Muñeca

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Narrador Omnisciente

— ¡Karamatsu!— exclamó ______ con una sonrisa mientras se dirigía a su niñero de sudadera azul.

— Heh~ al parecer my Karamatsu girl no controla sus ganas de verme— dijo el mayor mientras se colocaba sus lentes, haciendo una de sus típicas poses de chico cool.

______ sólo sonrió de lado, divertida por la manera de pensar que su niñero siempre le mostraba.

— ¿Nos vamos?

...

...

...

— Hoy de nuevo hubo un proyecto del club de costura— decía ______ con pesar. — No sé porqué le hice caso a mi mamá de elegir ese club

— Hmm sin embargo— Karamatsu la señaló, simulando una pistola con una de sus manos. — Me sería de grata felicidad ponerme cualquier ropa que hagas con tus beautiful manos— comentó, haciendo un bang al mismo tiempo que le guiñaba uno de sus ojos.

Ante eso, ______ se sonrojó un poco, soltando una pequeña risa por las acciones del mayor.

— Creo que me arriesgaré— respondió divertida. — En todo caso, prefiero ser yo quien reciba los hermosos regalos de mi lindo niñero de suéter azúl, como por ejemplo, ese bonito pijama que hiciste para mí— esta vez y con una sonrisa ladina, la menor le regaló un guiño al contrario, recibiendo así un notable sonrojo de su parte.

Aprovechando la pequeña vergüenza de su niñero, _______ alzó sus manos, simulando una pistola con una de ellas mientras que con la otra, hizo la acción de tomar el arma, haciendo de esa manera, las mismas acciones que el castaño había realizado unos pocos momentos antes.

Después de eso, ambos siguieron hablando de temas triviales hasta que escucharon el llanto de una niña unos metros más adelante de ellos; al parecer, la pequeña le lloraba a su madre con tal de regresar por su muñeca que se le cayó en medio del cruce peatonal, sin embargo, la señora no pareció tener intenciones de regresar, jalando a la menor de su brazo e ignorando su llanto.

______ trataba de mirar por sobre los transeúntes que pasaban de largo aquella escena, logrando captar entonces la pequeña muñeca sobre el asfalto siendo pisada un par de veces.

Nuestra protagonista se acercó sin más en dirección a la muñeca y, quitándole el polvo además de marcas sucias de las pisadas, observó a su alrededor con tal de asegurarse de si la niña seguía cerca del lugar.

— Hay que devolverle su muñeca— dirigió por unos segundos su mirada al más alto de los dos. En ese momento, los semáforos cambiaron de color, obligándolos a ambos retroceder, siendo _______ quien halló a la pequeña del otro lado del cruce. — Ah, se están alejando cada vez más...— se desanimó la más bajita, cosa que no pasó desapercibido por Karamatsu.

— Heh, puede ser peligroso si cruzas sin fijarte a los lados my lady— habló de repente Karamatsu mientras le quitaba amablemente la muñeca de sus manos; con prisa cruzó la calle en dirección a la niña con su madre.

"Indirectamente me llamó despistada pero... Él tampoco se fija al cruzar" _______ entrecerró sus ojos, observando cómo su niñero se había ido corriendo hacia el otro lado de la calle con la muñeca en sus manos.

En cuanto logró cruzar, Karamatsu le devolvía la muñeca a aquella niña, la cual con una enorme sonrisa recibió gustosa su querido juguete entre sus diminutos brazos, estrechando en el proceso a su inesperado héroe en un efusivo y alegre abrazo. Algo que sorprendió por unos instantes a la mujer por la intromisión del desconocido sobre su hija.

Los Niñeros [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora