Loué pour toujours® Por: SukiMa🔱

4. La culpa se lo tiene Raven

Cuando paso esta equivocacion no me imagine que pasará con el hijo de mi amiga fallecida...

Ahora me siento mal... Profesionalmente :'v

✨✨✨✨✨✨✨✨✨✨

Luego que llamara a la ginecóloga ese Alfa de pecho peludo era por el proceso de inseminación.

SukiMa llego al gran edificio para encontrarse con ese tipo.

La doc estaba demasiada estresada y cansada. Ya tenía suficiente por ordenar su oficina.

No podía creer que tenía mas de 5000 archivos que era... Pues archivo muerto.

Y apenas anoche comenzó, y a las 7 am término. Cuando quiso irse a casa se dio cuenta que su turno ya empezó. Luego se percató que tenía dos citas: la de Charles Xavier y el negocio de Erik Lensherr.

Que fastidio.

Mas bien weba.

Luego de hacerle la inseminación a Magda tuvo que salir a prisas.

Lo único que le extraño a la doc es que Magda no hablará para nada. Comúnmente siempre habla de sus tratamientos de belleza.

Llego a la gran oficina del Alfa viendo a Azazel en su escritorio y hablando dulcemente. Al parecer era su pareja.

"Me pregunto quien será la pareja del asistente. A leguas se notaba como un Alfa sin sentimientos" pensó SukiMa caminando hacia la sala de espera antes de llegar a la oficina verdadera del señor Lensherr.

Ante oficina y oficina.

Extraño.

SukiMa saco el expediente de Magda por lo de sus datos personales y aprovecho este pequeño tiempo para ver su horario y citas para mañana.

Azazel se acerco a la doc y le saludo amablemente.

- Me gustaría que me respondiese algunas preguntas, doctora...

SukiMa dejo su agenda para después y, le prestó atención al hombre rojizo.

- Claro... ¿Em?

SukiMa era mala con los nombres.

- Mi nombre es Azazel Wagner. Mi esposa pronto va a parir a mi hijo y me gustaría que nacierá en casa ¿se podrá?

SukiMa bostezo con cansancio y lo miro de pies a cabeza.

"Alfa amoroso preocupado por su cachorro" pensó SukiMa.

- Por supuesto...

- Entonces en ese caso ¿podría darme un número de teléfono para llamarle?

SukiMa escribió su número en una hoja en blanco y se lo dio.

- Gracias... Por cierto ¿Cuánto...?

SukiMa sonrió dulcemente.

- No se preocupe, corro con los gastos. Será mi regalo.

El hombre rojizo le sonrió aliviado.

Al parecer está en problemas económicos.

Entonces en eso, el Alfa baboso el apodo que le puso la doc hizo presencia y se sentó en uno de los sillones de cuero elegante.

Y elegantemente doblo su pierna derecha y la poso con la pierna izquierda.

Parecía como el rey del mundo. Mas bien un conquistador de países.

Que cosas no.

- ¿Y?

SukiMa suspiro cansada y frustrada.