Prólogo

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Moon Bin por el destino fue escogido como príncipe de el pequeño reinado de su felina especie, aunque por más que sea el gran alfa del reinos tenía una personalidad tan dulce como un mango tropical, ese era Bin contradictorio como si mismo... Y eso era algo que tenía profundamente enamorado de Min Hyuk, un aristócrata beta, desde que nacieron estaban juntos y a medida que crecía más se enamoraba. Pero era beta, por más que lo amara el destino de Moon Bin estaba escrito y cuando esté cumpliera 18 años dejaría de ser suyo... Y ya los había cumplido, Min Hyuk solo esperaba la sentencia de muerte a su amor.

Se acercó a sus labios mientras aquel alfa lo tomaba con cariño entre sus brazos, era un poco más alto y olía a ese herbáceo llamado menta, su colita se movió de felicidad al sentirse uno con Bin, abrió sus ojos para ver la felina mirada del mayor puesta sobre si mismo. Este le sonrió y su sonrisa era la más hermosa que Min Hyuk había visto.

—Bin prométeme que a pesar de todo siempre me amarás.— MinHyuk le coloco aquella mirada de cachorro bajando sus orejitas.

— Te prometo que no importa lo que mis padres digan yo siempre te elegiré a ti.— Dijo con ese sabor a mango en su frase.

Se abrió la puerta haciendo que MyungJun se tapara la nariz. El olor molestaba al sirviente beta, quienes no emitían olor alguno como los Omega y Alfas.
A MinHyuk también le debería molestar.

— Su alteza llegaron los invitados del reino canino.— Myung Jun le dió una mirada triste a MinHyuk quien apretó sus puños alejándose de Bin.

Bin dió dos pasos dándose valor y trago saliva tomando coraje.

—Bin... No lo olvides.

Le dió una mirada tranquilizadora que para nada calmo sus celos.
Por que ni el tallaba confianza en sus ojos, por que el tenía un presentimiento.

Y no era de buen pronóstico para Min Hyuk.

Tú aroma [Astro Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora