Tú aroma [Astro Omegaverse]

2. La boda.

2.

Y la primavera llegó, esa época en que las flores despiertan y hacen picar las narices de los híbridos, en que tus emociones se sienten por mayor o mucha tristeza, felicidad y también inseguridad por que no hace frío como en el invierno, ni calor como el verano, es un temible punto miedo.

Inseguridad; Deriva de hoy es la boda, sinónimo de Min Hyuk no lo quiere perder.

- ¿Entonces me dices que el no está seguro sobre casarse con mi fresita?- Analizó molesto Jinwoo.

- ¡Hey! En calma ratita, ya te conté la historia completa... Y por lo que se sabe tu fresita no es pasto limpio.- Lo abrazo por el costado acercándose a su oído y por alguna razón cuando el gato hacia esto siempre hacia temblar a Jinwoo que no estaba seguro si era miedo... o algo más. -Me han dicho que tu y el tienen una relación muy cercana...- Lo miro a los ojos colocándose turnio, Jinwoo le devolvió la mirada riéndose... nervioso.

-Ehh.

-Dime la verdad, al final yo te e contado el chisme de Bin y Min Hyuk.

-Es verdad que tuvimos algo pero sólo eso...

-Oh~ ¿Entonces te comiste a ese pancito de Dios?

Jinwoo asintió divertido y ambos se fueron riéndose por el pasillo.
Al final al cabo se habían llevado demasiado bien.

🍃

Bin miraba su ropa nervioso, es difícil tener que casarse con alguien que apenas conoces hace 3 meses. Tampoco iba a mentirse a si mismo, la verdad es que el perrito olor a fresas lo había enamorado por completo, desde todas sus cualidades que eran demasiadas, hasta sus defectos que eran tiernos, sentía que estaba echo para el, pero... por que siempre tiene que haber un pero y ese pero era MinHyuk.

Bin llevo su mirada a un malhumorado chico, una de comprensión y lástima, quien no había dicho nada también lo miró...
Y fue así por casi 3 minutos.

- ¿Por que estás tan feliz?- Bin se sentó en la cama y con una sonrisa típica de el le indico que se sentará a su lado.

- Me voy a casar...

- Mierda Bin lo sé pero... ¿Acaso no me estás viendo? ¿O su estúpido olor te dejo ciego igual?- Bin acarició su mejilla con ternura.

-Si te veo...

-No me toques...- Alejo su mano. -No me estás viendo, me estas olvidando.- Entrelazaron sus dedos inconscientemente.

-Te veo pero también tengo que olvidarte...- Beso su frente y las lágrimas del menor no tardaron en llegar.

- No tienes que hacerlo puedes estar conmigo a escondidas, podemos seguir amándonos en secreto.- Bin lo envolvió en sus brazos, esos que MinHyuk amaba.

-Es peligroso y Dong Min no merece esto.- El adulterio se pagaba con la muerte.

-El te gusta, veo tu cara de estúpido cuando estás con el, cada mierda que él haga la aplaudes como si fuera la mayor maravilla del mundo... Conmigo no eras así...

- Yo siempre e estado orgulloso de tí pero ustedes son distintos.

- Hablas como si lo conocieras...

-Tu eres de los que necesita compañía y el de los que prefiere los mimos a distancia y hacerlo solo. Nosotros aprendimos a combatir juntos pero tú siempre fuiste mejor... Siempre e estado orgulloso de ti por algo eres Park Min Hyuk Archiduque de Gorod Kokesh...- El menor abrió enorme sus ojos llenos de lágrimas.

«Título de Парк Мин Хюк Эрцгерцог города кошки»

- Pero...

-Eso te alejara un poco de mí se que no es la manera pero me tienes que olvidar...

-Ese título es muy importante...

-Es casi tan importante como ser el rey... Claro aun no sé a dicho nada pero al casarme tengo que poner nuevos cargos... Tienes un mes hasta que de el anuncio en la luna blanca.

- ¿Lo darás en luna blanca?

- Busca a alguien quién te haga compañía desde ahora.- Le seco sus lágrimas y lo abrazó con más fuerzas. -Confio en ti.-

Y antes de emprender caminos distintos se besaron y fue el beso más triste que Min Hyuk daría en su vida.

💍

Caminaba con sus piernas temblando hacia al altar en una gran iglesia con arquitectura greco-romana y Bin se derritió mientras esperaba que llegara al son de la música tocada por la orquesta. El omega llevaba un traje blanco las mangas de encaje y cuello alto con el mismo diseño lo hacían ver como un ángel, su cabello negro peinado en rulos hacia su frente con un gorro encima llevando un lindo velo que ocultaban sus nervios. Al llegar Bin lo miró como si ya supiera por todo lo que pasaba por la mente del fresita y un agradable aroma de menta con frutilla inundo la iglesia haciendo suspirar a todos.
Bin quien llevaba un traje negro con una camisa blanca removió su velo mirándolo con cuidado, el mayor solo mantenía la mirada gacha mientras jugaba con su ramo. Y como le habían enseñado, sin mirar a los ojos.

Sin darse cuenta ya estaba terminando.

- Su alteza Moon ¿Desea casarse con el príncipe Dong Min para acompañarle, cuidarlo y protegerlo en la salud y en la enfermedad?- Después del que el Papa hablara Dong Min se atrevió a dirigir su mirada a Bin quien sólo le sonrió tranquilizado sus temblorosas manos tomándola por encima de aquel ramo de flores. En su casa los alfa siempre habían sido malo con los omega y su corazón dió un vuelco al sentir esa amabilidad.

-Si, Acepto.- Dong Min le devolvió la sonrisa.

- Príncipe Lee Dong Min ¿Desea casarse con el príncipe Moon Bin para acompañarle, servirle y obedecerle en la salud y en la enfermedad?- Demoró en decirlo.

-Si, acepto.- Pero no tenía más opciones.

-Les declaró unidos es sagrado matrimonio.- Se besaron y se miraron.

Bin llevo sus dientes a su cuello mordiéndole con cuidado. De todas formas Dong Min se quejó un poco y luego más al sentir que su cuello quemaba. Bin lo abrazó con muchas fuerzas y la boda termino.

El corazón de Min Hyuk no podía estar más roto y sin sentirlo su cuerpo siguió a la masa de personas que iban detras de lo recién casados.

-Larga vida al rey Moon Bin, que prospere en la tierra y abundancia en menta gatuna.- Gritaron los felinos ciudadanos hasta que la pareja desapareció en su carruaje.

Min Hyuk tenía la mirada puesta en su caballo cuando una suave mano tocó sus dedos.

-Aqui estoy...

Miró al chico de cabello blanco y lo arrastró sin que nadie lo notará a un lugar más escondido.

-Eres bastante obediente...- Min Hyuk sonríe satisfecho.

- ¿Tengo opción?

-No SanHa.

-¿Que necesita?- El beta le había pedido que fuera a verlo.

Se quedó en silencio unos segundos.

-Olvidar un amor imposible.

-Ningún amor es imposible... Si no funcionó, no era amor de verdad.

- ¿Tú sabes que es amor?

-Algo.

- ¿Me podrías enseñar?