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e i g h t

— Abre tus piernas — Luke susurro con desespero y mordí mi labio, se veía extremadamente irresistible así excitado.

Su desesperación le hacía ver el triple de sensual.

Abrí mis piernas y agarre sus manos.

— Harás lo que te ordene ¿cierto princesa? — este acerco su boca a mi oído y mordió de este, me estremecí un poco y asentí.

— Si...

Mi voz temblaba, quería ya tenerlo adentro, sentía como me mojaba más y más al sentirlo y tenerlo así de cerca.

Pero nada se comparaba a Calum. Lo sé, debería superarlo pero es imposible.

De repente este soltó mis manos y colocó las suyas en mis caderas y me llevo hacia la pared.

— No he probado esto contigo — susurró y sin previo aviso entro muy fuerte.

Solté un pequeño gritó y este me callo en un beso, este introdujo su lengua mientras sus embestidas aumentaban, los dos jadeábamos mientras nos mirábamos.

— Dime ahora ¿quién es Calum? — este susurro mientras penetraba fuertemente y rápido, no podía hablar, admito que lo estaba disfrutando demasiado.

— Más rápido — apreté mis uñas en su espalda y cerré mis ojos con fuerza. — Por favor — apreté mis labios y mis piernas empezaron a temblar.

— Recuerdas que no puedes correrte hasta que yo lo ord...

Luke no termino de hablar, una piedra había sido lanzada a mi ventana.

Nos separamos y el corrió al baño con su ropa y yo me coloqué el primer vestido que encontré, no llevaba nada abajo.

Me asomé a la ventana y era Sam.

— Rapunzel Rapunzel, deja caer tu cabellera — este exclamó y rodé mis ojos.

— Vete al infierno. Estoy ocupada — exclamé y este se cruzó de brazos.

— ¿Ocupada en que? Además, me hablas así luego de tenerme en tu cam— ¡Cierra la boca hijo de! — le interrumpí y le lance una botella de agua vacía por la ventana, este soltó una carcajada y rodé mis ojos de nuevo.

— Déjame entrar — este exclamó y negué.

— Entiende que no. Adiós — cerré la ventana fuerte.

Espero que se rinda y se vaya a casa.

En eso Luke salió del baño con ropa, sonreí y corrí hacia el.

— Solo ignorémoslo — susurre y bese sus labios con mucha desesperación, sus manos bajaron a mi entrepierna y fueron subiendo el vestido lentamente.

— Esa es la Valerie que me encanta, te quiero toda para mí — este susurro mordiendo su labio y en eso sentí como alguien golpeaba fuerte la ventana, al voltearme solté un grito.

— ¡Sam! — exclamé separándome de Luke enseguida.

— ¡Dime que te hizo este imbécil! — este abrió la ventana con fuerza y entro a la habitación.

— Cuida tus palabras bastardo, soy mayor que tu y puedo hacerte daño — Luke exclamó acercándose a Sam.

— ¡Luke no! — ahora grite yo, no me harían caso, eso lo sabía.

Sam se lanzó a el y empezó a darle golpes en las mejillas, Luke no se dejaba, este con sus puños golpeaba la nariz de Sam y su otra mano rodeaba fuerte su cuello.

— Basta — grite y me acerqué a ellos, temía que me hicieran daño pero esto debía parar.

— No intervengas Valerie — Sam exclamó y se llevó un golpe de Luke que hizo que cayera contra mi escritorio.

Ya no respondía.

— Lo siento — Luke murmuró y salió por la puerta enojado, luego de un minuto escuche la puerta principal cerrarse fuertemente.

Me sobresalté y en ese mismo instante me acerque a Sam.

— No estás bien — susurre y este asintió.

— ¿Que hacías con ese hombre? ¡El profesor de Geometría! — este exclamó y suspire.

— Olvida eso y por favor que no se te escape de los labios, eso es el pasado ¿si? — susurre y sentí mis ojos poco a poco cristalizarse.

— Bien

Este susurro y logro levantarse del suelo.

— Juré que había sido el primero en tenerte — este me miró y negué.

— Sabes que no — le guiñe el ojo y este negó varias veces.

— Nos vemos mañana — este salió por la puerta y asentí.

Al escuchar la puerta principal cerrarse grite fuerte y me lancé a la cama.

— Estoy completamente jodida. Si a Sam se le escapa no sé que será de mi, tendré que planear algo...