CAP.24

3.7K 276 8
                                    

- Regina!!

- Qué quieres Danielle? Mira como lo estas poniendo todo, no podías haberte envuelto en una toalla?

- Déjate de histórias! Qué hacen todos esos tios trajeados rodeando la casa? - me fijé que tenía un par de maletas a su lado - Dónde vas?

- Tu tío me manda llamar, estaré fuera una semana.

- Por eso hay 50 tios en casa?

- Eso es cosa de Alessandro - resoplé, era tan exagerado... - Por cierto, el momento de Hanna a llegado, ya sabes a lo que me refiero.

- Creo que no está preparada Regi.

- Lo está. Me voy, ya sabes lo que tienes que hacer en cuanto se levante. Peter ya lo sabe.

- Vale, si tu crees que está preparada pues lo haré.

- Bien, os llamaré para que me informeis de todo.

Una hora después Hanna dió señales de vida en la cocina.

- Buenos dias enana

- Hola Dani. Sabes que Regina se ha ido?

- Si, lo sé. Hoy tengo un plan para nosotras - le dije sonriendo como pude -

- Siiiiii? - me contestó feliz. Nana me miraba preocupada -

- Sip, hoy nos vamos de escursión

- Que bien! Voy a vestirme - salió corriendo escaleras arriba -

- Nana no me mires así, sabes que a mi tampoco me gusta la idea de dejarle.

- Ella no es como tú Danielle

- Lo sé nana pero sabes que no tengo opción.

- Ya estooooy!!! - nos gritó Hanna desde la puerta -

Nana me asintió apenada y yo me puse en marcha cn la enana.

- Mira Dani que flor más bonita!

- Si, es muy bonita...

Llevaba mas de 2 horas caminando por el bosque y paré justo donde mi madre lo izo conmigo. Me traia tantos recuerdos ese lugar...

- Hanna jugamos al escondite?

- Vale!

- Tu la paras, cuentas hasta 50 y vienes a buscarme ok?

- Vale - se colocó en un árbol y comenzó a contar - 1, 2, 3, 4, 5, ...

Corrí como alma que se lleva el diablo entre los matorrales, las lágrimas corrían por mis mejillas sin cesar. Me dolía tanto dejarla ahí, ahora entiendo lo que sintió mi padre cuando mi madre lo izo.

Al cabo de una hora más o menos llegué a casa.

- Cómo ha ido?

- La dejé jugando al escondite

- Pobrecilla mi pequeña

- Nana no me estas ayudando mucho, ya me siento lo bastante culpable para que tu encima me machaques mas.

- Tienes razón lo siento. Vayamos a comer.

- No me apetece mucho comer ahora, voy a darme un baño.

No se cuanto tiempo estube en remojo pensando en Hanna pero salí arrugada. Me puse lo primero q cojí y bajé a la cocina, allí estaba nana con el pañuelo llorando.

- Esque es tan pequeña y tan inocente...

- Lo sé pero tiene que hacerse fuerte y independiente.

- Y si no encuentra a Peter?

- Entonces Peter la encontrará a ella.

- Una semana sola en un bosque oscuro rodeada de bichos...

- Yo también pasé por eso

- Pero ella es muy delicada Danielle

- Qué quieres decir con eso?

- Nada, comanos algo o enfermaremos.

Las dos estabamos con el plato en la mesa sin probar cucharada, mínimo habian pasado dos horas desde que los puso y aun seguían ahí igual de llenos.

- Han pasado más de tres horas, tu crees que estará bien?

- Eso espero...

- Ponerme un plato para mi porfis, tengo mucha hambre.

- Ahora mismo te lo pongo - dijo nana cabizbaja pensando igual que yo en la situación de Hanna -

- Hanna sientate bien - le dije como siempre -

Nana y yo nos miramos incrédulas y miramos a Hanna que comía sonriente su plato de macarrones.

- Pero...Cómo?.... Qué haces aquí Hanna?

- Vivo aqui - rió - Me cansé de buscarte y volví a casa

- Cómo volviste? - estaba flipando -

- Muy fácil. El río esta en el sur y nuestra casa en el norte, pues fuy hacia el norte.

- Cómo supiste hubicar el norte?

- Por las plantas, las mas húmedas estan mas cerca del río verdad? - asentí con la cabeza - pues donde estaba era el sur y fuy en la otra dirección.

Me hice un amiguito águila que me acompañó todo el camino hasta que encontré el sendero y después se fue. Allí era donde iba con Regina a buscar las plantas mas secas y después fuy por donde siempre y entré por el jardín, un guárdia me abrió la puerta.

Nana y yo nos miramos en cuanto acabó de contarnos y comenzamos a reirnos a carcajadas sin poder parar.

La mocosa volvió a casa sola! Nadie lo había hecho, la mayoría sobrevivían o se quedaban en el mismo lugar.

- Hanna eres única! - le dije abrazandola -

- Y tú un poco tramposa, no valía esconderse en casa!

Volví a reirme, no se habia enterado de nada. Una llamada interrumpió el momento.

- Danielle es para ti - me pasó el teléfono nana -

- Sí?

- Hola Dani soy Anthony

- Qué tal guapo mío?

- Bien linda, mañana ya nos vamos y habíamos pensado en hacer una cena todos de despedida, te apetece venir?

- Claro, dónde será?

- Ven a casa de mis padres, Heather tiene muchas ganas de verte.

- Yo también - mentí - Cenaremos allí?

- No, en un restaurante. Saldremos todos desde casa.

- Ok, a qué hora quieres que llegue?

- Sobre las 21h, te va bien?

- Perfecto, allí estaré

- Entonces nos vemos en un ratito linda, chao!

Ohhh ya se van...

No me conoces (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora