Owl eyes. (Camren)

Capítulo 19. "Alianza secreta"

El brillo que se encontraba en el marrón de sus ojos parecía ser la cosa más encantadora que la hija mayor de la familia Jauregui había visto en todo el tiempo que llevaba de vida.

Se sintió completamente vulnerable después de haber escuchado la declaración que la legítima soberana había hecho minutos atrás. La ojiverde no asimilaba siquiera lo que estaba sucediendo en ese preciso momento y por esa misma razón no era capaz de formular palabra alguna.

La joven emperatriz pensaba que era hermosa.

Definitivamente, el simple hecho de saber aquello provocó una sensación que le resultó bastante incómoda en la boca de su estomago.

– ¿No piensa decir nada, señorita Jauregui?

Intentó llamar su atención.

La ojiverde parpadeó un par de veces, saliendo de su trance segundos después de que la reina del imperio británico se atreviese a hacer esa pregunta.

– No tengo nada que decir, su majestad.

Camila alzó una ceja antes de reír por lo bajo.

Efectivamente la joven Lauren Jauregui no era para nada parecida a todas las demás mortales que había conocido a lo largo de su vida. La emperatriz había aprendido que los humanos no podían salir del efecto de su hipnosis tan fácilmente debido a su debilidad pero, por alguna extraña razón la joven de ojos verdes solo permanecía inconsciente por un par de horas a lo mucho y, cuando llamaba su atención inmediatamente volvía a la realidad.

Sonrió una vez más. La joven Jauregui sí que era todo un caso.

Ambas giraron la cabeza con la intención de observar la barandilla negra que estaba ubicada en el balcón que tenía aquella hermosa habitación, pues ambas fueron capaces de percibir el sonido del vuelo de un ave que evidentemente tenía un tamaño colosal.

La joven de piel morena frunció el ceño antes de caminar hasta llegar al balcón, notando inmediatamente la presencia de dos enormes buitres que aterrizaron en el borde de la barandilla.

– Lo sentimos, su majestad. – Dijeron a la par después de cambiar a su forma humana, dando un pequeño salto en aquella barandilla para así poder ponerse de pie en el suelo del balcón – Llegamos tarde porque el rey Iglesias unió las fuerzas de su ejército y dio inicio a una nueva guerra.

Ella frunció el ceño por un par de segundos pero terminó asintiendo levemente con la cabeza, indicándoles a los hermanos que escucharía todo lo que tenían que decirle.

– No visualizamos a ningún Halter. – Afirmó el joven Aiden Bahre – Suponíamos que le interesaría saberlo.

Ella los observó expectantes sin siquiera notar que la joven de ojos verdes se acercaba a ellos con pasos lentos pero firmes, con la intención de preguntar cómo se encontraba su hermano menor en ese preciso momento.

La joven monarca giró levemente la cabeza al ver que la hija mayor de la familia Jauregui permanecía de pie justo a su lado, observando con asombro a los mellizos, quienes acababan de volver a su forma humana.

Ambos pelirrojos se dieron una mirada cómplice por un par de segundos antes de dar un par de pasos con la intención de sujetar a la joven Jauregui para llevársela lejos del balcón. Ellos definitivamente no iban a permitir que una simple mortal escuchara todo lo que estaba sucediendo en el reino enemigo en ese preciso momento.

– Alto. – Ordenó la joven de piel morena, colocando la palma de su mano derecha en el pecho de Caleb Bahre, indicándole que se detuviese – Ella puede quedarse a escuchar si así lo desea.