¿El Chico Ideal?

Capítulo 8

Los aplausos se hacen escuchar, ambos miran alrededor.

-Nos despedimos, mis más amados "fans"- Luke habla por el micrófono. Todos comienzan a aplaudir y a gritar, Dimitri y Aly se unen. La sonrisa del chico es bonita y sus ojos tienen ese brillo tan coqueto que seguro es eso lo que las vuelve a todas locas, incluyendo su voz.- Los dejo con su DJ favorito. ¡Que continúe la fiesta!- grita.

Detrás de él aparece un chico rubio con dos aretes, con forma de diamantes, en ambas orejas. Aly se sorprende al verlo, en la escuela no se permiten por lo que nunca lo había visto, hasta ahora, con esos accesorios puestos. Lo ha visto en la escuela un montón de veces, Rosse ha sido la única en llegar a hablar con él. Supone que fue su idea en invitarlo como el DJ de la fiesta. No tiene disfraz, pero trae ropa negra.

Lo ven colocar algunos cables y otras cosas que Aly no logra descifrar. Al minuto se comienza a escuchar alguna melodía suave por las bocinas. Rosse aparece a su lado con una bebida en mano y se lo ofrece. Aly lo acerca a su nariz, el alcohol es evidente entre el jugo. Lo bebe solo hasta la mitad y se lo pasa a su amiga. Ambas gritan y se comienzan a mover al ritmo de la melodía suave. Dimitri ríe con ellas.

Comienza la canción y al instante deducen que es "Lean on" de Major Lazer. Rosse grita de emoción, es una de sus favoritas. Ambas se mueven al ritmo de la música, montan coreografías que parecen practicados. Dimitri se les une y ambas quedan sorprendidas, pero siguen disfrutando y bailando. Aly se siente feliz, relajada. No sabe si es por el alcohol u otra cosa, pero se siente más liberal. Tiene que disfrutar de su fiesta y se siente aún más feliz porque está bailando con un chico, uno bastante guapo. Dimitri de seguro ha de tener a muchas chicas babeando por él, pero es tan reservado y modesto que confunde cuando lo vez solo, con un libro entre sus manos.

En una segunda canción, los amigos de Dimitri aparecen y se disculpa con las chicas para ir con ellos. Son personas humildes y uno que otro usa espejuelos. No parecen unos cerebritos, pero notas la inteligencia y su agrado por los estudios en sus personalidades. No ve a donde va, pero tampoco le presta mucha atención. Rosse hace un gran trabajo en que se concentre en bailar y pasarla bien.

-¿Estas disfrutando mucho?- Rosse se hace escuchar entre la música.

-¡Sí!- Aly responde, la felicidad brota de ella.

Da una vuelta con un movimiento algo sensual. Vuelve a quedar de frente a su mejor amiga, ambas ríen a carcajadas. Bailan y ríen con quienes les rodean. Incluso Aly ríe con personas que nunca había intercambiado palabras en la escuela. Se siente diferente, de manera positiva. Aly ve a su mejor amiga acercarse, supone que le va a decir algo, pero siente un empujón en su espalda. Se voltea desconcertada y se encuentra con Chloe, y las gemelas.

«Lo que me faltaba», piensa.

-Así que bailas...- la rubia habla con una sonrisa burlona.- Pensé que bailabas, más bien, como una burra sin remedio- el ceño de Aly se frunce, molesta por sus palabras.

-¡Basta, Chloe!- Rosse se adelanta a hablar.- Piensa lo próximo que vayas a decir si no quieres que te saque a patadas de mi fiesta-advierte molesta.

Chloe dirige su mirada a ella y levanta sus manos a la altura de sus hombros.

-Tranquila fiera- le dice-, solo estoy impresionada con tu amiga. Eso es todo.

Aly comienza a notar las miradas de los demás, llenos de curiosidad. Algunos se detienen para mirar, otros continúan bailando y en lo suyo.

-¿Y por eso tenías que empujarme?- suelta Aly algo molesta.