"La razón"

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Le dije que sí, y es que enserio me gustaba, no quisiera comparar un amor con otro porque eso destruye quereres, pero hay cosas que no se pueden negar, que no se pueden ocultar ¿Me gustaba más que Piper? Definitivamente no, sin embargo, estoy dispuesta a comenzar con alguien más para arrancar este amor que siento por Pipes desde raíz, por esa razón ahora me encuentro tomada de la mano de Valery caminado hacia la puerta por la que minutos antes había salido con Piper, volteo hacia el lugar donde está escondida, pero solo veo su silueta de pie ahí mismo entre la oscuridad, y al pasar por la puerta al interior del salón, la pierdo de vista.

-No sabes lo feliz que me haces. - Decía Valery con entusiasmo mientras bajábamos por las escaleras.

-Tú también me haces feliz. – Contesté dedicándole una sonrisa.

Al llegar al bullicio de la fiesta, todos miraban nuestras manos las cuales un estaban entrelazadas, unas cuantas personas de la fiesta se acercaron junto con unos reporteros que se encontraban grabando dicho evento, comenzaron a preguntarnos sobre si estábamos en una relación, donde nos conocimos y cosas así, asuntos que decidimos contestar, con excepción del lugar donde nos conocimos ya que no es muy grato recordar aquel día, nosotras nos encontrábamos cerca del pasillo que daba a la azotea y mientras hablábamos con los reporteros, por el rabillo del ojo pude ver a alguien que pasó caminando rápidamente, al voltear pude ver como Piper se retiraba del evento y Jennifer tras ella, quien minutos antes miraba atenta a lo que hacíamos Valery y yo.

Después de unas cuantas entrevistas, proseguimos a seguir bailando, a veces sentía como si mi cuerpo hubiese esperado toda su vida para bailar de la manera que lo hacía con Valery, estábamos totalmente sincronizadas y ella bailaba de una manera fenomenal, si algo admiro de una mujer es que sepa bailar, el contoneo perfecto de caderas y la naturalidad de sus gestos al bailar hacían que me sintiera en una playa y que ella era como una palmera meciéndose por el soplar del viento.

Son las 2:30 a.m. y mis pies duelen por el uso de los tacones altos, Valery también parece adolorida y decide sentarse en una se las sillas de nuestra mesa para después comenzar a quitarse sus tacones.

-Cariño, deberías de hacer lo mismo, tu cara expresa un sufrimiento total. – Dice mientras mira sus zapatos color guinda.

-Creo que tienes razón, así nos podremos ir más relajadas al auto. – Digo mientras me siento frente a ella y comienzo a retirar mis tacones.

Me pongo de pie con mis zapatos en la mano izquierda, mis pies están completamente entumidos que incluso el ponerlos completamente en el suelo hace que me queje del dolor, Valery se pone de pie y hace los mismos gestos que yo, también esta adolorida.

-Creo que, el que el suelo este frio pasa a segundo plano por lo adolorida que me siento. – Dice mientras hace un gesto de dolor, que para mí parece tierno pues su nariz se arruga y hace gestos graciosos con la boca.

-Vámonos de aquí, ya estoy cansada. – Digo mientras que con mi mano libre tomo la suya.

Al salir, fuimos el centro de atención de las cámaras, de nuevo, solo sonreí a todos lados y Valery saludaba con la mano con la que sostenía sus tacones, los reporteros reían porque era raro que alguien se quitara los zapatos en una fiesta.

-Ouch! - Exclamó Valery mientras se detenía, lo cual hizo que yo también me detuviera de golpe, al voltear ella estaba sostenida en un pie, pues se estaba revisando el otro.

- ¿Qué pasó? – Cuestioné mientras miraba su pie.

-Creo que pisé una piedra ¿Por qué hay piedras a la salida de un hotel? - Decía enojada, me quedé viéndola un momento en silencio mientras sonreía y ella al ver que no respondía nada y que estaba riendo, me miró incrédula. - ¿Por qué te ríes, Alex? –

Te llevo en mis letras. [PAUSADA]Where stories live. Discover now