Capitulo 7: Regaño

443 37 1
                                    


– ¿Qué es lo que paso? Y quiero la verdad

Los dedos de su madre se oían como golpeaban la mesa uno por uno constantemente poniendo mas nerviosa a la albina.

– Tu madre te hizo una pregunta – Ahora hablo su padre con un tono de voz fuerte.

– Bueno... Yo – Un nudo en su garganta se había formado.

– No me salí de mi trabajo para nada jovencita, no tengo mucho tiempo así que habla rápido – Amenazo su padre.

– Ella no tiene la culpa de nada – Llego su hermana tratando de ayudar en la situación.

– Mai no te metas, estamos hablando solo con Puppet

– Los asuntos de mi hermana son los míos, solo escuchenla – Dijo con firmeza.

– Tienes 10 para salir de esta habitación si no sabes lo que podemos hacer contigo – Su hermana quiso decir más pero la penetrante mirada de sus padres la intimidaron haciendo que saliera de la habitación.

– Puppet, habla – Dijo su madre.

– Yo no tengo la culpa de nada - Hablo la antes mencionada.

– Entonces el director solo nos llamo por que quería inventar cosas falsas de nuestra hija ¿No? – Dijo su padre con un poco de ironía.

– Él solo ve las cosas mal, lo que les haya dicho yo no lo hice

– Bien, si no fuiste tu explica esos moretones y reportes que tienes

– Los reportes son por cosas sin sentido, como llegar tarde o comer, de eso si tengo la culpa pero los moretones... Son por que me golpearon – Explicó.

– Entonces si te metiste en una pelea – Dijo su padre cruzado de brazos.

– En parte si, pero yo no la ocasione, solo me defen...

– ¿Sabes lo que pudiste ocasionar? – Dijo en tono molesto su madre.

– Si pero...

– Nuestra familia es una de las mas importantes del país, nuestra reputación es  lo que debes de cuidar, no permitiré que alguien de esta familia cometa tales cosas – Hablo su padre.

– Yo no...

– Si apenas tolere tu forma de vestir y ser no creo que tolere a alguien que le gusta meterse en problemas

– ¡Que yo no fui! – Grito alterada.

– No le respondas a tu padre – Regaño la mujer.

– ¡Ya estoy harta! ¡Nunca me quieres escuchar! Por una vez en su vida ponganme atención

–¡Basta! Llegaste a mis limites – Dijo su padre parándose al mismo tiempo que daba un fuerte golpe en la mesa.

– Y ustedes a los míos – Esta imito su acción.

– Estas castigada, cuando te recuperes empezarás a trabajar

– ¡¿Que?! Pero si aun no tengo edad suficiente para trabajar

– Tu padre y yo veremos como lo haremos, si no aceptas este castigo te madaremos lejos para que te eduquen

– No serian capaces

– ¿Quieres que te mandemos ahora? Por mi no hay problema – Dijo su madre.

– Los odio – Dicho esto la de pelo corto se sentó nuevamente.

– Como sea, en la noche discutiremos lo del trabajo – Los dos se retiraron de la mesa sin decir alguna palabra dejando a la albina con un inmenso enojo. Poco después la puerta de oyó, ya se habían ido de la casa.

– ¡Maldita sea! – Grito revolviéndose un poco el pelo.

– ¿Todo bien? – Dijo su hermana entrando.

– No, nunca me quieren escuchar, siempre les importa mas su trabajo o su maldita reputación que su propia hija – Con coraje se paro de la mesa dirigiéndose a la salida.

– A donde crees que vas, aun sigues lastimada – Dijo tratando de detenerla.

– Solo iré a dar una vuelta, no tardare

– No, tienes que descansar

– Mai, por favor - Fijo sus ojos en la contraria, de verdad quería salir a despejarse un poco o cometería una locura.

– No tardes ¿Ok?

– Esta bien, vuelvo en unos minutos – Dicho eso salio de su casa en dirección al parque, quería despejar su mente, volver a pensar en la nada.

Llegando al lugar antes mencionado se sentó en una de las bancas mas cercanas que tenia, miro al cielo, observando las nubes que para ella eran como algodones de azúcar flotantes, puede que lleve una vida con problemas pero la imaginación nunca se le iba, había veces que le gustaba imaginarse que los arboles hablaban o eran un pequeño reino creado por la aves.

Cerro los ojos, disfrutando de la poca brisa que había, el sonido de los carros y personas desaparecieron para ella, ahora entraba en su mundo.

– Creí que estarías descansando – La de pelo corto dirigió su mirada a la persona que le había hablado.

– ¿Chica? ¿Qué haces aquí? – Dijo reincorporándose.

– Las clases ya acabaron – Contesto sentándose al lado de esta.

– ¿Tan rápido?

– Si, cancelaron las clases ya que iban a fumigar la escuela y nos dieron el resto del día libre – Sonrió la rubia de tal forma que la de pelo corto se sonrojo levemente.

– M-Me da gusto, mas tiempo libre – Rió nerviosamente a la vez que se rascaba la nuca.

– ¿Ya te sientes mejor?

– Mejor que ayer si

– Me da gusto ¿Si llamaron a tus padres?

– Ni me lo recuerdes – Dijo mirando hacia otro lado.

– Te regañaron

– Si... Me dijeron que trabajaría

– ¿Trabajar? Eso es imposible, tus padres no pueden hacer eso – Dijo intranquila.

– Son capaces de hacer muchas cosas – Su mirada estaba perdida.

– Hay Puppet – Esta se acerco y abrazo a la albina quien se tenso al sentir la cercanía de esta – Solo ignoralos y ve a la gente que te importa, las cosas malas pasan por algo, no dejes que te hagan caer.

La mas alta miro a la rubia quien le dedicaba una sonrisa, sin pensarlo dos veces correspondió el abrazo recargando su cabeza en el hombro de esta.

– Gracias – Dijo casi en un susurro.

– No agradezcas

Las dos se separaron mirándose a los ojos, ninguna de las dos se había dado cuenta de la cercanía que había entre ellas.

– Eh... B-Bueno, sera mejor que ya me vaya, tengo que llegar temprano a casa – Dijo la rubia parándose rápidamente.

– Cla-Claro, vete con cuidado – En su voz se le notaban los nervios.

– Nos vemos Puppet, recupérate pronto – Dijo la rubia para luego irse.

Suspiro al verla caminar, desde que aceptó sus sentimientos hacia ella no sabia bien como actuar, aun podía sentir el cuerpo de la rubia entre sus brazos transmitiéndole un calor agradable.

– No pienses en eso ahora – Dijo dándose una cachetada mental.

– Mejor vuelvo a casa antes de que Mai se preocupe – Y sin decir mas, regreso a su casa.






Continuará

Mi mejor error  [Puppica]  ~Terminada~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora