Cosas De Padres - Namjin

Berrinche

--Deja de llorar-- casi le ordenó, pero no consiguió nada --, ya para Jiminnie.

--¡NO!

Yoongi comenzó a comprender a su appa. Suspiró, sin saber que la conversación que había tenido ya había pasado con Seokjin. Se le ocurrió algo.

--Vamos a jugar, ¿Sí? ¿Quieres jugar conmigo?-- intentó mirarle a la cara, pero el castaño se giró.

--¡No!

Al menos el llanto parecía disminuir, pues el menor se concentraba más en responderle a su hyung que en llorar.

--Vamos, podemos jugar a que haces un concierto, hace tiempo que no bailas.-- y con eso se refería a las últimas 24 horas.

--¡No quiero!

--¿Ni a la familia? ¿Dibujar? ¡Ya sé! ¡A los espías!

--¡Yo también juego!-- Tae se sumó a la platica, siendo vilmente ignorado por el par.

Jimin no respondió, pero en ocasiones sorbía por su nariz, llevándose los mocos.

--Anda, vamos a jugar a lo que tu quieras, pero deja de llorar que no me gusta jugar con niños mocosos.

Jimin soltó la primera risita en mucho rato, pero enseguida borro su sonrisa. Recordó el motivo de su berrinche --Es que extraño a appa Nam.-- le confesó a su hermano mayor, y este asintió.

--Ya sé, yo también, pero va a regresar.

El menor permaneció en silencio sobre el mayor, y luego de un rato volteó por sobre su hombro para verle --¿Ya viene?

Yoongi se encogió de hombros, pero Jimin ya estaba tan acostumbrado a ver ese gesto con el mayor que no le tomó importancia. Cuando notó que su hermanito dejó de llorar sonrió, podría demostrarle a su appa que lo había logrado y seguramente le premiaría. Se sentía tan cool.

En el sillón, Hoseok observaba a sus hermanos pensando en que lo que había hecho el mayor era genial, jamás había podido calmar un berrinche de Jimin, y  menos de esa magnitud.

Jungkook apareció en la sala corriendo, llegando al sillón para también subirse. Sin mirar a sus hermanos, buscó el control y lo tomó para comenzar a apretar los botones que según él encendían la televisión, pero simplemente estaba oprimiendo el 0. Gruñó por no poder lograrlo, y comenzó a apretar varios al azar. Jin regresó, había escuchado todo desde el baño pero le asombraba ver que Jiminnie ya estaba mucho más calmado. 

--Appa-- Tae se paró en el sofá, mirando al castaño con una sonrisa cuadrada --, ¿Podemos cenar pizza?

Seokjin lo pensó un momento, no mucho porque se sentía muy cansado y cocinar no era una opción para él --Sí Tae, pásame mi celular para llamar.

El apodado leoncito amplió aun más su sonrisa y tomó el móvil de su appa que estaba sobre el brazo del sillón, ya que Tae había jugado con él a distintos juegos que el adulto tenía descargados principalmente por lo niños que se lo pedían para entretenerse. El pequeño le llevó el celular, y Seokjin no tardó en encontrar el contacto en su agenda y llamar. Contestaron, y el castaño hizo el pedido que hacía habitualmente, ya aprendido de memoria. No esperaba que sonará el teléfono de casa.

Hoseok estaba más cerca, así que sin problemas se bajo del sillón para ir por él, pero Tae se adelantó --¡Yo contesto!

--¡No!-- Hobi quería responder, por lo que tomó de la parte inferior de la camisa de su hermano para frenarle, gritando que a él le tocaba.

--¡No es cierto Hobi hyung! ¡Eres un mentiroso!-- acusó estirando su manita para alcanzar el teléfono que no dejaba de sonar. El mayor dio un saltó trepándose en su hermanito a la espalda, aprovechando que realmente no se llevaban por mucha altura.