Capítulo 18 (Editado)

2.3K 125 3
                                    

POV Kira

En la noche, cuando subí a mi habitación en la mansión, estaba agotada mentalmente. Ver a Nick, después de lo que pasó, era tan hermoso como doloroso. Se lo notaba arrepentido por lo que hizo y confundido por la razón de mi vuelta a la vida.
Al llegar a la mansión, Dam se preocupó por la cara que traía. Estuvo toda la tarde preguntando que había pasado. No quería decirle que había visto a Nick, porque se enojaría y quería evitar un mal momento entre nosotros.
Después de algunas horas, desistió y me invitó a ir al Grill. Cuándo estuvimos tan borrachos como para no pensar en nuestras frustraciones amorosas, volvimos despacito a la mansión.
Me acosté cómodamente en mi cama y cerré los ojos, recordando los maravillosos momentos que había vivido junto a mi híbrido. Recordaba sus bellos ojos azules, su rosada boca y para que hablar de su tonificado cuerpo. De repente, unas cálidas manos, me acariciaron con dulzura la cara. Al principio, creí que era una alucinación, debido a la cantidad de alcohol que había bebido. Pero al sentir el olor a su perfume, supe que era real. Abrí los ojos y me encontré con su hermosa sonrisa, esa que guardaba solo para mí.

-Hola, bella Hechicera- saludó y al escucharlo pude notar que estaba tan borracho como yo.

-Hola, Nick- contesté, sonriendo.

El alcohol me impedía enojarme con él, hasta me hacía feliz tenerlo aquí.
Siguió acariciando mi mejilla, mientras me observaba detenidamente sin decir nada. No dejaba de sonreir, lo que hacía notar más lo borracho que estaba.

-¿Qué haces aquí, Nick?- pregunté frustrada. No podía olvidarlo si seguía apareciendo en mi vida.

-Te extraño, Hechicera. Verte ahí sin vida, fue lo peor que viví en mi larga, larga vida y por eso hice estupideces que no se justifican- dijo con la tristeza presente en sus preciosos ojos.

-Eres tan tierno cuando estas borracho, Nicky- contesté riendo.

Estábamos tan cerca que podía sentir su respiración agitada. Tenía unas inmensas ganas de besarlo y extrañaba hacerlo.
Lo atraje hacía mí y lo besé con desesperación. Al instante me respondió con la misma actitud.
En ese momento, sólo existiamos él y yo, que nos besabamos con pasión y amor.

(El siguiente relato tiene contenido sexual, queda a su cargo leer o no)

Los besos empezaron a subir de nivel. Las manos de Nick acariciaban bajo mi blusa y las mías intentaban levantar su camiseta, para tocar su escultural cuerpo.
Besaba mi cuello, a medida que se dirigía hacía abajo. No quería que parara. Saqué su camiseta y observé sus tatuajes, los cuales lo hacían aún más sexy.
Rompió mi ropa y una sonrisa lasciva apareció en su cara cuando me vio en ropa interior. Acarició mi cuerpo suavemente, mientras sacaba mi sujetador. Sus dulces labios se posaron en mis senos, enviando descargas de placer hacía mi bajo vientre. Iba bajando sobre mi abdomen, hasta que se detuvo en mis bragas. Metió dos dedos bajo esta y mi humedad lo recibió.
Separó mis piernas y besó esa parte tan sensible de mi cuerpo, lo que hizo que me retorciera de placer, este hombre si que sabía lo que hacía.
Su hábil lengua me exploraba con experiencia, hasta que me deje ir en un fuerte orgasmo. Lo peor de todo, era que teníamos que ser muy silenciosos, porqué mi mejor amigo dormía a una habitación de distancia.
Rápidamente, me deshice de su pantalón, con el boxer incluido. Nick desnudo era una de las cosas más maravillosos que mis ojos habían visto. Era todo un dios griego.
Lenta y tan silenciosamente como pudimos, hicimos el amor toda la noche. Hasta que me dormí sobre su pecho con la esperanza de que cuando despierte siga aquí y podamos arreglar el embrollo en el que estábamos metidos.

(Fin del contenido sexual)

POV Klaus

Había bebido más de la cuenta y sin saber como, terminé en la ventana de la habitación de mi Hechicera. Al ver por esta, noté que Kira estaba acostada sobre su cama, con los ojos cerrados y una sonrisa en su cara.
Entre el alcohol y las ganas de tenerla en mis brazos, silenciosamente, abrí la ventana y entré para abrazarla. Cuando abrió sus preciosos ojos café, me di cuenta que estaba tan borracha como yo, porque en vez de gritarme o echarme, me sonrió con ternura. Preguntó que hacía aquí y fui sincero por primera vez en toda mi vida. Besó mis labios con desesperación y obviamente le respondí al instante. Extrañaba tanto tenerla cerca. Cuando los besos subieron de todo, la ropa empezó a sobrar y yo me quedé maravillado por el sexy cuerpo de mi Hechicera.
Después de hacer el amor toda la noche, se durmió sobre mi pecho. La amaba con locura, eso lo tenía claro. Ahora nada me iba a separar de ella. Me quedé mirándola hasta que mis ojos comenzaron a cerrarse.

POV Kira

Abrí los ojos, los recuerdos de la noche anterior me golpearon. Lo mejor de todo era que Nick seguía dormido a mi lado, mientras me  abrazaba la cintura.
Creo que podía perdonarlo por esta vez. Pero sería la primera y la última.
Necesitaba darme una larga y relajante ducha, pero el brazo de Nick me lo impedía. Cuando quería salir, me apretaba más contra él.

-Quedate quieta, Hechicera- gruñó abriendo un poco los ojos.

-Quiero bañarme, Nick- dije avergonzada.

-¿Te puedo acompañar?- preguntó seductoramente.

-No, Nick- le dije sonriendo- Dam no puede saber todavía que estás aquí-

-Entonces no te suelto- contestó como niño pequeño.

-Es hermoso despertar contigo- dije con ternura, acariciando su cabello.

-Tú eres hermosa-

Sus ojos brillaban como nunca antes, preciosos y claros. Me besó suavemente en los labios, eran tan suaves.

-Te amo- susurró entre besos.

Me quedé inmóvil, no podía creer lo que escuchaba. Eso que tanto había querido que dijera había salido de su boca. Me amaba y eso me hacía tremendamente felíz.

-Te amo- respondí, entre lágrimas de emoción.

-Hechicera, ¿por qué lloras?- preguntó preocupado- ¿Me perdonas por ser un idiota?-

-Me haces felíz Nick y sí te perdono, pero es lo único que te perdonaré. No quiero sufrir más-

-Nunca más, Hechicera- dijo besándome.

Pasamos la mañana entre besos, caricias y abrazos. Yo intentaba no pensar en la reacción de Dam, cuando le cuente que volví a caer por él. Estaba segura de que su reacción iba a ser muy mala, lo conocía mejor que a mí misma, sabia que temía por mi y que odiaba verme llorar. Por eso lo amaba tanto a mi mejor amigo. Pero temía que su reacción fuera tan mala que nuestra amistad se rompiera, ya que Dam era conocido por ser impulsivo.

Lectores/as llegamos a las 1K, gracias a todos por seguir esta historia, por los votos, comentarios y el apoyo. Me hace muy feliz que alguien lea lo que yo escribo. GRACIAS A TODOS <3 no puedo decir nada mas :)

 GRACIAS A TODOS <3 no puedo decir nada mas :)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hechicera - Nicklaus MikaelsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora