Alcohol y Amor. (Lapidot)

Capítulo 11.

-¿¡Te dijo que sí a la primera declarada!?- gritó atónita Jasper.

-Pues qué decirte- sonreí acomodándome el cabello- No pudo resistirse a Paureman y cayó rendida a mis pies-

-Creo que como lo dices es un poco exagerado- dijo Jasper fastidiada.

-No, lo digo en serio. Cuando dijo que sí entré a su casa y la llevé a la cama- 

-No mames- se dio un golpe en la frente.

-Sí mamo-

-¡A ver, pendeja!- uy, creo que se enojó- Te fuiste a disculpar por lo que pasó en la fiesta, y te recuerdo, en esa jodida fiesta te la cogiste borracha y por tu culpa, ¿y ni si quiera llevaban ni una pinche hora de novias y ya la traías en la cama para complacer tu pinche jodido deseo de usarla como pinche juguete sexual?-

-¡Cállate, ella no es mi juguete sexual! ¡Sabes que me gusta!- contesté de golpe, estaba tan enojada que empecé a gritar.

-¡Que te guste alguien no es lo mismo que estar enamorada! ¡Yo sé que amas a Amatista y a Lanis la quieres para un rato! ¡Y aparte no se necesita tener sexo para demostrar cariño!- me devolvió el grito igual de molesta.

-¿¡Qué quieres que haga!? ¡Amo a Amatista y si me puse en una relación con Lanis fue por que sé que le gusto!¿¡Y aparte, tú qué sabes de una relación!? ¡Ni siquiera has estado en una!- crucé la línea.

Jasper me miró enfadada, pero poco a poco sus ojos se veían tristes, agarró sus cosas y fue a la puerta de salida de mi casa, antes de marcharse agregó:

-Espero que puedas elegir- y se fue.

•

Vaya lunes de mierda, me peleé con Jasper y por mi culpa. Eran las 9 de la noche, estaba acostada en mi cama fumando. Estaría con Lanis divirtiéndome pero hoy tiene trabajo hasta tarde, también estaría bebiendo whisky pero, putamadre, cuando empezamos nuestro noviazgo esa mujer hizo que prometiera que no bebería whisky. Bueno, dije que dejaría el whisky pero no la cerveza. Fui a la ventana de mi cuarto y solté el humo de mi boca. Miré a las estrellas, y recordé cuando buscaba constelaciones con mi padre de pequeña.

-Papá, ¿dónde estarás?- dije en voz alta.

-¡PAPÁ! ¿¡DÓNDE ESTÁS!?- grité al cielo.

-¡Cállate el osico, niña desmadrosa!- gritó desde su ventana enfrente de mí la vecina, una vieja de 68 años.

-¡USTED CÁLLESE, VIEJA FEA, ALGUNOS INTENTAMOS DORMIR!- le levanté el dedo y cerré la ventana con fuerza.

Efectivamente, estaba ebria, pero ojo, no de whisky, si no de cerveza.

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Miren quién renació de las cenizas 7u7.

Felices pascuas, semana santa o lo que festejen xd.

Los amo un chingo uwu <3.

No se calienten, chavoz, esto es solo un calentamiento, ni siquiera se hacerca lo bueno 7uuu7.