Capítulo 14

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—Marinette —la voz de mi madre se oía tan lejana —despierta ¡despierta!

—¡¿Eh?! —me senté tan rápido que le pegue a mi madre en la nariz —auch, perdón mamá ¿qué pasa?

—Ah no me dolió nada, apúrate y vístete que tenemos que ir a ver el vestido que usaras en la boda, corre, te espero en el auto —mi madre estaba sonriente, salió de mi cuarto y oí como arrancaba el coche

A pesar de ser famosos, a mis padres les gustaba la idea de llevar una vida más o menos normal, no choferes ni cocineras, ni mucamas.

Me cambié lo más rápido que pude.

—Marinette, deberías de intentar atrasar esto —Tikki estaba en mi bolsa la cual me colgué en el hombro

—Tengo que confiar en que algo se nos ocurrirá a Lina y a mi

Bajé las escaleras y cuando estaba a punto de salir de la casa, mi teléfono sonó.

—¿Chat?

—Hola Princesa, quería ver si podía ir a tu casa un rato, estoy aburrido y te extraño —se oía como un niño haciendo un puchero

Me reí un poco con su "reclamo".

—Chat me encantaría que vinieras, pero voy a salir un rato —de verdad quería estar con el, pero no podía

—Te veo en tu casa a las 7 y no voy a discutir —ahora se oía como un general en un ejército

—Si señor —dije haciendo tono de un soldado

—Bien, te amo, hasta las 7 —colgó y no me dejó decirle que yo también lo amaba

Salí de la casa más feliz que nunca, y cuando me subí al auto mi madre me sonrió de vuelta, pobre de ella, pensaba que yo sonreía por mi boda con Nathaniel.

Fuimos a la tienda y vimos el vestido; debo admitirlo era muy bonito, totalmente mi estilo, así que no hice pucheros cuando me lo probé.

Y todo iba bien hasta que vi a Adrian cruzar la puerta de entrada de la tienda.

Ya que la tienda estaba dividida en 2 tenía sentido que estuviera ahí, bueno casi.

Una mitad era una joyería extravagante y la otra era de vestidos de novia.

Con Adrian no iba ninguna de las dos, porque que yo supiera él no iba a casarse ni nada, y en segunda no tenía novia, así que ¿porqué estaba aquí?

Lo ignoré hasta que él me vio.

Tragó saliva y me miró más fríamente que nunca. Yo sentí que me echaban un cubo de agua fría encima.

No sabía porque pero me sentía muy mal por estar ahí, vestida como una novia enfrente de él.

Adrian se volteó y siguió con lo suyo en la joyería.

Cuando mi madre se aseguró de que no hubiera errores ni una joya de menos en el vestido, nos pudimos ir.

Aunque antes de eso, mi madre tenía que chocar con Adrian, que a propósito había comprado un collar, que por lo que había alcanzado a escuchar no era muy barato.

—Lo siento, no te vi —mi madre se disculpaba de verdad

—No se preocupe señora —Adrian era tan cálido con mi madre

Salimos de la tienda y me voltee a ver a Adrian, que me miraba con ojos de hielo.

Tragué saliva, ahora si me estaba dando miedo.

Cuando voltee a ver a mi madre, ya no estaba, pero seguía el auto ahí, vacío.

Miré a ambos lados, no estaba.

Luego vi a un señor con su hija, y de un momento al otro, ya no estaba tampoco.

—¿Qué es esto? —nunca había visto nada parecido, excepto con Burbujeo, aunque con él los adultos había salido volando al cielo en burbujas indestructibles

Luego vi a una chica que chasqueaba los dedos, riendo, y con cada chasquido desaparecía un adulto.

—Tengo que transformarme ¿pero dónde? —miré por todos lados, luego encontré el lugar perfecto, una cabina de teléfono vieja

Corrí y cuando entré, me trasformé.

—¡Tikki puntos fuera!

Salí de la cabina como mi otro yo y busqué a la chica.

Cuando la encontré, vi que estaba lidiando con Chat. Corrí hasta ellos e intervine en el momento justo.

La chica le arrebató su vara de ataque a Chat, así que con mi yoyo se la quité.

—Parece que esto te pertenece Chat —le lancé su vara de ataque de vuelta a Chat

—Gracias My Lady —Chat la atrapó en el aire y volteó a ver a la chica —ahora sí estamos parejos

—¿Enserio? Que ingenuo gatito —la chica chasqueó sus dedos y desapareció

—¿Dónde está? —volteé a ver a todos lados, pero no la veía

—Aquí —la chica apareció en frente de mi, pero antes de que pudiera atacarla desapareció —aquí —ahora estaba detrás de mí

Me empujó y caí encima de Chat.

—Lo... lo siento —dije tratando de excusarme, pero lo único que logré fue sonrojarme

—Awww nuestra pequeña mariquita está enamorada del gatito, que tierno —la chica hablaba con sorna, pero tenía razón en algo, yo estaba enamorada de Chat

Me levanté del suelo y Chat también.

*Unos minutos después*

La chica era muy rápida, desaparecía y aparecía en los momentos más inesperados, Chat ya había usado su Cataclismo, y le quedaban 2 minutos antes de volver a la normalidad.

—Deberías irte Chat, yo puedo con ella —no era tan cierto, pero él no debería arriesgar su identidad secreta

Chat volteó a verme.

Pero la chica apareció detrás de él, lo tomó de la muñeca.

—Si quieres que tu gatito se salve de revelar su identidad, debes atraparme primero, estaré donde todo se ve mejor —la chica se rió y con un chasquido de sus dedos desapareció

—Oh no —voltee a ver a todos lados —¿Dónde todo se ve mejor?

Se me ocurrió una idea.

Tome mi yoyo y busqué en internet los mejores puntos de París para ver la ciudad. En el primer puesto estaba la torre Effiel.

Fui lo más rápido que pude; pero cuando llegue la chica estaba hasta la cima con Chat atado de manos y piernas a su lado.

Vi su anillo, le quedaban segundos.

—Date prisa Ladybug, por favor —decía Chat espantado

Fui hasta donde estaban, el punto más alto de la torre Effiel, pero por más que intentaba alcanzar a Chat, no podía.

Su anillo parpadeó, y volvió a la normalidad.

Entonces lo vi.

Me enamoré de un engreídoWhere stories live. Discover now