarme al lado de él.

- ¿Que pasó con tu hermano? -preguntó mientras entrelazaba nuestras manos y después las tapaba con una manta que tenía.

- ¿En serio lo preguntas?

- Tenés razón, es una pregunta muy tonta.

Estuvimos hablando un par de minutos hasta que me quedé dormida en los brazos de Paulo una vez más. No sé cuantas horas dormí pero si estaba segura de que muchas porque cuando me desperté y quise moverme, el cuello me dolía un montón.

Paulo seguía dormido y sonreí al verlo tan tranquilo. Me causaba un poco de risa el hecho de que se haya rapado el pelo, era raro porque me había acostumbrado a verlo siempre despeinado.

- Que suerte tenes, es muy lindo. -murmuró la rubia de hace un rato.

- La verdad que si, es hermoso. Me gane la lotería con él.

- Cuidalo mucho.

- Él sabe cuidarse solo, en especial de operadas como vos.

La rubia me miro haciéndose la ofendida y antes de que pudiera decirme algo, me di la vuelta dándole la espalda y me pusé los auriculares.
Escuchaba a Bon Jovi cantar "Always" mientras veía como Paulo dormía, me hacía sentir como una nena de catorce años que se estaba enamorando por primera vez.

Acaricie la mano que tenía entrelazada con la mía y me apoyé en su hombro, mirando por la ventanilla las vacas en los grandes campos que estaban a un lado de la ruta.

Todavía me quedaban muchas vacas por ver..


"Mi Gloria" Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora