FORZADA (Editando)

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Entré a la casa tratando de recordar algún nomento en que yo haya conocido a oliver de antes que lo conociera en la playa, pero no lo kogro recordar "tu ya me conoces de hace tiempo al igual que yo" recordé lo que dijo nates de salir del restaurante.

Porqué llegas tarde? —dijo Mario recargado en la pared de la cocina.

Bety se sintió mal y no pude llegar más temprano —dije dejando la rebanada de pastel al refrigerador.

Mario se quedó callado y solo observaba cada movimiento que hacía.

Me voy a dormir —dije.

Espera —dijo deteniendome del brazo.

No me toques —dije soltandome de su agarré.

Lo que pasó aquella noche solo quería...—dijo a intermedias.

Te dije que no quiero hablar sobre eso —dije.

Samantha lo siento, yo no quería hacerte daño...—dijo sin terminar.

Lo sientes...Después de que te portaste
Como un idiota y abusaste de mí —dije al borde de las lágrimas.

Sam por favor escucha —dijo.

CALLATE —dije gritando y llorando.

Tranquilizante —dijo tratando de acercarse.

No te acerques me has hecho mucho daño —dije dolida.

Sam se que no eh sido el mejor esposo  pero quiero que me perdones y quiero cambiar por ti —dijo.

Una persona como tu numca cambia —dije despechada.

Por favor Sam solo escucha —dijo.

Solo dejame en paz —dije llendome a la habitación.

Mario fue tras de mí pero alcance a entrar a la habitación antes de que me alcanzará.

Sam abre la puerta —dijo.

No —dije llorando.

Samantha abre la puerta —dijo en tono serio.

Largate! —dije gritando.

Abre la maldita puerta —dijo enojado.

Y dices que vas a cambiar...solo vete y dejame en paz —dije gritando.

Ya no escuche a Mario llamarme y decidí irme a acostar.

Desperté por las inmensas ganas de vomitar y me levanté rápidamente al baño.

Me di una ducha después de haberme sentido mejor, salí y me pusé un vestido floreado, bajé a desayunar y Mario no estaba por lo que supuse que estaría en el trabajo

Menos mal que no le vería la cara hasta la noche.

Al terminar de desayunar fuí a ver la tele ya que no tenía nada mas que hacer, pase tres horas viendo la tele hasta que decidí salir al jardín.

Disculpe señorita —dijo la señora que nos ayuda.

Si —dije sonriendo.

El señor Mario no me tiene permitido dejarla salir de la casa —dijo.

Pero solo voy al jardín —dije.

Lo siento, pero incluso no puede salir al jardín —dijo agachando la cabeza.

Qué? —dije enojada.

Lo siento señorita —dijo.

Esta loco, ni siquiera puedo respirar aire fresco? —dije alterada.

Señorita por favor no se altere —dijo la señora tratando de tranquilizarme.

Lo siento, usted no tiene la culpa —dije tranquilizandome.

Si por mi fuera la dejaría salir tan siquiera al jardín pero hay guardias que la vigilan en todo momento —dijo.

No se preocupe, se lo agradezco, pero estoy harta de ser solo un adorno —dije frustrada.

Si quieres puedo ayudar a hacer la cena —dijo sonriendo.

Esta bien —dije sonriendo.

Toda la tarde la pasamos cocinando entre risas y platicas, fue divertido hasta que llegó Mario.

Samantha —dijo Mario entrando a la cocina.

Lo volteó a ver y trae su saco en el brazo.

Lo siento señor —dijo la señora agachando la cabeza ante Mario.

No es su culpa —dije a la señora.

La señora alsa la cabeza y me ve.

Yo decidí venir a ayudarla a hacer la cena —dije.

Necesito hablar contigo —dijo en tono serio.

Mario se retiró y fuí detrás de él para reclamarle sobre el no tener permiso de no salir ni siquiera al jardín.

No crees que es algo extremista el no dejarme ni siquiera salir jardín —dije en tono enojado.

Crees que soy idiota, se que ayer tu no... —dijo enojado.

De qué hablas? —dije confundida.

Ayer no fuiste con Bety, sino con un...—dijo enojado.

Se fue a su escritorio y yo lo seguí entrando al despacho.

A caso tu estuviste conmigo para saber si anduve con Bety? —dije.

Bety habla ayer diciendo que si podías ir a verla a la casa por que se sentía mal, cuando supuestamente tu estabas comiendo con ella —dijo llendo hacia mi.

No dije nada, no podía decirle que si estuve con Bety sino sería capaz de llamarle a Bety para confirmar la mentira, debí haberle dicho a Bety.

Esta bien, no estuve con Bety —dije alzando la voz.

Entonces con quién estuviste —dijo acercándose más a mi.

Con...con mi hermano —dije nerviosa.

Si estuviste con tu hermano por qué eatas tan nerviosa? O será que me estás mintiendo —dijo aún más enojado.

Alejate —dije retrocediendo hasta cgocar con la pared.

Dime la verdad, ¿Con quién estuviste ayer? —dijo.

Señor —dijo la señora en la puerta.

Estoy ocupado —dijo enojado.

Pero tiene visita —dijo la señora.

Quién es? —dijo del mismo modo.

Es un señor, que quiere hablar con usted —dijo.

Déjelo pasar y dígale que en seguida voy —dijo tranquilizandose.

Si señor, con su permiso —dijo la señora llendose.

De ahora en adelante no podrás entrar a la cocina, salir al jardín —dijo llendose.

Estas loco —dije gritando.

Me tiré al piso y comencé a llorar de la rabia, teiateza y frustración, ya no quería vivir así.

Mi celular comenzó a sonar y lo tomé, era Bety quien me llamaba.
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Bueno —dije limpiandome las lágrimas.

Sam, qué tienes? —dijo Bett del otro lado de la línea.

No pude contenerme y otra vez me solté llorando.

Te hizo algo? —dijo.

No puedo salir, me tiene encerrada, no puedo salir ni siquiera al jardín —dije llorando.

Eses mal nacido —dijo Bety maldiciendo.

Tienes que ayudarme no puedo seguir más en esta casa —dije.

No se como le voy a hacer pero te ayudaré a salir de esa casa, pero tienes que aguantar un poco más  —dijo.