CAPÍTULO II : "El baile"

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No puedo creerlo! Recién va un día y ya tengo tres comentarios! Me van a hacer llorar, es lo más que he obtenido y tan rápido :') Empecemos con el siguiente...

Por más que los omegas Bennet intentaron sonsacarle algo de información a su padre, no lograron nada... Lilia estaba dispuesta a intentar también lo mismo, pero luego de la mirada de su marido, supo que no diría nada, solo le quedó confiar en lo que Celestino le había mencionado de él. Al parecer el señor Nikiforov era bastante guapo, conversador, con una gigante sonrisa y pensaba asistir al baile con un grupo de amigos suyos. Una verdadera bendición para el grupo de omegas de la pequeña ciudad.
-Si uno solo de mis cachorros se casa con el señor Nikiforov y los demás se casan bien, me daré por satisfecha- le mencionaba Lilia a su esposo.
-Con que no sea Yuri el escogido, tienes mi permiso-
Días después el tan aclamado Viktor Nikiforov llego a visitar al señor Bennet, unos 10 minutos máximo y aunque los omegas lucharon por espiar y al menos saber cómo se veía el misterioso alfa, no lograron nada. Intentaron invitarlo a cenar, pero de último momento se le presentaron ciertos asuntos en Londres y no pudo asistir. Lilia tuvo que conformarse con que lo vería el día del baile, esperanzada en que escogiera alguno de sus hijos.
El día del baile, el señor Nikiforov llegó con 5 personas en total; sus dos hermanas una alfa casada y la otra, Mila, aún soltera, el esposo de la primera y un amigo suyo, el señor Otabek Altin. Apenas llegó este peculiar grupo, toda la atención se centró en ellos; la elegancia, finura y modales en su trato los hicieron aún más agraciados a los ojos de todos, al menos a primera vista...El señor Altin es el que más revuelo causó, pues su presencia alfa imponía y a minutos, se corrió el rumor de que su renta era de diez mil libras al año. No era de mal ver, y estaba vestido de manera sencilla, con un traje gris que acentuaba su cabello y una corbata negra a juego. Conforme pasaba la velada, el trato que dio a todo el mundo empezó a dar que hablar, no era lo suficientemente amable con nadie y prefirió mantenerse en silencio frente a más de un alfa que intentó hacerle conversación. Todos asumieron que era demasiado orgulloso y que no se estaba relacionando con nadie debido a ello, a diferencia de su amigo el señor Nikiforov que acaparó toda la atención, era jovial, amable y muy conversador. Esa noche, Otabek solo bailó con las dos hermanas de Viktor, mientras que el resto de la velada se la pasó apartado de los demás, como si el simple hecho de estar allí le desagradara.
Habían tan pocos alfas para la cantidad de omegas presentes que Yuri debió tomar asiento. La verdad siempre asistía a los bailes por insistencia de Lilia, obligándose a sonreír y actuar de manera educada. Se sentía completamente agotado y el único asiento libre se encontraba cerca de Otabek, al menos lo suficiente para escuchar la conversación que se llevaba a cabo entre él y su amigo Viktor, aunque no lo suficiente como para verlo. Apenas se había fijado en él cuando entró en el salón, de un momento a otro se sintió abrumado por un sentimiento nuevo al que prefería no poner nombre. Aún estaba metido en sus pensamientos cuando escuchó a los dos alfas hablar...
-Vamos Otabek, no seas aguafiestas y baila, se te van a dormir las piernas por seguir allí-
-Creo que bailé lo suficiente por una noche, no conozco ni a la mitad de gente de aquí, y no estoy interesado en tener que aguantar a tantos omegas-
-Vamos Ota, ¿otra vez con lo mismo? ¿Por qué no lo intentas? El salón esta lleno de omegas, todos son muy agradables-
-Contigo querrás decir, la verdad creo que estás bailando con el único omega tranquilo del salón-
-Y guapo, no lo olvides, creo que nunca vi a un omega tan hermoso y que huela tan bien. Me parece que uno de sus hermanos está sentado cerca de aquí y te puedo asegurar que no está nada mal- Viktor alzó las cejas como para dar ánimos a Otabek, quien lo miraba impasible -deja que le pida a Yuuri que te lo presente-
-Creo que gastas tu tiempo en vano, se ve bastante atractivo de espaldas, pero no lo conozco y no llama lo suficiente mi atención como para acercarme. Además que si está sentado es porque nadie más quiso bailar con él. Mejor ve con tu pareja y disfruta la velada-
Viktor obedeció y se dirigió a bailar otra vez con Yuuri, mientras el rubio menor trataba de contener sus puños calmados, había pensado que ese alfa era diferente a los otros pues se veía más calmado que el tal Nikiforov, pero... ¡aquel hombre ni siquiera lo conocía y ya lo había rechazado! Definitivamente se las vería con él ¡No por nada era Yuri Plisetsky, el omega menor de los Bennet! Ese alfa presumido había dañado su orgullo propio y lo haría pagar de inmediato. Se levantó de su asiento intentando pasar desapercibido para el alfa ese y empezó a comentar con todo el que pudiera (es decir, cualquier alfa, omega o beta que no se sintiera intimidado con su mirada de odio) aquello que oyó, imitando con una voz sarcástica al señor Altin, para ridiculizarlo.
La velada transcurrió tranquila a partir de allí y todos los miembros de la familia Bennet pudieron regresar felices a su casa, salvo Mickey, que estaba enojado porque había un alfa que intentó acercarse a su hermana toda la noche y al notarlo, él tuvo que ser el cordero de sacrificio para evitarlo... se había tenido que pasar el resto de la noche bailando con el tipo ese, ignorando todo lo que le decía e incluso su nombre, hasta que el alfa ese había intentado besarlo, lo que le valió una bofetada, que a él le ganó un regaño de Lilia y que lo obligaran a disculparse.
-Yakov, el baile fue mejor de lo esperado, el señor Nikiforov bailó dos veces con Yuuri y todo el mundo lo alabó por su nuevo traje. ¡Fue el único omega con el que bailó dos veces! Mickey como siempre tuvo que disculparse con un alfa y Yuri se quedó sin bailar por la culpa del amigo del señor Nikiforov, te juro que nunca vi a un hombre tan antipático y orgulloso como él, se apartó de todos como si tuviéramos peste o algo parecido. Me parece que Yuri ganó algo al no bailar con ese tipo, alfas como él no valen la pena-
-Claro Lilia, en vista de eso y que ya es tarde, lo mejor ser a ir a dormir- Cada uno se dirigió a sus habitaciones compartidas...Ambos Yuris tenían un cuarto, los mellizos igual e Isabel la dormía sola a petición de ella misma y con la venia de sus hermanos (después de todo, nadie quería aguantar sus berrinches de la mañana cuando se despertaba totalmente despeinada y demoraba más de una hora en peinarse)

