20: Abriendo los ojos

Începe de la început
                                    

Era increíble como de un momento a otro las cosas cambiaban.

Llamé a mis padres informándoles lo ocurrido, ellos no tenían ni la menor idea quién era Henry, pero luego de explicarles entendieron y hasta quisieron venir, me negué alegando que regresaría luego con Amber y los hermanos Woods.

—¿Quieres algo, un café? —preguntó Kem sobando mi espalda. Le fruncí el ceño cuando dijo «café», no quería ponerme más nerviosa de lo que ya estaba y el café hacía eso, alteraba mis nervios.

—No, gracias —respondí mirando más allá. La sala de espera para emergencias estaba llena de gente a estas horas de la noche, no había lugar para sentarnos por lo que me recargué en la pared necesitando un apoyo.

Kylan se acercó a mí dejando a Ada a un lado. El cabello de ella estaba desordenado y su maquillaje algo corrido, como si hubiera descontrolado un poco. Yo no llevaba casi mucho en la cara por lo que imaginé tener mejor aspecto que ella. Su ropa ajustada y tacones altos llamaba la atención en el lugar, las personas la miraban de reojo. Su vestido corto tapaba apenas su trasero y sus tacones altos resonaban cada vez que ella daba un paso.

La miré interrogativamente cuando se acercó a nosotros tres mirándonos con aburrimiento.

—¿Amber está adentro, verdad? —preguntó ella cruzándose de brazos, haciendo que su escote se expusiera aún más en aquel vestido.

La pregunta no estaba dirigida a ninguno en particular, dada la mirada aburrida que nos lanzaba a los tres.

—Sí, está acompañando a Henry —respondí con obviedad sin mirarla. Lo había dicho desde que estábamos en el auto de Kem camino aquí, pero ella parecía no entender. Mis ojos estaban pendientes en la puerta que daba a Emergencias —en la que sólo entraban los pacientes y un familiar—, esperando a que mi amiga saliera para que nos diera las noticias sobre el estado de Henry.

Ada rodó los ojos.

—¿Cuándo nos vamos a casa? —preguntó llevándose la mano al cabello y cerrando los ojos. De un momento bostezó sin taparse la boca.

La miré con dureza.

—Puedes esperar en el auto —dije de manera cortante—. Y si no quieres estar aquí, pues consigue un taxi, nosotros no nos iremos de aquí hasta que Henry salga.

Kylan asintió, de acuerdo conmigo.

—Prefiero esperar en el auto ¿Tus llaves, Kem? —preguntó ella haciendo caso a mi sutil manera de alejarla. Extendió la mano en dirección a Kem, quien sacó las llaves de su bolsillo con una mirada molesta hacia Kylan. Luego volvió hacia Ada, quien aún esperaba por las llaves con las cejas alzadas y mirando a Kem—. ¿Qué, no quieres darme las llaves? —Rio divertida—. No voy a llevarme tu auto si es lo que piensas.

Kem rodó los ojos. Le lanzó una mirada a Kylan y luego miró a Ada, haciendo un gesto con su mano para que lo siguiera.

—Ya vuelvo —dijo antes de voltearse y caminar en dirección a la salida sin esperar a Ada. Ella caminó rápidamente detrás de él hasta alcanzarlo.

Avancé un par de pasos para ir con ellos, pero Kylan me detuvo.

—Amber acaba de salir. —Señaló él con su dedo hacia las puertas que daban a la sala de Emergencias. Volteé y me encontré con los ojos marrones de mi mejor amiga, estaban llorosos pero ella sonreía con alegría. Llegó hasta nosotros y nos abrazó con fuerza a Kylan y a mí.

—¡Henry está bien! —exclamó con alivio. Se separó un poco, sonriéndonos—. Bueno, no técnicamente porque se rompió la pierna izquierda y el doctor le ha colocado yeso, pero la otra pierna está bien. Tiene algunos rasguños y la cabeza vendada, pero está fuera de peligro. Menos mal el auto sólo lo rozó por el lado de la pierna y luego se estrelló en la valla. Henry está despierto y listo para irse, pero tiene que esperar a su papá que está en camino. —Hizo una mueca—. ¿Quieren pasar a verlo?

El chico de arriba #1 | EN FÍSICOUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum