shut up!― jihope

𝚝𝚠𝚘

— yo no.. mas bien disculpe por lo que dije—el rubio suspiro— yo venia para lo primero.

— ¿cuidar a mi hermanito? deberas ser inteligente para hacerlo —jimin se sorprendio al escuchar en lo que consistiria su labor— es por eso que sere yo quien te dara la entrevista.

si todo esto no se habia puesto dificil por el hecho de que lo habia llamado satanas, ahora todo se arruinaba al saber que seria su entrevistador. bien, no podria estar mas avergonzado el rubio ahora mismo.

— espero que tu visita no sea por gusto..
— jimin, me llamo jimin

— bien jimin. cuando el sonido de la puerta suene entras y lo cierras por favor.

las rejas se abrieron dejando entrar al rubio al jardín de la mansión, y pudo percibir un rico aroma a su alrededor, este lugar parecía un verdadero paraíso. mientras avanzaba pudo divisar un juguete tirado al lado de la rosa. lo recogió y lo sacudió un poco dejando caer ese poco polvo.

así que con juguete en manos, se detuvo delante de la puerta y la toco.

— buenos dias.. —dijo jimin al ver como la puerta se abría y lo dejaba pasar.

— ven, pasa adelante —dijo el joven al frente de él, guiandolo a la sala.

— oye tu.. —mientras caminaban hacia el interior, jimin miraba con duda al chico que estaba adelante de él— ¿no eres muy joven para hacer esta entrevista?

— ¿y tu no eres muy joven para cuidar a un niño? —el castaño lo miro y sonrió con ironía— bueno sientate.

no podia decirle que cuando llego no sabia que esta entreviista seria para cuidar a un niño, ya que posiblemente seria botado a patadas. era un riesgo.

por lo que jimin opto en acomodarse en el sofá observando los bonitos cuadros que habian a su alrededor. las decoraciones que lo reodeaban parecian tan caras que tenia liedo de tocarlas.

— dime tu nombre completo, tu edad y experiencia con los niños. —dijo de repente el chico, haciendo que Jimin saliera de su pequeño trance y respondiera.

— mi nombre es park jimin, tengo 16 años y yo, tengo experiancia por cuidar a mis primos..¿ —titubeo lo ultimo. el mas alto lo observo con cierta extrañes.

— no creo que lo ultimo sea considerado experiencia - el chico de ojos grandes habló, mientras apuntaba algunas cosas en una agenda - y también si agregamos que esos primos no te caían bien.

— oye, aquellos niños solo dejaban todos sus juguetes y prendas tiradas por todas partes, esperando a que les de comer mientras que le hacia dormir a su hermana —bufó el chico mientras cruzaba los brazo— ella era la única educada.

jimin esperaba que el niño que iba a cuidar fuera también, viendo el alto rango social que tenía, no quería un engreído para cuidar.

alguna de sus peticiones debían de cumplirse.

—por cierto.. —siguio jimin, se acordo de devolverle algo que al parecer le pertenecia a la familia— encontré un carrito tirado por el jardin.

— ¿qué? —el castaño con confusion vio como el carrito de su hermano la sostenia el contrario— ah.. le dije a hobi que guardara sus juguetes, ¡hoseok!