X. El decorado

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Coro:

El lugar en donde todo ocurre, donde los protagonistas viven, se desarrollan y tratan de alcanzar su meta. En donde son ellos los que toman las riendas de su destino.

____ Sugawara

La obra está a una semana de ser presentada, por lo que estábamos en semana de finales y períodos libres. Muchos de mis compañeros casi tienen un colapso nervioso, Momo por ejemplo en la clase preguntó si estaba excusada por el resto de su vida.

Gracias a eso el profesor nos dió un bono por puntos extras, sobre el significado de los kanjis en nuestro nombre.

Yamaguchi, sigue igual que siempre, eso sí se le ve más seguro de sí mismo. Momo ha logrado balancear su vida amorosa con sus amigos y ahora come (la mayor parte de las veces) con nosotros. Tsukishima por su lado seguía siendo el mismo malvado de siempre, pero se le soportaba, al menos yo lo hacía.

En esos momentos, pensaba que tal vez Tsukishima, había cambiado porque ahora nos dejaban solos sin miedo a que nos ahorcaramos.

—Oe— Llamó Tsukishima sin verme, a lo que yo volteé mi cabeza.— ¿Ya te aprendiste tu papel?

Él no acostumbraba a preguntar aspectos de la obra fuera del gimnasio, lo cual me pareció un poco raro.

—Si,—dije ocultando mi sorpresa. — ¿Y tú?

Se limitó a asentir y nos sumimos en un silencio incómodo. Bueno más que incómodo era esperar a que llegara alguno de nuestros amigos para hacer algún tema de conversación.

—Hey al final ¿Te enteraste quién te mandó el..?— le pregunté pero fui interrumpida por él mismo.

—No.

Su respuesta a secas me quitó las ganas de seguir haciendo preguntas.

Me limité a ver a otro lado, sin saber que hacer, las clases estaban a punto de comenzar.

—¿Y tú?—. Su pregunta me tomó desprevenida.

—¿Eh?— fue lo primero que pude articular, bien hecho yo.

—¿Qué si habías encontrado al final habías encontrado quién te dió el regalo?— Ya había entendido la pregunta pero por retrasada mental no había respondido como Dios manda.

—Tampoco— le respondí viendo de nuevo el suelo.

—¿Por qué no me ves a los ojos?— cuestionó de nuevo.

—Creo que todavía no me siento en confianza— le respondí con media sonrisa.

—Vamos, no es que te vaya a morder— dijo socarrón.

Volteé mi vista con desdén y le sonreí retadoramente, el respondí irguiéndose cuál gallo, sonriendo con autosuficiencia mientras no despegaba sus irises miel de los míos.

...

Tsukishima Kei

Para ese punto de mi vida, podía decir que en cualquier momento todo saldría mal, es decir, que todo estaba saliendo sorprendentemente bien. Incluso en casa todo estaba bien; tal vez halla dejado de odiar a Akiteru, no completamente pero algo es algo. Yamaguchi se había reportado enfermo así que se quedó en casa, dejándome con ____ y Momo.

¡No seré tu Romeo!¡Tampoco seré tu Julieta!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora