Tu Recuerdo Sigue En Mi

¿¡QUEEEE!?

Chris y yo nos miramos por un segundo y estallamos en carcajadas al recordar toda la situacion, realmente había sido muy chistoso lo sucedido.

-de aquí nos vamos a los juegos olímpicos, Usain Bolt no nos llega ni a la suela de los zapatos después de esto- digo quitándome las lagrimas que me había provocado el ataque de risa.

-yo ya me habría ganado unas cuantas medallas, ya es constumbre esto en mi vida y la de los chicos, amamos a las cncowners, pero cuando se ponen así de locas es mejor huir, una vez unas cncowners se emociono tanto de verme que me agarro mi gorra favorita, jamás volví a ver a mi preciada gorra- dice haciendo un sollozo al recordar el momento.

-bueno, pero tu piensa que una chica va a ser feliz para toda la vida gracias a tu gorra-.

-eso si, haría lo que fuera por hacer felices a todas las cncowners y ojala pudiera darles las gracias a todas y cada una de ellas-.

-ellas saben que las amas, de eso estoy segura- digo al saber que Chris siempre estaba dándoles las gracias a sus fans a cada momento, eso me parecía un detallo muy bonito.

-¿y tu sabes que te amo?- me dice de la nada provocando que me sonroje.

-pues la verdad es que no lo sabia- digo bromeando.

-te amo, te amo, te amo, te amo- repetía Chris muchas veces mientras depositaba besos por toda mi cara.

-yo también te amo ojitos lindos- digo poniendo mis manos a ambos lados de su cara mientras le miraba a los ojos.

Le beso cariñosa pero intensamente a la vez mientras cierro los ojos para darle mas intimidad al momento, para sentir que solo existimos el y yo en el universo, que no hay nada mas, que no importa nada mas, solo el, yo y nuestro amor.

Nos separamos lentamente pero yo me niego a abrir los ojos, al sentir la mano de Chris en mi mejilla me obligo a abrirlos encontrándome con la enorme sonrisa de mi amado y un brillo especial en sus ojos.

-eres la chica mas perfecta que hay en el universo- me susurra mientras con su dedo pulgar acaricia mi mejilla.

yo solo puedo reaccionar lanzándome a sus brazos mientras lo beso intensamente, ultimamente las palabras no salían de mi boca porque lo que sentía hacia Christopher se estaba volviendo algo indescriptible, por lo que solo lo podía demostrar con hechos y este era uno de ellos, lo besaba con necesidad.

-Christopher, ya hemos llegado- nos dice Oscar desde el asiento del conductor, obligándonos a parar con nuestras demostraciones de amor demasiado empalagosas para algunas personas.

-no quiero separarme de ti- dice Chris apoyando su frente contra la mía mientras intentamos que nuestras respiraciones se normalicen.

-yo tampoco, pero tienes que ser un niño bueno y acostarte pronto, porque cierto aparato llamado televisión me a chivado que mañana tienes una entrevista en la radio bien tempranito- digo besando su frente.

-ni me acordaba, cuando estoy contigo me olvido del mundo-.

-pues ya estoy yo para recordártelo, asique venga señorito a casa como un niño bueno- digo riéndome.

-vente conmigo- dice poniendo ojillos tristes.

-ya sabes que no puedo, Isabel no sabría sobrevivir sin mi-.

-bueno esta bien, solo porque me da miedo que Isabel me maltrate-.

-chico sabio- digo soltando una carcajada mientras me bajo del coche.

Chris cierra la puerta para después bajar la ventanilla, por lo que yo junto mis labios con los suyos por ultima vez.

Cuando nos separamos me voy corriendo, no sin antes regalarle una sonrisa a Christopher. Abro la puerta de mi casa y entro, cierro tras de mi y apoyando mi espalda en ella me deslizo hasta el suelo suspirando, realmente hacia mucho que no sentía una felicidad tan inmensa.