Viajando a 1995

Capítulo once

Luego de cenar, como ya era habitual, una persona con el traje negro se acercó a la tarima y al quitarse lo que la cubría todos observaron a una rubia preciosa que tenía mucho parecido con otra rubia de último año de la casa de Slytherin, la mujer que estaba al frente tenía una sonrisa divertida plasmada en el rostro.

Lo que les espera, pensó antes de hablar.

-Buenas noches, yo soy Molly Weasley- ¿otra Weasleu rubia? pensaron los pelirrojos, Molly por el contrario tenía unas pequeñas lágrimas en los ojos, se sentía emocionada y agradecida de que uno de sus hijos nombrara a su nieta como ella- el nombre de mi padre lo diré al final, tengo 24 años, mis padrinos son Charlie y Emma Weasley, en mis tiempos en Hogwarts fui una orgullosa águila-la casa azul la aplaudió- mis mejores amigas son dos de mis primas Nicky y otra que aún no se ha presentado, tampoco jugué Quidditch porque le tenía un poco de pánico a las alturas

-Poco dice- alguien de los encapuchados hablo

-Tú callate- respondió la rubia- tuve muy buenas notas lo que me llevo a ser prefecta y premio anual

-Prefecta perfecta- canturrearon algunos de la tercera generación

-Ya cállense o voy a hechizarlos- amenazo Molly II- ahora, bueno en mi época, trabajo como parte del ministerio de magia en el área de leyes mágicas

Los Weasley's, todos ellos estaban orgullosos de la rubia que estaba presentándose y ya tenían una ligera sospecha de quien sería su padre.

-Creo que ya no hay nada más que decir, ¿alguien tiene alguna duda?-al ver que nadie levantó la mano siguió hablando- mi padre es...- calló para darle suspenso al asunto- Percy Weasley.

-Percy tú...-dijo la señora Weasley con las lágrimas corriendo por sus mejillas- tú le pusiste mi nombre

Percy ya había estado pensando en pedirle disculpas a su familia, por supuesto que no lo haría frente a un gran número de espectadores porque su estúpido orgullo no lo permitía pero ya hablaría con ellos, en ese momento solo pudo abrazar a su mamá y dirigirle una mirada llena de arrepentimiento a su padre, con quien había tenido una fuerte discusión a causa de su rebeldía, recibió una sonrisa tranquilizadora de su parte y ahora vio a su hija quien también le sonreía de manera comprensiva, Molly II sabía que su padre en su juventud había cometido errores pero luego pudo enmendarlos y esa eran una de las tantas cosas que admiraba de él.

-¿Quién es tu madre cuestionó?-el tercer hijo de Arthur y Molly

-Esa información no te la daré yo- negó con una sonrisa y luego fue a reunirse con su papá y demás familiares. Aunque los más observadores ya se imaginaban quien podría ser la madre de esa muchacha.