Sombras

Reflejos Inesperados

-¿Qué está pasando?¿Por qué me cambié de ropa de repente?- Le pregunté a Nicole un poco exaltado.

-Esa es tu verdadera forma Dylan, te lo explicare todo, tu eres un viajante y uno de los más poderosos que existen- Me respondió Nicole con una mirada loca y de excitación que no lograba entender realmente.

No entendía porque le alegraba tanto el hecho de que yo fuera lo que ella llamaba un viajante, no entendía eso en que me ayudaba para entender porque me sentía tan perdido en mi mundo.

-Sé que debes estar muy confundido, yo entiendo Dylan yo me sentí así cuando mi mamá me dijo lo que era realmente. Te voy a contar lo que se pero primero te voy a explicar donde estamos. Nuestra realidad se divide en tres planos, el plano de realidad que tu conoces es el Orbis Nostri, aquí es donde la vida transcurre para los humanos comunes de forma ordinaria nacen y mueren. El plano donde nosotros nos encontramos es Antanaklasi, también conocido como El Mundo de los Espejos y la Vida, aquí es donde la vida existe desde el principio del tiempo y donde la diosa Zöi crea la conciencia y el alma. Por último está el plano que tu ya conoces el Lakko Tenebris en este plano están los mortem persona que han perdido la vida y la conciencia. En este plano donde el dios Thánatous cuida de estos para que no se pierdan en la oscuridad.-

-Sigo sin entender ¿qué tengo que ver yo con todo esto?- Le respondí a Nicole con algo de irritación.

-A eso iba. Existen diferentes formas de vida, los humanos o por su nombre real los maanav a quienes nosotros los viajantes tenemos que proteger de las skia y de los impatiens. Los viajantes somos una especie totalmente diferente a los maanav, nosotros tenemos habilidades, dependiendo del tipo de viajante. Nuestra especie se divide en dos los tenebrus o viajantes de las sombras y los antanaklos o viajantes de los espejos. Por como vistes y por lo que me contaste tu eres un tenebrus.-

-Espera eso significa que ¿cuando vi a mi papá si fue una experiencia de verdad?-

-Si Dylan y con todo lo que hiciste en el puente eres uno de los viajantes más poderosos que he visto, el único problema es que es muy difícil que un tenebrus entre en Antanaklasi a menos de que posea una herencia directa.-

-¿A qué te refieres con eso?-

-Dylan me refiero a que o tu mamá o tu papá eran antanaklos por eso tu puedes entrar en ambos mundos. El único problema es que ahora que sabes lo que eres va a haber muchas dificultades para ti. Tienes que empezar a entrenar ya, aunque dado que tus habilidades ya han despertado va a ser mucho más fácil. Ven conmigo te mostraré donde vas a entrenar.-

Nicole me llevó a la cocina, metió la mano en un cajón y sacó un cuchillo, lo introdujo en una de las ranuras de la barra. Hubo un temblor y el piso empezó a descender, estuvimos ahí parados por lo que me parecieron cinco minutos cuando por fin vi luz. Cuando mis ojos se adaptaron a la luz vi que estábamos en la mitad de un campo de fútbol pero que cada 2 metros había una especie de arma diferente. A unos pasos de mí había unas tres espadas de un solo filo, a los dos metros de esto había unos muñecos algo destrozados por la práctica de alguien, probablemente Nicole.

-Wow- Dije en voz alta esperando que no sonara tan tonto como parecía.

-Si, es impresionante- dijo una voz detrás de nosotros.

Me voltee, y me encontré con un joven de unos 16 años. Media 1.70 metros era rubio y tenía unos ojos grises muy impresionantes. Vestía de negro y tenía una lanza en su espalda, su mirada se clavó en mis ojos como si intentara decidir si era amigo o enemigo.

-Daniel no pensé que fueras a estar aquí pensé que estabas en el Lakko Tenebris. Es bueno volver a verte.- Dijo Nicole y fue a abrazar a Daniel.

Yo me quede atrás esperando, me parecía raro que Nicole conociera a esa persona pues yo conocía a todos sus amigos y nunca lo había visto antes.

Perdón se me olvidaba Dylan, él es una amigo y uno de los viajantes con más experiencia Daniel Fotisco, Dan, él es Dylan mi novio y tu nuevo aprendiz.-

-Es un placer Dylan- Respondió Daniel con un tono de sarcasmo en su voz.

-Lo mismo digo- dije yo algo exaltado. -Amor ¿tu no me vas a entrenar?- pregunté con la esperanza que me dijera que sí.

-No puedo Dylan, o por lo menos no puedo enseñarte el manejo de las sombras porque soy una antanaklos Dan por otro lado es un tenebrus el si te puede enseñar. Amor quedate tranquilo, yo te ayudare con el combate cuerpo a cuerpo.-

-No te traumes deila vas a poder hacer muchas cosas bajo mi entrenamiento.- dijo Daniel con aire de superioridad.

-Bien ¿por dónde empezamos?- le dije a Daniel con una mirada asesina.

-Estaré en el campo de práctica con espada- dijo Nicole y se fue.