TO. My soul 🍃 Jongin×Kyungsoo

quatre

—¿Por qué no me sorprende? —musitó Kyungsoo al llegar a la casa de Tao y ver como el lugar estallaba, literalmente, de personas.

Tao, quien había estado pendiente de la llegada de Kyungsoo y Baekhyun, había corrido a hacerlos entrar tan pronto vio que ambos se encontraban en la esquina de su vecindario, y que, tan pronto vieron el tumulto de personas habían dado media vuelta, dispuestos a marcharse.

Mientras Baekhyun se encontraba preocupado por el suéter que había elegido como outfit aquella noche, Kyungsoo se encontraba preocupado por ver a Jongin de la mano de Naeun.

Se la pasó toda la noche bebiendo refresco, pero tan pronto vio como lo que se suponía era la sala de estar se llenaba de personas frotando sus cuerpos entre sí, y el ambiente comenzaba a tener aquel olor a sudor y sexo, supo que era momento de ir por algo más fuerte.

Se sorprendió un poco al ver que Baekhyun también se dirigía a la cocina por una cerveza.

—Creo que, ver a los chicos coqueteando con chicas nos afecta un poco, ¿verdad? —dijo Kyungsoo, queriendo sonar un poco divertido por la situación... queriendo mentirse a sí mismo de que la situación era cómica.

Tomaron un par de cervezas, para dirigirse a un sofá en la sala de estar, comenzaron a charlar. Cualquier cosa que pudiera mantener sus mentes ocupadas, y no encontrarse viendo los sanos bailes altamente grotescos para ambos. Se encontraban hablando de aquel webtoon que ambos seguían -porque sí, Siren's Lament era un buen comic, aunque ellos fueran hombres, nada les impedía leer comics románticos-, hasta que una pareja, para nada discreta, se habían situado en la otra mitad del sillón, y habían comenzado a manosear sus cuerpos, sin dejar nada a la imaginación, y haciendo notorio las ganas de sexo que ambos tenían.

—Iré al patio, quiero tomar un poco de aire —le dijo Kyungsoo a Baekhyun, el contrario asintió con la cabeza, Kyungsoo le dedicó una sonrisa, dio media vuelta y comenzó a hacerse campo entre la multitud.

Tomaba su cerveza con pequeños sorbos. De verdad no le gusta el sabor amargo de la cerveza, pero luego de ver que Jongdae —quien estaba triste porque su novio no había podido ir por estar enfermo—, había tomado tanto que ahora reía por cualquier estupidez que le decían, se dijo a sí mismo que él también quería reír, y olvidar que estaba, literalmente al lado de Jongin y Naeun, bueno, no, ¡está! Al lado de la pareja, y cuando dice que está a su lado, significa que debe escuchar los besos. Y eso es un sonido que Kyungsoo no podrá olvidar.

¡Asco, asco, asco! Es todo lo que Kyungsoo siente.

Aunque... no sería asqueroso si fuese él quien besara a Jongin, ¿verdad?

No, Kyungsoo. Ese sonido es asqueroso. Sólo quédate al lado de Baekhyun.

—¿Dónde se metió? —susurró para sí mismo.

Había estado en el patio trasero por quién sabe cuánto tiempo.

—¿Has visto a Chanyeol? —Kyungsoo giró sorprendido al sentir el aliento de Jongin soplando en su oído— ¿Lo has visto? —repitió.

—No —Jongin se sorprendió de la cortante respuesta de Kyungsoo.

— ¿Buscas a alguien?

—A Baekhyun —Jongin asintió y resopló. De verdad que le caía bien Baekhyun, pero no podía evitar resoplar con enojo cada vez que Kyungsoo lo mencionaba.

—Ya veo. Bueno... —Jongin miró hacia todos lados, para luego volver a clavar su mirada en los grandes ojos de Kyungsoo— Yo, iré... iré con Naeun.