En cuanto los dos Yuris se quedaron solos, fue cuando empezó la conversación...
- ¿Y cerdo? Que te pareció el señor Nikiforov-
-Yura, él es casi demasiado perfecto; digo es atento, amable, sensato y muy educado. No creo que yo pueda gustarle, soy bastante normal y no estoy seguro de poder mantener su atención por mí mismo-
-Vamos cerdo, no te menosprecies. Ambos sabemos que de todos nosotros eres el más guapo pese a lo que diga la idiota de Isabella; sólo porque Lilia le da un poco de atención se cree más que todos-
-Bueno, no esperaba que me sacara a bailar dos veces, casi me da un infarto al verlo acercarse a mí. Yura, él es demasiado guapo, su cabello plateado y sus ojos... Pero siendo Omega, puedo decirte que nunca antes había percibido tanto el aroma de un alfa... Era como un olor a madera...creo que caoba. Casi sentí mis piernas temblar al bailar con él-
-Ya cerdo, calma tu Omega. No quiero que entres en celo porque la última vez sabes lo que pasó. Aunque era obvio que te sacaría a bailar de nuevo, digo, eras el mejor Omega de todos los que estaban allí. Pero como eres tan inocente, piensas que eso no es cierto-
- Pero Yura,  te digo que no puedo estar seguro de que no se aburrirá de mí. No tengo nada de interesante, si alguien es lindo e interesante aquí, ese eres tú-
-Claro, y por eso ese tal Otabek Altin ni quiso bailar conmigo-
-¿No me digas que querías bailar con él?-
-¡Cállate cerdo! ¡Claro que no quería bailar con él!- Yuuri notó el sonrojo en las mejillas de su hermano menor y su ceño fruncido... Sólo lo abrazó con fuerza, para intentar calmarlo-¡Qué haces, suéltame!-
- Dime, ¿te enamoraste a primera vista verdad? Por eso es que estuviste intentando hacerlo quedar mal frente a todos con tus comentarios, te dolió que te rechazara-
- Claro que no, es un idiota engreído con aires de grandeza. Era guapo sí, pero nada más- Yuri se safó del agarre de su hermano mayor y comentó- me preocupas tú, con tu inocencia de siempre, seguro puedes arruinar todo-
-Las hermanas del señor Nikiforov me cayeron bien, en especial la señorita Mila, aunque al inicio no quería acercarme porque es una alfa-
- ¿Esa tipa? Me pareció demasiado elegante, escucha cerdo, eres demasiado amable con las personas y no sabes distinguir la maldad, así que ten mucho cuidado con esas dos; son alfas y su hermano es muy rico, apuesto a que odiarían a todo omega que intente acercarse-
-Yura, ¿Por qué siempre todo lo vez malo? Ellas fueron amables conmigo-
-Tu vez todo demasiado bueno cerdo. Será mejor que durmamos ya, que sino la vieja mañana nos grita-
-Deberías dejar de decirle así a nuestra madre, algún día te escuchará y no la contarás-
-Ese día lo veremos-

Por otro lado, en la mansión de Netherfield Park, Víctor había quedado encantado con el tierno Yuuri, se le hacía difícil dejar de pensar en él y no recordar su aroma a flores de cerezo. Las dos hermanas hablaron muy seriamente sobre golpear a su hermano para quitarle la cara de estúpido del rostro, hasta que recordaron que siempre era así... Debieron admitir que Yuuri parecía un Omega bastante culto y educado a diferencia de los demás de la zona, así que se contentaron con permitir a su hermano pensar en él.

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THE PROUD RUSSIAN FAIRYWhere stories live. Discover now