Mi vecino es un Pervertido ✏Yoonmin

✏De arrepentimientos y amores equivocados.

- No Namjoon, ¡Entiéndelo de una jodida vez, maldita sea! No podemos seguir juntos. ¿Que no entiendes que lo único que puedo hacer es dañarte?- Seokjin se dio la vuelta, dándole la espalda a su intento de ex novio para que no lo viese llorar.

Soltaba pequeños quejidos que intentaba acallar; Namjoon estaba parado detrás de él, mordiéndose el labio con los ojos cristalizados. Porque si hay algo que Kim Namjoon odia, es ver a su amor romperse de esa manera.

Tomó a Seokjin en sus brazos, arrullándolo como un niño pequeño; él sabía que Jin amaba ese tipo de afecto, porque fue el que le faltó en su infancia.

- Quizás... Quizás si me hagas daño. Pero, ¿Sabes qué, Jin? Estoy completamente consciente de ello. Sé que me dañarás como ningún otro, sé que tu toxicidad acabará por enfermarme. Seokjin, yo estoy totalmente seguro de que al estar contigo estoy firmando una condena con tus demonios. Pero... También sé que me dañará no tenerte aquí conmigo, me dolerá como el infierno no poder tenerte entre mis brazos...- acarició el cabello castaño de su novio para luego depositar un beso allí- El que te alejes me dolerá de la misma manera que tenerte cerca, dolerá igual. Así que, si va a doler de todas formas... Continúa lastimándome, Seokjin.-

Besó con ternura la frente de su mayor, quien irónicamente era más bajo que él.

Jin se abrazó con todas sus fuerzas a Namjoon, haciendo que éste lo sostuviera en su pecho.

- ¿Estarás conmigo a pesar de que te arroje a la miseria que debo calificar como vida?-

- Seokjin... Mientras seas tú, puedes lanzarme al infierno, si eso significa que puedo sostener tu mano.-

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Taehyung se levantó con dificultad de la cama donde reposaba.
Sintió su cabeza dar vueltas y muchas náuseas.

- Ouch... Veo aliens de colores...- se quejó llevando una mano a su cabeza.

- ¿Cómo te encuentras?- preguntó una voz desconocida para él.
Intentó buscar al dueño de esa voz, pero su vista fallaba y solo veía borroso.

- ¿Quién está ahí?- dijo poniendo sus manos en su rostro intentando defenderse de un posible ataque.

- Soy Chanyeol, te desmayaste y te traje al cuarto de huéspedes.-

- Con razón ese olor a polvo y humedad, se ve que nunca tienen hues- ¡ARGH, NO CORRAS LA CORTINA! ¡MIS OJOS, DEMASIADA LUZ!-

- Son las siete de la mañana, apenas está amaneciendo.- dijo Chanyeol confundido.

- ¿Siete? ¡MIERDA, JIMIN LLEGA A LAS NUEVE Y SU CASA DEBE HABER SIDO SAQUEADA, ROBADA, INCENDIADA Y QUIÉN SABE QUÉ MÁS! POR DIOS, DUMBO AYÚDAME. - suplicó arrodillándose frente a Chanyeol.

- Taehyung, creí haberte dejado en claro que evites los apodos por mis orejas. Además, son bonitas.- se quejó- El chico que estaba contigo también se quedó a cuidarte, está durmiendo en el sofá de la sala.-